Verdes Montenegro y Castro Bahamonde, Fernando. San Juan de Sistallo (Lugo), 23.IV.1682 – Madrid, 11.VIII.1741. Consejero de Hacienda e Indias, gobernador del Consejo de Hacienda y superintendente de Rentas Reales.
El que sería uno de los protagonistas de la política hacendística y económica del reinado de Felipe V (y también durante el fugaz reinado de Luis I), llegó a Madrid de su Galicia natal como paje del conde de Benavente, gracias a la intercesión de su hermano Diego, contador de dicha casa ducal, quien seguramente lo iniciaría asimismo en el oficio de las cuentas y de la gestión económica.
Su primer paso dentro de la carrera funcionarial de Hacienda fue una oficialía segunda en la Contaduría de Rentas y Quitaciones; obtuvo más tarde, en enero de 1713, una plaza de contador de título de la Contaduría Mayor de Cuentas. En 1715 fue destinado a Valencia como tesorero de Guerra, donde además sentó plaza de regidor. En 1717 recibió el hábito de caballero de Calatrava y regresó a Madrid con el nombramiento de oficial mayor de la Contaduría General de Valores. En 1718 fue designado contador supernumerario de título de la Contaduría Mayor de Cuentas, con el encargo específico de acabar las cuentas pendientes hasta 1713. En 1721 fue ascendido a tesorero mayor de la Tesorería Mayor de Hacienda, al mismo tiempo que se nombró al marqués de Campoflorido secretario del Despacho de Hacienda, siendo éste el primero en asumir la secretaría de Hacienda como un cargo bien definido y separado de otros ramos de gobierno. Sin embargo, si se atiende a lo expresado en 1724 por Luis Miraval, gobernador del Consejo de Castilla, durante el secretariado de Campoflorido, quien de hecho manejó la Real Hacienda era precisamente el tesorero mayor Verdes Montenegro.
La súbita abdicación de Felipe V en enero de 1724 creó una extrañísima situación, cercana casi a la bicefalia, ya que desde su retiro en La Granja y acompañado por Grimaldo, Felipe influía continuamente en su hijo Luis. En estas circunstancias, Campoflorido presentó su renuncia y aun tuvo que insistir una vez más para que le fuese aceptada. Su sustituto fue Verdes Montenegro. Antes amigos y colaboradores, las relaciones entre Campoflorido y Verdes se torcieron durante estos tiempos de crisis cortesana y gubernamental.
Se desconocen las razones de fondo de estas trifulcas palaciegas, el caso es que Verdes Montenegro se granjeó serias enemistades y sería objeto de una importante persecución política y judicial tras la muerte de Luis I y el dudosamente legal regreso de Felipe V al trono. Lo sustancial de la acusación es que firmó libranzas sin real decreto y que disimuló parte de los ingresos, mientras que lo sustancial de su alegato es que obedecía órdenes verbales de Luis I, que no se pusieron por escrito por estar en contra del parecer del rey padre. El proceso, muy complicado, se dilató hasta marzo de 1728 y todo parece indicar que hubo importantes transacciones por parte de todos los implicados.
Aunque el proceso fue finalmente exculpatorio, Verdes Montenegro sufrió sucesivamente prisión domiciliaria en Madrid y destierro en Ciudad Real, cuyas duraciones exactas se desconocen.
Superado el amargo trance, se le volvieron a abrir las puertas de la Administración y en ese mismo marzo de 1728 recibió sendas plazas de consejero de Hacienda e Indias. En 1735 fue nombrado superintendente de las Sisas de Madrid y en 1740 nuevamente fue llamado a la secretaría del Despacho de Hacienda, nombramiento al que se unió el de gobernador del Consejo de Hacienda y superintendente de Rentas Reales y de Distribución de Caudales. El 27 de febrero de 1741 se jubiló de todos sus empleos. Murió pocos meses después, el 11 de agosto.
Fuentes y bibl.: Archivo Histórico Nacional, Consejos suprimidos, libs. 735, 736, fols. 257v., 277r.; Hacienda, legs. 7933, 7934; Archivo General de Simancas: Gracia y Justicia, leg. 814; Dirección General del Tesoro, invent. 13, leg. 1, exp. 8; invent. 24, leg. 68.
G. Bernard, Le Sécretariat d’Etat et le Conseil Espagnol des Indes (1700-1808), Genève, Droz, 1972; J. A. Escudero, Los orígenes del Consejo de Ministros en España. La Junta Suprema de Estado, vol. I, Madrid, Editora Nacional, 1979, pág. 66; M. Burkholder, Biographical Dictionary of Councilors of the Indies, 1717-1808, Nueva York, Greenwood Press, 1986; V. de Cadenas y Vicent, Caballeros de la Orden de Calatrava que efectuaron sus pruebas de ingreso durante el siglo XVIII, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), 1987 (n.º 237); E. García Monerris, La Monarquía absoluta y el municipio borbónico: la reorganización de la oligarquía urbana en el Ayuntamiento de Valencia (1707-1800), Madrid, CSIC, 1991, pág. 416; S. Madrazo, Estado débil y ladrones poderosos en la España del siglo XVIII: historia de un peculado en el reinado de Felipe V, Madrid, Los Libros de la Catarata, 2000.
Rafael Escobedo