López Piquer, Luis. Valencia, 21.X.1802 – Madrid, 5.VI.1865. Pintor.
Su carrera profesional corrió muy pareja a la de su hermano Bernardo, y, como la suya, muy cercana a la del padre, Vicente López Portaña. Alumno de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid desde el año 1817, fue nombrado académico de mérito por la pintura de historia en 1825, cargando al tiempo con el compromiso que tenía su padre con ella: la realización bajo su dirección, y para situarlos bajo el dosel de la sala de juntas, de un Retrato de Fernando VII de cuerpo entero juntamente con el del Infante Carlos María como jefe principal de la Academia, con alguna alegoría a las nobles artes. Empezó además a hacer algunas suplencias a los profesores del Antiguo y del Natural, compaginándolas con sus asistencias como alumno; y fue protagonista de una sublevación de los alumnos, que se negaron a reconocerlo como profesor válido.
En 1827 la Academia recordó a Vicente López el compromiso contraído, a lo que contestó que su hijo Luis “tan luego como concluya una obra que está desempeñando para S.A.R. la infanta D.ª Francisca, se destinará al cumplimiento de la obra de los indicados retratos de S. M. y S.A. Y espero que bajo mi dirección se haga el honor que debe para corresponder a las finezas que le ha dispensado ese Rl. Cuerpo”.
En 1829 su padre relató las obras que llevaba ejecutadas para Fernando VII: una Vista del catafalco de la reina María Isabel, la bóveda de su antedespacho del Palacio Real (al fresco), el cuadro de la Presentación de la Virgen para la reina María Josefa Amalia (colocado en Aranjuez), la bóveda del antedormitorio de los Reyes (al fresco), un San Fernando (copia de Murillo, que regaló el Rey al príncipe Maximiliano de Sajonia), y el Retrato de Fernando VII (que regaló al Cuerpo de Voluntarios Realistas).
En 1830 pidió y obtuvo del Rey una pensión extraordinaria para ir a estudiar a Roma por cinco años, en lo que le apoyó la Academia; y se comprometió a remitir cada año un cuadro que acreditase sus progresos y aplicación. En 1833 se le concedió la Cruz Supernumeraria de la Real y Distinguida Orden Española de Carlos III (al igual que a su hermano Bernardo). En 1834, estando aún en Roma, le llegó el nombramiento de teniente director de pintura de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, pues al promocionar a director José Aparicio, él fue el elegido por la Reina Gobernadora de entre los académicos de mérito más antiguos. Pero no regresó de momento a España, pues en septiembre de 1835 se le prorrogó la pensión por año y medio más. En la exposición de la Academia del año 1839 tuvieron obra el padre y los dos hijos.
Parece que por motivos políticos (era carlista) marchó a vivir a París, en donde se casó con Virgina Mevil Duval, pero su padre le siguió proporcionando encargos para la Casa Real: en 1847 un lienzo de San Miguel para el altar mayor de la Real Capilla. Existen obras atribuidas originariamente a Vicente López Portaña que recientes estudios han contribuido a asignar a su hijo Luis (Díez, 1999). Por ejemplo, San Luis Gonzaga abrazando el crucifijo, obra de 1818. Otras obras realizadas en 1830 en el Real Monasterio de la Visitación de Santa María o Salesas en Orihuela (Alicante), algunas de las cuales están firmadas por Luis, pero otras no: Sagrada Familia en el taller del carpintero, los Sagrados corazones de Jesús y María adorados por ángeles, San Carlos Borromeo abrazando el crucifijo, San Francisco de Sales instituyendo la Orden de las Salesas, Milagro de santa Isabel de Portugal, Predicación de san Juan Bautista. También de reciente atribución son varios bocetos con el Martirio de san Esteban, El ángel avisando a san José dormido a la salida de Egipto, Liberación de san Pedro, preparatorios del gran lienzo de altar pintado para la iglesia de Castromocho (Palencia).
Otras atribuciones recientes son: San Miguel arcángel sometiendo al demonio, San Pedro y san Juan curando a un cojo, Aparición de la Virgen del Pilar a Santiago, Juno penetrando en la mansión del Sueño, Alegoría de las virtudes que deben adornar al hombre público, retrato de María Cristina de Borbón, retrato del infante Carlos María Isidro (de hacia 1845). Realizó además numerosos dibujos para que los alumnos copiasen en sus clases.
En 1859 fue nombrado académico de número de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando para cubrir la vacante producida por fallecimiento de Antonio María Esquivel. Cuando Luis López falleció en 1865 su plaza de académico quedó amortizada.
Obras de ~: Retrato de Fernando VII; Vista del catafalco de la reina María Isabel; Bóveda del antedespacho de Fernando VII en el Palacio Real (al fresco); Presentación de la Virgen; Bóveda del antedormitorio de los Reyes en el Palacio Real (al fresco); San Fernando (copia de Murillo); Martirio de san Esteban; San Miguel arcángel sometiendo al demonio; San Luis Gonzaga abrazando el crucifijo, 1818; San Pedro y san Juan curando a un cojo, 1821; Alegoría de las virtudes que deben adornar al hombre público, 1826; Aparición de la Virgen del Pilar a Santiago, 1826-1830; Juno penetrando en la mansión del Sueño, 1827; Sagrada Familia, 1830; Sagrados Corazones de Jesús y María adorados por ángeles, 1830; San Carlos Borromeo abrazando el crucifijo, 1830; San Francisco de Sales instituyendo la Orden de las Salesas, 1830; Milagro de santa Isabel de Portugal, 1830; Predicación de san Juan Bautista, 1830; Liberación de san Pedro, 1830; Retrato de María Cristina de Borbón, 1844; Retrato del infante Carlos María Isidro, 1845; San Miguel, 1847.
Bibl.: V. Cadenas Vicent, Extracto de los expedientes de la Orden de Carlos III (1771-1847), Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1979-1988; J. C. Brasas Egido, “Sobre tres lienzos de juventud de Luis López (1802-1865)”, en Boletín del Seminario de Estudios de Arte y Arqueología, XLVI (1980), págs. 518-522; J. L. Morales y Marín, Vicente López, Zaragoza, 1980; Los dibujos de la Academia, Madrid, Universidad Complutense, 1990; J. L. Díez, Vicente López (1772-1850), Madrid, Fundación de Apoyo a la Historia del Arte Hispánico, 1999; E. Navarrete Martínez, La Academia de Bellas Artes de San Fernando y la Pintura en la primera mitad del siglo XIX, Madrid, Fundación Universitaria Española, 1999; P. García Sepúlveda y E. Navarrete Martínez, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Departamento de Archivo, Biblioteca y Publicaciones. Relación general de académicos (1752 en adelante), Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, actualización anual [en línea], disponible en https://realacademiabellasartessanfernando.com/assets/docs/academicos/introduccion_relacion_general_de_academicos.pdf.
Esperanza Navarrete Martínez
