Silva y Guzmán, José Fernando. Sevilla, 21.II.1750 – Utrera (Sevilla), 24.X.1829. Erudito de la Compañía de Jesús (SI), mariólogo, bibliotecario.
Silva y Guzmán nació y pasó su infancia en Sevilla. El 15 de abril de 1765 ingresó en el noviciado de San Luis, que la Compañía de Jesús tenía en la ciudad. Se hallaba de novicio cuando se promulgó la orden de expulsión de los jesuitas de España, el 3 de abril de 1767. Según se había determinado para todos los que se encontrasen en tales condiciones, tuvo que permanecer en España y dejar a los demás Padres y Hermanos camino del destierro. Su familia utilizó todos los medios a su alcance para que dejara la Compañía, pero él permaneció firme a sus convicciones. Siguieron dos años de luchas continuas, hasta que a los 18 años de edad consiguió salir de Sevilla, camino de Italia, donde llegó en 1769 para unirse a los jesuitas españoles residentes en Rímini. En esta ciudad emitió sus votos y continuó sus estudios hasta ordenarse sacerdote. Aquí le sorprendería la supresión de la Compañía en 1773, y a partir de entonces dio comienzo para él un largo período de incertidumbre y clandestinidad.
En estos años recorrió Italia de norte a sur. En Rímini vivió un tiempo de forma estable colaborando con el cardenal Giuseppe Garampi. También residió en Tiferno, Arimini y Città di Castello, donde fue prefecto del Seminario y conservador de la Biblioteca de la Villa hasta 1796. Fue admitido como socio en la Academia Liberorum y comenzó a dar clases de griego y latín.
Se interesaba por todos los progresos de la ciencia y de la cultura. Se escribía con numerosas personalidades e intercambiaba pareceres con jesuitas de todas las nacionalidades. Desde 1773 hasta 1792 predicó, escribió y leyó incansablemente. Las obras y escritos de Silva son abundantes y tocan muy diversas disciplinas como la filosofía, la teología o la historia, pero la mayoría no están catalogados. Fruto de su preocupación por la extinta Compañía de Jesús fue una amplia
Su vida dio un importante giro cuando Pío VII decidió restablecer la Compañía. El 7 de agosto de 1814 en la Iglesia del Gesú de Roma se promulgó la Bula “Solicitudo omnium ecclesiarum”, mediante la cual quedaba restaurada la Compañía. A partir de este momento comienza el último periodo de la vida de Silva, que contaba con 64 años. El intercambio que había mantenido con jesuitas de toda Europa y su significación cultural le convirtieron en la persona propicia para formar parte de la comisión encargada de restablecer la Orden jesuita en España.
Salió para España el 18 de septiembre de 1814. Al frente de la expedición iba el padre Zúñiga como comisario y Silva como “socio” o secretario de éste. Llegaron a Madrid el 25 de noviembre de 1815 donde fueron muy bien recibidos y tuvieron una gran acogida acorde con la enorme expectación que había suscitado su regreso. Se entrevistaron con el nuncio y después se presentaron ante el rey Fernando VII, que tenía interés en recibir a los padres jesuitas.
Una vez atendidas todas las presentaciones oficiales, Silva se encargó de la entrega a la Compañía del Colegio Imperial de Madrid, donado por Fernando VII en diciembre de 1815. Se le encomendó elaborar el nuevo plan de estudios del centro, ya que nadie contaba con una experiencia cultural como la suya. Tuvo que hacer frente también a los numerosos problemas económicos del Colegio, pues el momento no era muy próspero y escaseaban los recursos para pagar a profesores y empleados. Para paliar estas estrecheces tuvo Silva que recurrir en varias ocasiones a la Junta de Restablecimiento, que le concedió ayudas para que continuase la labor educativa del Colegio.
Mantuvo durante estos años una estrecha correspondencia con el general de la Compañía en Roma y con jesuitas de toda España, que le informaban y consultaban toda clase de problemas y asuntos de orden espiritual, de gobierno y sobre erudición.
En 1820 triunfó la revolución liberal y la Compañía volvía a encontrarse en una situación semejante a la creada en tiempos de Carlos III, por este motivo Silva escribe a Roma y habla de la poca garantía que ofrecen las circunstancias. Poco después Fernando VII firma un decreto por el cual quedaba anulado el restablecimiento de la Compañía en España y en todos sus dominios. La noticia llegó a Roma con el asombro correspondiente. Frente a tales complicaciones Silva dejó todos sus cargos y se dispuso a tomar nuevas resoluciones, sin embargo, su avanzada edad no le permitió grandes determinaciones. Contaba con 70 años y el cansancio le aconsejó retirarse a Sevilla, entre familiares y amigos. Tenía en proyecto la idea de un nuevo colegio en Utrera y estando en negociaciones para su fundación, Silva murió el 24 de octubre de 1829 en esta localidad sevillana a la edad de 79 años.
Obras de ~: Scritto apologetico della condotta del Nunzio Apostolico nella Corte di Vienna, s. l., 1783; Allarme della vera religione, e della sana politica contro gli odierni attentati dell´ irreligione e dell´ anarchia, s. l., s. f.; Duæ orationes in laudem Card. Garampi publice habitæ Arimini; Duæ orationes Tiferni habitaæ, una de lingua græca, de gallica altera, s. l., s. f.; Notas a la Relacion Abreviada de la Republica que han establecido los Religiosos de la Compañia de Jesus de las Provincias de Portugal y España en los dominios de las dos Monarquias, s. l., s. f.; Oratio de Christi cruciatibus in Palatio publico habita, s. l., s. f.; Oratio de Deiparæ animi cruciatibus habita in Templo Collegii olim Soc. Jesu, s. l., s. f.; Storia critica dell´ opinioni filosofiche sulla causa fisica de´ terremoto, s. l., s. f.; Storia critica dell´ origine, progressi, e stato attuale del Giansenismo, s. l., s. f.
Bibl.: P Herrera Puga, Una personalidad inédita de la Ilustración, El P. José de Silva (1750-1829), vol. 12, Granada, Colección Monográfica Universidad de Granada, 1971; J. Simón Díaz, Historia del Colegio Imperial de Madrid: (del Estudio de la Villa al Instituto de San Isidro, años 1346-1955), Madrid, Instituto de Estudios Madrileños, 1992, pág. 406; P. Herrera Puga, “Silva y Guzmán, José Fernando”, en E. Ch. O'Neill y J. M. Domínguez, Diccionario Histórico de la Compañía de Jesús: Biográfico-Temático, vol. IV, Madrid, Universidad Pontificia de Comillas, 2001, pág. 3576.
María Velázquez de Castro