Laphitz, Francisco. Falucho. Arizcum (Navarra), 29.II.1832 – Buenos Aires (Argentina), 25.X.1905. Sacerdote, escritor.
Cursó estudios de Humanidades en el seminario de Larresore, población francesa de los Bajos Pirineos. Terminados los preparatorios, ingresó al seminario de Bayona, especializándose en Filosofía, Derecho Canónico y Teología. Ordenado sacerdote, fue nombrado teniente cura de Baigorry, y más tarde cura de Alçay. Entró en la Congregación de los padres del Sagrado Corazón de Jesús, en 1867, en Betharram, profesando al año siguiente. Fue uno de los primeros sacerdotes vascos llegados al Río de la Plata, destinado a Montevideo, trabajó en el ministerio de la predicación y de la confesión. Se consagró a la edificación de la iglesia del Cerro, allí abrió escuelas para la educación cristiana de la niñez, y con frecuencia salía a dar misiones por diversos puntos de la campaña oriental.
Llegó a Buenos Aires en 1875, enviado por sus superiores, y por espacio de treinta años ejerció su ejemplar apostolado. En la iglesia de San Juan, donde fue nombrado superior y capellán. Llegó a la Argentina bajo el gobierno del presidente Mitre, cuando se desarrollaba la Guerra de la Triple Alianza —Argentina, Brasil y Uruguay— contra el Paraguay; guerra que le costó al Gobierno argentino la popularidad y credibilidad, por ser considerada un crimen fraticida. Terminada la guerra del Paraguay, y hallándose acéfala la autoridad eclesiástica de aquella república, sufragánea del arzobispado de Buenos Aires, el padre Laphitz, acompañó en calidad de secretario a monseñor Mariano Antonio Espinosa, enviado para solucionar importantes asuntos entre Iglesia y Estado. Algunos años después volvió a trasladarse a Asunción, con el nuevo delegado apostólico, monseñor Di Pietro, después cardenal, ejerciendo su ministerio eclesiástico entre las familias paraguayas. Al regresar a Argentina se reintegró a la iglesia de San Juan, dedicándose a los trabajos de embellecimiento del templo. Fue vicedirector de la Sociedad de San Francisco Solano, protectora de las misiones. Cuando los terremotos asolaron las regiones andinas, en 1901, recorrió las provincias de Mendoza, San Juan y La Rioja para llevar consuelo a los pobladores y distribuir limosnas que la generosidad porteña puso en sus manos. Cruzó la región pampeana acompañando a los prelados en sus visitas pastorales, predicó ejercicios espirituales y dirigió comunidades religiosas. Luchó contra el protestantismo y cooperó eficazmente al desarrollo de las obras de la conservación de la fe. En la prosa adquirió prestigio bajo el seudónimo de Falucho, colaborando el diario El Pueblo.
Bibl.: V. O. Cutolo, Nuevo Diccionario Biográfico Argentino, t. IV, Buenos Aires, Elche, 1969, págs. 70-71.
Sandra Fabiana Olivero
