Iturrate y Ortiz de Landa, Domingo Santiago de. Lubiano (Álava), 14.I.1770 – Santa Elena (Cuba-Florida), 1815. Franciscano (OFM), misionero en California.
Era hijo de Francisco Emeterio Martínez de Iturrate Ochoa de Ondategui y de Vicencia Ortiz de Landa Sáenz de la Fuente. Recibió el hábito franciscano en el convento de Vitoria en 1787. Al partir para América, desde Cádiz, en 1795, fue descrito como de estatura normal, delgado, pelo castaño, ojos azules, cejas pobladas y labios carnosos. Había sido alistado para el servicio misionero en el colegio de San Fernando de México (que formaba parte de un conjunto de colegios franciscanos de propaganda fide destinados a la concentración de los sacerdotes y religiosos que llegaban a las colonias y a su formación como misioneros antes de ser enviados a sus destinos), por el comisario de su Orden, fray Manuel Arévalo, embarcándose con otros religiosos en la fragata La Preciosa.
Salió del colegio de San Fernando el 3 de febrero y llegó a la Alta California el 22 de agosto de 1800.
Fermín Francisco de Lasuén, sucesor de fray Junípero Serra, lo destinó inmediatamente a la misión de San Juan Bautista, donde sirvió hasta que su delicada salud le obligó a pedir el retiro. La última entrada oficial en los registros de la misión fue el 25 de julio de 1809 y zarpó hacia México en octubre del mismo año.
Durante el tiempo de su servicio en San Juan Bautista, se construyó la última iglesia de la misión, cuya primera piedra se colocó el 30 de junio de 1803, sería reformada cinco años más tarde por el padre Felipe de la Cuesta y terminada definitivamente el 23 de junio de 1812, después de la partida de Iturrate y Ortiz.
Antes de salir de California, también ofició en la misión de Santa Cruz en 1800 y 1803, y en la de San Carlos Borromeo en 1801. También mantenía relación con el capitán José de la Guerra y Noriega, encargado del presidio de Santa Bárbara, de quien, por otro lado, parece ser que era pariente.
Iturrate y Ortiz consiguió, el 4 de diciembre de 1811, ser desafiliado del colegio de San Fernando después de haber ejercido y practicado laudablemente y con plausible celo el ministerio y sagrado empleo de misionero apostólico, así entre fieles como entre infieles.
Se incorporó a la provincia de Santa Elena (Cuba- Florida). Falleció en 1815.
Bibl.: H. H. Bancroft, History of California, San Francisco, The History Company, 1886-1890; Z. Engelhardt, Missions and Missionaries of California, San Francisco, The James H. Barry Company, 1915, 4 vols. (2.ª ed., Santa Barbara, Mission Santa Barbara, 1930); San Juan Bautista, Santa Barbara, Mission Santa Barbara, 1931; R. R. Flores Caballero, La contrarrevolución en la independencia. Los españoles en la vida política, social y económica de México 1804-1838, México, El Colegio de México, 1969; A. Martínez Salazar, Presencia alavesa en América y Filipinas, Vitoria, Diputación Foral de Álava, 1988; R. H. Jackson, “The impact of Liberal Policy on Mexico’s Northern Frontier: Mission secularization and the Development of Alta California”, en Colonia Latin American Historial Rewiev, 2, 2 (1992), págs. 195-225; I. Arrieta Elizalde e I. Arrieta Elizalde, Transculturización y civilización en la formación de California: la RSBAP y el aporte vasco (1769-1834), tesis doctoral, Vitoria, Universidad del País Vasco, 1996; I. Arrieta Elizalde, Ilustración y utopía. Los frailes vascos y la RSBAP en California (1769-1834), San Sebastián, Real Sociedad Bascongada de Amigos del País, 2004 (col. Ilustración Vasca, vol. 13), págs. 271-272.
Antonio Astorgano Abajo