González de las Heras, Tomás. Tomás de Santa María. Madrid, 1592 – 11.VII.1634. Religioso de la Orden de la Merced Descalza, redentor de cautivos, cofundador de la rama de descalzos, profesor, rector, comendador de otros, definidor provincial, primer provincial de Castilla de la “Descalcez”, escritor, venerable.
Fue hijo de Andrés González y de Catalina de las Heras, ambos naturales y residentes en Madrid. Profesó en el colegio de Rivas de Jarama (Madrid) de manos de su comendador, fray Juan Bautista de San Lorenzo, el 16 de marzo de 1608, contando apenas dieciséis años de edad. Estudió en el convento del Val (Valladolid), siendo su profesor de Artes y Filosofía el venerable padre fray Pedro de la Madre de Dios. Luego estudió Teología en Salamanca. Discípulo aventajado, en 1616, es decir, a los veinticuatro años de edad, fue nombrado primer lector de Artes.
Fue uno de los fundadores de la “Descalcez”, es decir, la creación de la rama de descalzos de la Orden mercedaria, y así aparece en las crónicas o historias de la Orden. Había logrado crear el colegio de calzados en el convento de Rivas de Jarama (Madrid) donde fue profesor de Filosofía. En 1620 pasó al colegio universitario de Salamanca como profesor de Teología.
Dice el biógrafo J. A. Álvarez y Baena (1791) que “su doctrina, prudencia, ingenio y virtudes hicieron que fuese reputado en aquella Universidad [Salamanca] por uno de los mayores teólogos, y en su provincia [religiosa] por digno de los mayores empleos”.
A continuación se enuncian éstos: rector del colegio universitario de Salamanca, comendador del convento matriz de Santa Bárbara (Madrid), sexto comendador del convento de Rivas de Jarama (Madrid), dos veces definidor general de la provincia y, finalmente, primer provincial descalzo de la provincia mercedaria de San José, que abarcaba ambas Castillas.
En el tercer Capítulo General de descalzos en España, celebrado en Lora del Río (Sevilla) fue votado para vicario general de la Orden. En este Capítulo se resolvieron por fray Tomás de Santa María todas las dudas surgidas relativas a las constituciones de la Orden que, resueltas por escrito, clara y sucintamente, “fueron dadas a la prensa”, según Álvarez y Baena, sin que se hayan encontrado.
Murió santamente en el convento de Santa Bárbara de Madrid, el 11 de julio de 1634, contando solamente cuarenta y dos años. La fama de sus virtudes hizo que pronto se le declarara “venerable” por la Iglesia Católica y que, además, se incoaran informaciones jurídicas para encaminarlas hacia un proceso de beatificación, que quedó estancado, como tantos otros.
Respecto a sus escritos, el mismo Álvarez y Baena dice que dejó algunos manuscritos, que no define bien ni sabía dónde se encontraban, y que solamente se imprimieron dos sermones suyos, uno sobre santa Gertrudis, en 1626, y otro, en la canonización de san Pedro Nolasco, en el año 1633. Estos dos impresos se suelen registrar por los bibliógrafos, pero en la actualidad están sin localizar.
Obras de ~: Sermón de Santa Gertrudis la Magna, predicado en el convento de la Concepción de Mercedarias descalzas de Madrid, Madrid, 1626; Sermón de San Pedro Nolasco, predicado en las fiestas de su canonización, en el Convento de Santa Bárbara, Madrid, 1633.
Bibl.: P. de San Cecilio, Annales del Orden de Desçalcos, Parte Segunda, Barcelona, Dionisio Hidalgo, 1669, págs. 581 y 603; A. de la Santíssima Trinidad, Biblioteca Mercedaria Descalza de la Provincia de San Joseph, hasta 1787, fol. 128 (ms.); J. A. Álvarez y Baena, Hijos de Madrid, ilustres en santidad, dignidades, armas, ciencias y letras. Diccionario histórico, vol. IV, Madrid, en la Oficina de don Benito Cano, 1791, págs. 339- 340; J. A. Garí y Siumell, Biblioteca Mercedaria, ó de Escritores de la Celeste, Real y Militar Orden de la Merced [...], Barcelona, Imprenta de los Herederos de la Viuda Pla, 1875, págs. 170- 171, n.º 383; A. Sierra Corella, “Anales Bibliográficos de Madrid. Año 1626”, en Bibliografía Hispánica, III, n.º 10 (octubre de 1944), pág. 688; G. Placer, Bibliografía Mercedaria, vol. II, Madrid, Publicaciones del Monasterio de Poyo, Revista Estudios, 1968, pág. 802, n.os 5824 y 5825; J. Moreno Garbayo, La Imprenta en Madrid (1626-1650) [...], vol. I, Madrid, Arco/Libros, 1999, pág. 183, n.º 156.
Fernando Rodríguez de la Torre
