Pérez Villanueva, Joaquín. Barco de Ávila (Ávila), 17.XII.1910 – Madrid, 31.V.1994. Profesor universitario y político.
Educado en un acendrado catolicismo familiar, asumió el humanismo cristiano como forma de vida, lo que se tradujo en la valoración y respeto que siempre tuvo a la dignidad de la persona, convicción que se manifestó en su trato humano y educado que admiraron todos los que le conocieron.
Estudió Derecho e Historia en la Universidad de Valladolid con brillante expediente académico, hasta el punto de obtener Premio Extraordinario de carrera.
Dada su formación religiosa e ideológica, durante estos años, militó en la Asociación de Estudiantes Católicos de su Universidad, de la que llegó a ser presidente. Terminada la licenciatura en Filosofía y Letras, consiguió, por oposición, una beca para realizar un viaje universitario a Grecia durante el verano de 1934, que resultó determinante para que el Ministerio de Educación le nombrara (el 29 de noviembre de 1935) profesor agregado a la Cátedra de Historia del Arte y Arqueología de la Universidad de Valladolid.
La Guerra Civil (1936-1939) le sorprendió en Madrid, donde se encontraba accidentalmente por haberle llamado Ángel Herrera Oria para ofrecerle la presidencia nacional de la Asociación de Jóvenes Católicos. La experiencia de la guerra fue para él las cárceles Modelo y la de San Antón, en las que estuvo preso durante ocho meses, siendo detenido otras dos veces más, después de haber sido puesto en libertad.
El 26 de marzo de 1940 fue aprobado su “expediente de depuración”, sentenciando que fuera repuesto en el mismo cargo que ocupaba antes de la trágica contienda.
El 13 de noviembre de 1940 obtuvo la plaza de catedrático numerario, por oposición, turno libre, de Historia Moderna y Contemporánea en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Santiago de Compostela, de donde pasó, el 7 de diciembre de 1943, a la de Valladolid en virtud de un concurso de traslado. En esta Universidad llegó a ser decano de la Facultad de Filosofía y Letras.
El 8 de octubre de 1946, interrumpió su carrera académica al tener que solicitar una excedencia forzosa por haber sido nombrado gobernador civil de Segovia y después de Salamanca, desde donde fue llamado por Joaquín Ruiz-Giménez, ministro de Educación, para ocupar el cargo de director general de Universidades (1951-1956). Bajo su dirección se llevó un vasto plan de reformas, entre las que cabe destacar: la I Asamblea General de Universidades garantizando amplia libertad sobre la realidad analizada, los “encuentros de Poesía” con las figuras sobresalientes de la época, los nombramientos de grandes intelectuales como rectores de las principales universidades españolas (Pedro Laín Entralgo, para Madrid; Antonio Tovar para la de Salamanca y Francisco Buscaróns para la de Barcelona) y la modificación reglamentaria de acceso a nuevas cátedras, mediante el cambio de la composición de tribunales de oposición. El 19 de enero de 1956, el ministro de Asuntos Exteriores le nombró vocal del Consejo del Patronato de la Escuela Diplomática.
Con todo, semejante apertura suscitó la hostilidad en ambientes políticos intransigentes que, unido al movimiento estudiantil, terminaron por provocar la crisis de febrero de 1956 y la caída del ministro Ruiz- Giménez con todo su equipo. En consecuencia, el 6 de marzo de 1956 se reintegró a la Cátedra de Historia Moderna y Contemporánea de la Universidad de Valladolid; pero por poco tiempo, ya que, un año después, el 3 de abril 1957, era nombrado director del Colegio de España en la Ciudad Universitaria de París.
Durante su estancia en Francia, además de dirigir el Colegio, se incorporó a la delegación permanente de España en la UNESCO e influyó para que el Gobierno francés creara una Cátedra de professeur associé en la Universidad de París con destino en el Instituto de Estudios Hispánicos de la Sorbona. En 1968, el Colegio de España fue cerrado a causa de los tumultos provocados por el “mayo” parisino, por lo que era cesado del cargo el 23 de septiembre, pero continuó en París durante tres años más, enseñando en la Cátedra creada como profesor asociado. Durante este tiempo tuvo oportunidad de tomar conciencia y contacto con las corrientes historiográficas francesas (escuela de Annales) y de comprobar el atraso metodológico que existía en la investigación histórica española.
La modificación de la estructura departamental universitaria que comenzó a realizarse por aquellos años dentro de la Universidad española, permitió la creación de nuevos departamentos; dentro de los que se generaron en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Madrid, se encuentra el de Historia de la Edad Moderna, al que, el 10 de abril de 1971, Pérez Villanueva se incorporó como catedrático supernumerario contratado, alcanzando la plaza de catedrático numerario unos años después. El 12 de julio de 1973 fue nombrado vicerrector de dicha Universidad, al mismo tiempo que se hacía cargo de la Dirección Superior del Gabinete de Estudios y Asistencia Universitaria, pero el 11 de enero de 1974, un Real Decreto le nombraba director general de Bellas Artes del Ministerio de Educación y Ciencia, cargo que ocupó hasta el 25 de octubre del mismo año. Reintegrado al Departamento de Historia Moderna, puso en marcha un vasto proyecto de investigación sobre la historia política y eclesiástica de la Edad Moderna española en el que participaron todos los profesores y becarios que componían el Departamento; entre los diversos logros alcanzados, dos resultan fundamentales porque sus repercusiones aún perviven: en 1978, bajo su dirección, se celebraba el primer Symposium internacional sobre la Inquisición española con motivo de conmemorarse el quinto centenario de su fundación, en el que se incorporaban las nuevas metodologías históricas, que él había aprendido en París, en los estudios de los documentos y procesos inquisitoriales, como reflejan los trabajos publicados en las correspondientes actas (Madrid, Siglo XXI, 1980); pero, además, en el umbral de su jubilación aún tuvo tiempo y coraje para fundar un Centro de Estudios Inquisitoriales (en 1980), dedicado a la investigación sobre temas relacionados con el Santo Oficio; entre las diversas obras publicadas, es preciso destacar la Historia de la Inquisición en España y América (3 vols.), dirigida por J. Pérez Villanueva y B. Escandell, que constituye —en opinión unánime de los especialistas— el más completo y mejor estudio realizado hasta ahora sobre tan debatida institución. En 1986 fue elegido académico numerario de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, puesto en el que desplegó una intensa actividad hasta su muerte, ocurrida en 1994.
Obras de ~: Planteamiento ideológico inicial de la guerra de independencia, Valladolid, Sever-Cuesta, 1960; Reflexiones sobre la historia en nuestros días: lección inaugural del curso 1973-1974, Cantoblanco (Madrid), Servicio de Publicaciones, 1974; Sor María de Agreda y Felipe IV: un epistolario en su tiempo, Madrid, La Editorial Católica, 1979; (dir.), La inquisición española: nueva visión, nuevos horizontes (I Simposium Internacional sobre la Inquisición Española), Madrid, Siglo XXI de España, 1980; con B. Escandell Bonet (dirs.), Historia de la Inquisición en España y América, Madrid, La Editorial Católica, 1984 (Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, Centro de Estudios Inquisitoriales, 1984-2000), 3 vols.; Felipe IV y Luisa Enríquez Manrique de Lara, Condesa de Paredes de Nava: un epistolario inédito, Salamanca, Caja de Ahorros y Monte de Piedad, 1986; El Conde Félix Gazzola, primer director del Real Colegio de Artillería: un italiano en la Ilustración española, Segovia, Patronato del Alcázar de Segovia, 1987; El italiano Felice Gazzola en la Ilustración española: discurso del académico electo D. Joaquín Pérez Villanueva, leído [...] el día 25 de enero de 1987 y contestación del Sr. D. José Hernández Díaz, Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 1987; Ramón Menéndez Pidal: su vida y su tiempo, pról. de R. Lapesa, Madrid, Espasa Calpe, 1991.
Fuentes y bibl.: Archivo General de la Administración, legs. 31/2022; 31/2211; 32/15532; 32/15532; 55/1970; Archivo Subdirección General de Costes de Personal y Pensiones Públicas (Madrid), exp. JM166/1/81; Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, exp. 95-2/7.
J. Tusell, Franco y los católicos. La política interior española entre 1945 y 1957, Madrid, Alianza, 1984; P. Fernández Alvadalejo, J. Martínez Millán y V. Pinto Crespo (coords.), Política, religión, e inquisición en la España Moderna: homenaje a Joaquín Pérez Villanueva, Madrid, Ediciones de la Universidad Autónoma, 1996; G. Pasamar Alzuria e I. Peiró Martín, Diccionario Akal de historiadores españoles contemporáneos (1840-1980), Madrid, Akal, 2000; J. Pérez Villanueva y B. Escandell, Historia de la Inquisición en España y América, Madrid, Biblioteca de Autores Cristianos, Centro de Estudios Inquisitoriales, 2000, vol. III, In memoriam de Joaquín Pérez Villanueva, págs. XXII-XXXVIII (testimonios de L. Suárez Fernández, J. Ruiz-Giménez, J. L. Camblor, J. Martínez Millán, J. J. Martín González y B. Escandell).
José Martínez Millán
