Alcover Morell, Francisca. Sóller, Mallorca (Islas Baleares), 19.X.1912 – 10.III.1954. Poetisa y escritora.
Sus padres, Pedro Antonio Alcover y María Morell, formaron un hogar cristiano; disfrutaba de bienestar económico y gozaba de prestigio moral y social en Sóller. Francisca fue la única hija que alegró el feliz hogar los años de su infancia y juventud. En 1915, al cumplir los tres años, ingresó en el colegio escolapio de la ciudad. El colegio de Sóller, fundado en 1857, era un centro poco numeroso, en el que se vivía un ambiente familiar, característico de la pedagogía calasancia, y hermanaba este aspecto con la exigencia educativa intelectual y religiosa. Francisca permaneció en el colegio hasta los dieciocho años. Se distinguió por su amor agradecido a las religiosas, su buen comportamiento, su aplicación y su actividad apostólica en las diversas asociaciones religiosas del centro, especialmente, en el movimiento seglar de la Acción Católica.
Al salir del colegio, dedicó a la Acción Católica todo el cariño y esfuerzo de su juventud. El 20 de octubre de 1933 fue nombrada secretaria. Tenía veintiún años. El 25 de febrero de 1939, la eligieron presidenta diocesana, cargo que ocupó hasta el 30 de noviembre de 1942. Formó parte de la junta nacional. Desde pequeña asistía con sus padres a las vigilias de la Adoración Nocturna, y siguió durante toda su vida perteneciendo a esta asociación. Trabajó activamente en la Escuela Nocturna, donde las mujeres trabajadoras, que no habían podido asistir a ninguna escuela, aprendían las primeras letras y formación religiosa.
Ejercitó el apostolado con los enfermos. Perteneció, además, a todas las asociaciones religiosas de la ciudad de Sóller.
Durante los años de colegio, además del ciclo completo de Enseñanza Primaria, estudió pintura y música y empezó a cultivar una de sus aficiones favoritas, que continuó hasta su última enfermedad: la literatura. Al salir del colegio le tocó vivir la llegada de la SegundaRepública española en 1931, y, tras cinco años de inestabilidad política, la Guerra Civil (1936-1939). En esta situación, Francisca optó por el apostolado de la prensa. A partir de 1930 escribió artículos en diversos periódicos, labor que continuó hasta el año 1953, un año antes de su muerte. Colaboró de manera asidua en los semanarios El luchador, entre 1933 y 1941 (con un total de cuatrocientos cincuenta artículos), Sóller (1930-1953), La Voz de Sóller (1930-1936) y en la revista de Acción Católica, Excelsior, entre 1936 y 1938 (con un total de treinta y nueve artículos). Para ella estos artículos eran un medio para defender a la Iglesia de los ataques anticlericales y para difundir la doctrina y moral católicas. Además, destacó en el campo de la poesía y la prosa poética. En su obra poética canta el maravilloso entorno del valle y la bahía de Sóller: el Puig Major, la nieve, la luna, el agua, el campo; reminiscencias franciscanas que producen en el lector ecos de su propia sensibilidad religiosa. La mayor parte de sus poesías están escritas en mallorquín; muy pocas en castellano. Fue una mujer de vasta cultura, poetisa autodidacta, dotada de singular sensibilidad. Enamorada de la belleza dondequiera que la descubriera, la cantó con tonalidad propia. Poco después de su muerte, en 1955, parte de su poesía la prologó y publicó Guillem Colom, sollerense y poeta.
El revés de fortuna de sus padres, en la década 1940- 1950, lo afrontó con firmeza y se puso a trabajar como administrativa en las oficinas del ferrocarril Sóller- Palma, del que su padre había sido el principal accionista.
Los cuatro últimos años de su vida están marcados por el sufrimiento. Un golpe fortuito en la cabeza degeneró en un tumor maligno, quedó ciega, imposibilitada y con fuertes dolores. Todo lo soportó con paciencia y resignación cristiana. Falleció el 10 de marzo de 1954, a los cuarenta y un años de edad. Francisca Alcover gozaba gran fama de santidad antes y después de su muerte. La apertura del proceso de canonización tuvo lugar en Sóller, el 3 de octubre de 1997, presidido por el obispo de Palma, monseñor Teodoro Úbeda.
Obras de ~: Obra poética, Palma de Mallorca, 1955 (2.ª ed., pról. de G. Colom y epíl. de F. Bonafè, Palma, Miramar, [1999]); artículos en Sóller (3 de septiembre de 1932-1 de mayo de 1954), El luchador (1933-1941) y Excelsior (1936- 1938).
Bibl.: Francisca Alcover Morell, Sóller, 1996; M. Tur, Sóller, Palma, 1999, pág. 68; J. A. Morel Gonzàlez, La verdad con el ejemplo, Sóller, 2004.
María Luisa Labarta, SChP