Joya y García, Nicolás. Berja (Almería), 16.II.1899 – Xauen (Marruecos), 24.XII.1928. Teniente de Ingenieros.
Ingresó en la Academia de Ingenieros del Ejército de Guadalajara el 2 de septiembre de 1918 y fue nombrado teniente del Cuerpo el 29 de septiembre de 1923, después de terminar los estudios reglamentarios.
Destinado al 1.er Regimiento de Zapadores Minadores al salir del centro de enseñanza, con una de sus compañías tomó parte en la Escuela Práctica de conjunto verificada en Buñol en febrero de 1924. En marzo de este año se le destinó al Regimiento de Telégrafos, en el cual prestó servicios en El Pardo hasta septiembre, marchando en esta fecha con la 6.ª compañía expedicionaria a África, en el marco de la llamada Guerra de África.
Incorporado el día 18 de marzo de 1924 a Ceuta, salió al mando de una sección en la columna del teniente coronel Laviña, resultando contuso a consecuencia de una caída de caballo. Posteriormente, tomó parte en la operación del día 19 sobre el macizo de Gorguea y fue evacuado a Tetuán por prescripción facultativa. Una vez repuesto, salió el 4 de octubre con la columna Ovilo, cooperando en la ocupación de Amegar y dirigiendo las obras de fortificación de este punto, por no haber en el vivac un oficial de zapadores. El día 18 marchó al Fondac de Ain-Yedida resultando su compañía separada de la columna y atacada, sufriendo 12 bajas su sección y perdiendo todo el ganado y la mayor parte del material cerca de Tarames. En noviembre preparó los enlaces de la columna Saro en Ben Karrik, desempeñando eventualmente varios cometidos de zapador.
Dorante el año 1925 tomó parte en las operaciones de la columna Saro en R’gaia y en el desembarco en Alcázar Seguer con la columna Sonsa (30 de marzo), acción poco conocida pero importante en la historia de las modernas Fuerzas Armadas españolas, pues fue el primer desembarco de una gran unidad con seis unidades tipo batallón y sus correspondientes apoyos sobre una costa hostil. Los ingenieros en esta acción (dos compañías de zapadores, dos estaciones ópticas, una estación radiotelegráfica y una sección de tendido) contribuyeron a la organización de las posiciones y en apoyo al desembarco del resto de las unidades y materiales.
En el mismo año de 1925, también participó en el socorro a la posición de Ayabed con la columna Campins, en la ocupación de los montes de Sousen con la columna Franco y, después de las maniobras previas de entrenamiento, intervino en los amagos sobre Uad Lau y en el desembarco en la playa de la Cebadilla (conocido como el Desembarco de Alhucemas, el 8 de septiembre) y subsiguientes operaciones sobre Monte Malmusi, de las Palomas y Adrar Seguer.
Sin perjuicio de su servicio normal, se le nombró arquitecto del poblado de Emil, director de las obras del matadero de Morro Viejo y de las de construcción del Hospital de la Cruz Roja, cuyo asentamiento en Cala Bonita fue elegido por él.
El año 1926 siguió en dichos cometidos y tomó parte en febrero en la operación sobre el castillo de Buya Hedí, estableciendo los enlaces pertinentes. En las operaciones de la columna Dolla en julio, sobre Beni Urriaguel, desempeñó el cargo de jefe de transmisiones, dirigiendo, además, la construcción de una pista a Tamasín. En octubre era
destinado a la Plana Mayor del Regimiento, incorporándose al Pardo y prestando sus servicios en este Cantón hasta mayo de 1928, en que se le destinaba al Batallón de Ingenieros de Tetuán, encargándose de los trabajos de construcción de pistas en la zona de Bab Taza. En septiembre se trasladó a Barranda y en octubre a Anazar, con igual cometido.
El día de Navidad, siempre de 1928, al marchar desde Anazar a Tetuán para practicar la liquidación de fondos de su compañía, fue objeto de una agresión a 1.600 metros del puente de Fomento, en la carretera de Xauen, siendo trasladado herido al hospital de esta localidad, donde falleció el mismo día.
El teniente Joya, en su corta vida militar, tuvo ocasión de tomar parte en numerosos hechos de armas durante las operaciones de 1924 y en el desembarco de Alhucemas, así como en otras numerosas acciones que fueron su consecuencia. En el aspecto técnico, en la improvisación de obras públicas que siguió a la ocupación de extensos territorios en estado bárbaro, realizó trabajos de ingeniería, demostrando simultáneamente, sus cualidades militares y sus aptitudes técnicas.
Se hallaba en posesión de una cruz roja de 1.ª clase del Mérito Militar, medalla Militar de Marruecos con pasador Tetuán y la medalla de la Cruz Hoja Española.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia (AGMS), Exps. Personales.
Estados (Escalillas) del Cuerpo de Ingenieros, 1895-1929; “Biografías y Necrologías”, en Revista del Memorial de Ingenieros (noviembre de 1929); J. López Muiños, Algunos aspectos de la Ingeniería Militar española y el Cuerpo Técnico, Madrid, Ministerio de Defensa, 1993; F. J. Jiménez Moyano, “El Desembarco de Alcázar Seguer”, en Revista de historia militar, 99 (2006), págs. 59-76.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño