Aguilar Alvarado, Blas. Úbeda (Jaén), 1869 – 1943. Periodista y político.
Nació en Úbeda en 1869. Estudió la carrera de Derecho pero dedicó su vida profesional al ejercicio del periodismo, en el que destacó como articulista en varios semanarios y revistas. Una buena parte de estos artículos de prensa versaba sobre temas políticos, y en ellos aporta informaciones sobre los acuerdos tomados en los consejos de ministros. Como periodista se inició en La Correspondencia de España, periódico en el que era redactor su tío Juan Aguilar Catena, notable escritor ubetense. Colaboró en numerosos periódicos, como La Prensa, El Parlamento y La Correspondencia de San Sebastián.
La política fue otra actividad en la que se implicó de lleno. Muy vinculado a Maura, mantuvo amistad con importantes políticos de diversas ideologías, caso de Cánovas, Sagasta, Castelar y Salmerón, entre otros. En 1897 fue elegido diputado a Cortes por Úbeda, aunque no llegó a jurar el cargo por los avatares políticos del momento tras el asesinato de Cánovas y la disolución de Parlamento. Sus crónicas parlamentarias unieron en adelante las dos facetas más destacadas de su vida profesional.
Durante el primer cuarto del siglo XX su labor política, ejercida sobre todo a través del ejercicio del periodismo, se intensificó, fue nombrado hacia 1918 redactor honorario de La Correspondencia y fue honrado por Alfonso XIII con la distinción de la Llave de Gentilhombre de la Cámara. En el año 1924 recibió la Gran Cruz de Isabel la Católica, condecoración que fue costeada por suscripción popular en Úbeda.
Blas Aguilar Alvarado fue un hombre de gran cultura, favorecido ello por su pertenencia a una familia de escritores, por sus dotes naturales y su afición viajera. Otro de los rasgos de su personalidad fue su gran facilidad para establecer relaciones sociales y el ejercicio de la diplomacia. Gozó por ello de numerosas amistades en las ciudades en las que pasó la mayor parte de su vida, especialmente San Sebastián y Madrid. Nunca perdió el contacto con su tierra nativa, volviendo a Úbeda cuando se lo permitían sus múltiples obligaciones. Esta ciudad le nombró Hijo Predilecto en 1924.
Bibl.: M. Jiménez Aquino, “Giennenses ilustres: Blas Aguilar y Alvarado”, en Don Lope de Sosa (Jaén), 139 (1924), págs. 195-199; M. Caballero Vénzala, Diccionario Biobibliográfico del Santo Reino, t. I, Jaén, Instituto de Estudios Giennenses, 1979, págs. 151-161; R. Quesada Consuegra, Úbeda: Hombres y Nombres, Úbeda, Asociación Gavellar- Casa de Úbeda, 1982, pág. 89; A. Valladares Reguero, Temas y autores de Úbeda, Úbeda, Pedro Bellón Sola, 1992, págs. 272-273; G. Torres Navarrete, Historia de Úbeda en sus documentos. Linajes y hombres ilustres, t. II, Úbeda, Gráficas Minerva, 1998, pág. 537.
María Antonia Bonachera Vilar
