Carrascón, Francisco. Navarra, s. m. s. xviii – ¿Santa María de Huerta? (Soria), c. 1832. Monje cisterciense (OCist.), comandante general del Ribeiro (Orense), héroe de la Guerra de la Independencia.
Se ignoran la mayoría de los datos relativos a su persona. Sólo se sabe que estaba de conventual en Santa María de Melón (Orense) y que era predicador del monasterio, lo que no implica que fuera hijo de él, por cuanto esta abadía se formaba por monjes conventuales, es decir, procedentes de otros monasterios. Allí se hallaba el 17 de febrero de 1809, cuando la invasión napoleónica irrumpió en Galicia siguiendo la ruta Orense-Vigo. Al acercarse las tropas a Ribadavia para ascender la pendiente de la ruta hacia Melón, los monjes de este monasterio se dispersaron por donde pudieron. Sólo se sabe que fray Carrascón, ardiendo en celo patriótico, se echó al monte dispuesto a defender la patria y se puso a la cabeza de las partidas de paisanos que acudieron de los pueblos vecinos para organizar rápidamente la defensa. Reconocidas sus cualidades y dotes de mando, la junta de gobierno de la zona nombró a Carrascón comandante general del Ribeiro del Avia el 18 de febrero, y sin pérdida de tiempo se lanzó a organizar la defensa de Ribadavia con el fin de repeler la amenaza del invasor que se iba acercando a sus puertas. Armó como pudo a aquellos valientes patriotas, y se dispusieron a luchar contra un enemigo superior en número, bien pertrechado y curtido en cien batallas.
Según el autor que narra las hazañas de esta guerra en el Ribeiro, “Aquel día en la cuesta de Melón hubo el choque precursor de una heroica resistencia entre las guerrillas de Ribadavia que defendían la cuesta de Melón y la caballería enemiga que, en impetuosas cargas pretendía arrollar a aquellos héroes dispuestos a tenérselas tiesas, paisanos como eran en su mayoría con aquellos ejércitos que eran el orgullo del Coloso [Napoleón]”. No se sabe si fray Carrascón tomó parte de la defensa que se siguió en Puente Sampayo, al lado del teniente general y héroe de la lucha, el zamorano Pablo Morillo. Sólo se sabe que el 27 de mayo de 1809 tomó parte en la junta de Lobera en la que se creó el batallón Regimiento de Voluntarios de Lobera, el cual, después de luchar dos años contra el invasor francés, se embarcó en Vigo el 16 de noviembre de 1811, con destino a México.
Fray Carrascón pasó al cuartel general del marqués de la Romana, del que solicitó tropas y municiones para los paisanos que militaban a sus órdenes. Como no pudo satisfacer su petición, el marqués le dio cartas de recomendación para los generales portugueses, y al penetrar en territorio luso, los paisanos le consideraron un traidor y le encerraron en un calabozo, en el cual pasó cuatro días detenido, hasta que se esclareció la finalidad de su viaje; entonces jefes portugueses le facilitaron generosamente cuanto pedía, sabiendo que estos patriotas beneficiaban indirectamente sus tierras, que hubieran sido invadidas de no ser porque los españoles habían repelido a los franceses. Nada más se sabe en el momento presente de la actuación de este héroe, por falta de fuentes fidedignas. Debió de continuar hasta finalizar la lucha y obligar a Napoleón a morder el polvo de la derrota y regresar humillado a su patria, dejando tendidos en los campos de España multitud de soldados.
En cuando a Carrascón, hay quienes suponen que regresó a su monasterio, posiblemente el de Huerta (Soria), donde aparece nombrado abad de la comunidad en 1828, y después de desarrollar una labor meritorias, en 1832 salió para el capítulo general de la Orden en Palazuelos (Valladolid) por el camino de Medinaceli, pero enfermó de gravedad y se vio obligado a quedar allí algún tiempo. Por lo menos es una hipótesis que quizá no ande muy descabellada, si bien no se dispone de documentación para comprobarla.
Bibl.: E. de Aguilera y Gamboa, [El Arzobispo D. Rodrigo Ximénez de Rada y el Monasterio de Santa María de Huerta]. Discursos leídos ante la Real Academia de la Historia en la recepción pública del Excelentísimo Sr. D. Enrique de Aguilera y Gamboa, Marqués de Cerralbo en 31 de mayo de 1908, Madrid, Sucesores de Rivadeneyra, 1908, págs. 347-348; A. de Santiago y Gadea, El general don Pablo Morillo, Madrid, Sucesores de Hernando, 1911, págs. 55 ss.; J. R. de Legísima, Héroes y mártires gallegos, Santiago de Compostela, El Eco Franciscano, 1912; S. Eiján, Historia de Ribadavia y sus alrededores, Madrid, Est. Tipográfico de San Bernardo, 1920, págs. 501 ss., 526-527; D. Yáñez Neira, “Carrascón, Francisco”, en R. Otero Pedrayo (dir.), Gran Enciclopedia Gallega, t. V, Gijón, Silverio Cañada, 1976, pág. 91.
Damián Yáñez Neira, OCSO
