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Pedro Ramírez de Alba

Biografía

Ramírez de Alba, Pedro. Pedro de Alba. Alba de Tormes (Salamanca), s. m. s. xv – Granada, 21.VI.1528. Jerónimo (OSH), arzobispo de Granada y predicador.

Nacido en Alba de Tormes, parece ser que su familia tuvo buenas relaciones con fray Hernando de Talavera, monje jerónimo en el Monasterio de San Leonardo de Alba. Sus padres le enviaron a Granada cuando fray Hernando estaba allí de arzobispo. Fue sacristán de Santa Fe y, con ocasión de una visita que allí hizo el arzobispo Talavera, conoció su habilidad y buen talento, y se lo llevó a su casa; después le envió a Salamanca a estudiar cánones. Criado en tan buena escuela, salió excelente discípulo. Dicen que fue canónigo de la misma iglesia de Santa Fe, después vicario de Loja y visitador del arzobispado.

Ninguna de estas cosas llenaba sus deseos y decidió pedir el hábito jerónimo en el Monasterio de Nuestra Señora de la Concepción, pero por ser hombre de edad no se lo dieron. Volvía desolado a su casa y en el camino se encontró con un hombre anciano y venerable —que después identificó con san Jerónimo—, que le animó a perseverar en su propósito. Volvió a pedir el hábito con tanta insistencia que, al fin se lo dieron de común consentimiento (15 de agosto de 1507). Encajó enseguida en la observancia monástica pues, según él decía, no era más que tornar a practicar lo que en casa del arzobispo Talavera, su señor, se hacía.

A los cuatro años le eligieron por prior y le reeligieron otras cuatro veces; por dos veces fue visitador general de su Orden. Era, además, de los buenos predicadores de su tiempo. Por toda España se conocía su virtud y santidad. Carlos V lo eligió por arzobispo de Granada el 4 de diciembre de 1526, pero no tomó posesión hasta el 4 de abril de 1527 porque tardaron en llegar las bulas y el palio. Fue muy bien acogido, entendiendo que se habían de renovar los tiempos del “arzobispo santo” (Hernando de Talavera). Murió el 21 de junio de 1528. En el breve tiempo de su prelacía, mediante su celo y diligencia, se dio comienzo a la fundación del Colegio de Teólogos y a un seminario de niños, impulsado por el mismo Carlos V.

El heterodoxo Juan de Valdés en su Diálogo de doctrina cristiana (1529) hizo uso de la figura de fray Pedro de Alba como el arzobispo o personaje principal del diálogo que Valdés sitúa en el huerto del monasterio de los jerónimos de Granada, un día de San Juan (Valdés, 1925). Cuáles fueron las razones históricas que le impulsaron a escoger a este arzobispo, no se sabe con certeza, pero las ideas religiosas del arzobispo del diálogo valdesiano no corresponden a las del sencillo asceta jerónimo.

 

Fuentes y bibl.: Monasterio de San Jerónimo, Libro que contiene todos los monges, que han hecho profesión en este Rl. Monasterio de N. P. S. Jerónimo [...] de Granada, Granada, fols. 4-7, ms.

B. Gams Pius, Series episcoporum eclesiae catholicae, Ratisbonae, 1873, pág. 35; Marqués de Foronda y Aguilera, Estancias y viajes del Emperador Carlos V [Madrid, Sucesores de Rivadeneyra] 1914; J. de Valdés, Juan de Valdés. Dialogo de Doctrina Cristiana [...], introd. y notas de M. Bataillon, Coimbra, Imprensa da Universidade, 1925; M. Bataillon, Erasmo y España, México, Fondo de Cultura Económica, 1966, págs. 346, 350, 353, 355, 398, 436 y 507; I. de Madrid, “Ramírez de Alba, Pedro”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de Historia eclesiástica de España, vol. III, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1973, págs. 2045-2046; J. Antolínez de Burgos, en M. de Sotomayor (ed.), Historia Eclesiástica de Granada, Universidad de Granada, 1996, págs. 219, 223-228, 232 y 234; J. de Sigüenza, Historia de la Orden de San Jerónimo, Valladolid, Junta de Castilla y León, 2000, págs. 358-362.

 

Ignacio de Madrid, OSH

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