Elosúa Herrero, Marcelino. Oviedo (Asturias), 9.I.1886 – ?, 1972. Empresario.
Fundador de la saga empresarial Elosúa que a lo largo del siglo xx aglutinó uno de los principales grupos empresariales dedicados a la comercialización del aceite de oliva. Sus estudios de Comercio —en la que entonces se denominaba “Teneduría de Libros”— y la experiencia de sus primeros trabajos desarrollados en empresas asturianas —como Minas de Figaredo— le llevaron a establecerse con veinte años en Méjico, donde inició su actividad empresarial, primero con un pequeño comercio denominado “El Surtidor” y más tarde, en 1912, formando la sociedad Trueba y Elosúa, dedicada al comercio de artículos coloniales, que llegó a tener cuatro sucursales en el estado mexicano de Coahuila y un establecimiento en Tagle Pass (Texas).
Las experiencias personales y empresariales vividas durante su etapa americana contribuyeron a forjar un espíritu tenaz, luchador y poco propicio al desaliento. Muchas de estas cualidades le serían de gran utilidad cuando retomara su actividad empresarial en tierras españolas.
En el año 1921 volvió a vivir en España y parte de la actividad de la sociedad Trueba y Elosúa se incardinó en tierras españolas para ir poco a poco especializándose en el comercio del aceite, además de los tradicionales coloniales.
En 1927 fundó la empresa Elosúa S.A. con participación de algunos familiares, para dedicarse de manera principal al comercio de aceite de oliva, cereales y coloniales. Los resultados de los primeros años de su actividad empresarial le mostraron de forma clara las posibilidades que presentaba la comercialización de dicho producto entre la zona productora del sur y el consumo del norte de España. Para realizar sus planes empresariales estableció en 1929 factorías en Martos (Jaén); en el año 1931 almacenes para la distribución en Miranda de Ebro (Burgos) y en 1935 en León. En 1941 fundó Aceites Elosúa S.A que constituyó la base de su actividad empresarial hasta 1954, año en el que delegó la dirección de la empresa en su hijo Marcelino Elosúa Rojo.
En su estrategia empresarial se fijó como objetivo asociar a los trabajadores a los resultados de la empresa mediante la participación en beneficios o con la posibilidad de que los obreros pudieran convertirse en accionistas. Esta dimensión social de la empresa Elosúa permitió que un porcentaje creciente de sus empleados adquirieran la condición de accionistas de la empresa. También fomentó la posibilidad de destinar parte de los beneficios de sus emrpesas a obras de beneficencia con una escala progresiva a medida que aumentaban la cuantía de éstos.
Donde mostró una clara visión del negocio que deseaba que fuera la base de su empresa fue en la comercialización de forma directa del aceite de oliva. La fórmula, que sin duda le reportó un claro beneficio, fue establecer un canal propio de producción y comercialización del aceite de oliva. Situó el centro de la producción en la zona olivarera de Martos (Jaén) y el centro de la distribución para la zona Norte, de mayor consumo y capacidad de renta en León. Esta especialización, y la consecuente complementariedad de sus actividades productoras y comercializadoras, le proporcionó unas ventajas competitivas que supo aprovechar para situar la empresa entre las primeras del sector.
Bibl.: J. Peñalosa, Elosúa (1927-1977), León, La Sociedad, 1977; J. Torbado, Marcelino Elosúa Herrero, una biografía sentimental, León, Celarayn, 1987; F. J. Martínez Carrión, “Marcelino Elosúa Rojo”, en Cien empresarios españoles del siglo xx, Madrid, Ed. LID, 2000, págs. 504-511.
Rafa el Castejón Montijano
