Alonso de la Huerta, Siro. Bembibre (León), 15.XI.1861 – 23.II.1938. Militar y empresario.
Perteneciente a una familia acomodada, es hijo de Antonio Alonso Luengo, maestro de postas, y de Umbelina de la Huerta. Sus hermanos fueron: Ervigio, Benedicta, Pilar, Eloy, Maximino y Enrique, siendo él el benjamín. Desde la más tierna infancia los varones parecen marcados por la vocación castrense de que hicieron gala sus predecesores. Así, en la última década de la decimonovena centuria Maximino ostenta el grado de “teniente de capitán” y Enrique y Eloy el de “oficiales de artillería” y Siro el de “alférez del cuerpo de la administración militar de Valladolid”.
Comienza su dilatada carrera militar como agregado a la Intendencia Militar de La Habana, donde permanecería hasta el año 1892, en que regresa a España.
Desembarca en La Coruña el 26 de mayo y fija su residencia en Bembibre mientras tramita su pase a Madrid, con el fin de incorporarse el 10 de octubre a la “Inspección General del Cuerpo”. El 17 de abril de 1893 contrae matrimonio con su sobrina, Umbelina Matilde Alonso López, “maestra titular de primera enseñanza” e hija de su hermano Ervigio y de Anacleta López del Palacio. Tuvieron tres vástagos: Siro Félix, Ángela y Mercedes.
Un nuevo destino le llevará desde la capital del Reino a la administración militar de Ciudad Rodrigo (Salamanca), que habría de abandonar el 14 de marzo de 1898 para volver a la isla de Cuba, donde tiene lugar el enfrentamiento armado entre España y los Estados Unidos. El Tratado de París suscrito entre ambos países el 10 de diciembre ponía fin a las hostilidades y supone para nuestro país la pérdida de aquella colonia. Siro regresa entonces a su antiguo empleo en Madrid. Un tiempo después es trasladado a la comandancia general de Larache (Marruecos), en el Protectorado Español del Norte de África; territorio sobre el que España ejercía una soberanía parcial desde el año 1912. En los años veinte regresa a la Península y desempeña el cargo de coronel interventor de la VI Región Militar, con sede en Burgos.
Muy vinculado desde siempre a su tierra natal, fue uno de los promotores de la fundación de un hospital en Bembibre en el año 1915, junto a la Corporación Municipal y la Cámara Episcopal de Astorga que, sin embargo, no llegó a inaugurarse, debido a la falta de medios para hacer frente a su mantenimiento.
De ahí que finalmente fuese la Casa del Pueblo.
Las fuentes documentales constatan igualmente que entre 1922 y 1923 Siro abre un hotel en esta villa y es propietario además del teatro Enrique Gil y Carrasco, que contaba con un cinematógrafo. La muerte de este personaje se produce el 23 de febrero de 1938, siendo ascendido, a título póstumo, a general de brigada.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar de Segovia, Secc. 1.ª, leg. A-1477.
M. I. Olano Pastor, “Epítome al conocimiento de un período de la historia de Bembibre: de la Dictadura primorriverista a la II República (I)”, en Revista de la Asociación Cultural “Monte Irago” de Astorga (León), 2003, págs. 34-36.
Manuel I. Olano Pastor
