Gómez, Pedro. Antequera (Málaga), 1535 – ¿Nagasaki (Japón)?, 21.II.1600. Profesor y misionero jesuita (SI).
Entró en la Compañía de Jesús en la ciudad universitaria complutense, en Alcalá de Henares, al finalizar el año 1553. Antes había estudiado siete años de Gramática Latina, junto con las disciplinas de la Facultad Preparatoria de Artes. Tras dos años, fue enviado al colegio de Coimbra, donde fue “lector del primer curso de Artes”. Fue promocionado con celeridad al grado de “maestro” en 1556. El que fue visitador, el mallorquín Jerónimo Nadal, le encomendó la redacción de un “curso” de Filosofía y Teología, junto con Pedro da Fonseca. Desde 1564, Pedro Gómez era ya lector de Teología en Coimbra, además de prefecto de estudios. Fue, además, propuesto como obispo en el Japón. En realidad, la ausencia de salud motivó su abandono de la ciudad universitaria de Coimbra, emprendiendo su marcha como misionero hacia la isla Terceira.
Había manifestado desde su período de segunda probación, su deseo de ser enviado a la misión del Japón. Su aspiración se hizo realidad en 1579, alcanzando en julio de 1581 las tierras de Macao, hoy China. Una vida de misionero que se asemejaba, en sus desplazamientos, a la de los aventureros, como se manifestó en el naufragio que sufrió en Formosa en 1582. Con ese motivo, regresó a Macao y allí redactó, junto con Michele Ruggieri, y de manera dialogada para que fuese traducida a la lengua china, su obra Breve historia del principio del mundo. Cuando alcanzó Japón en julio de 1583, recibió la misión de ser superior del colegio de Funai y del distrito de Bungo, responsabilizándose especialmente de la organización de los estudios. Utilizó el “curso de teología” del cardenal Francisco de Toledo, pero al mismo tiempo escribió sus propios textos, en compendios de Filosofía y Teología. Según López-Gay, el más importante de todos ellos, fueron las páginas que configuran el Compendium catholicae Veritatis, cuyo manuscrito se encontraba fechado en 1594. Una traducción japonesa fue publicada, posteriormente, en Nagasaki, aunque esta versión fue descubierta recientemente por el padre Antonio Üçerler en los archivos del Magdalen College de Oxford.
De esta manera, las páginas de su Compendio de Teología fueron las primeras que se habían escrito para Oriente y para lectores orientales. Se encuentra estructurado en cinco partes: la dogmática, la sacramental, los mandamientos, la oración y las virtudes y vicios. En lo que respecta a la oración, Pedro Gómez remitía a las obras de fray Luis de Granada y del arzobispo de Toledo, Bartolomé de Carranza, procesado por la Inquisición. En la primera de las partes, la mencionada de dogmática, otorgaba una gran importancia a la Sagrada Escritura, recurriendo a los padres de la Iglesia. Tomás de Aquino fue su referencia principal, aunque también resulta fundamental lo propuesto por el Concilio de Trento y la teología nacida de esta reunión conciliar, así como de la renovación escolástica efectuada por la escuela de Salamanca.
Gómez se mostró muy atento a los problemas que la cultura y la religión del Japón habían propuesto a las estrategias de evangelización. No faltaron páginas de su autoría en compendios de cosmología y de filosofía aristotélica, aunque los contenidos de éstos podían resultar menos originales. El visitador Alessandro Valignano había transmitido a Roma la necesidad de contar con un curso de Filosofía y Teología que pudiese ser leído en tierras de misión por espacio de tres años. La necesidad de estas disciplinas era especialmente útil en las materias más controvertidas y dificultosas. Pedro Gómez, de esta manera, se mostró como el destacado teólogo y filósofo de la misión, ejerciendo como viceprovincial desde 1590 hasta su muerte diez años después.
Obras de ~: Annuae litterae ex Iaponia annorum 1592 et 1593; “Carta que o padre Pero Gomes escreueo de Amacao a outro padre acerca de seu naufragio que fez indo da China pera Iapâo a 15 de Dezembro de 1582”, en Cartas de Iapao et China, vol. II, Evora, 1598; “De hûa do padre Pero Gomes superior de Bungo, pera o Ilusríssimo et Reuerendíssimo Seuhor Don Theutinio de Bragança Arcebispo Deuora, De Vsuqui aos oito de Nouembre de mil et quinientos et oitenta et cinco”, en Cartas de Iapao et China, vol. II, Evora, 1598.
Bibl.: C. Sommervogel, Bibliothèque de la Compagnie de Jésus, vol. III, Bruxelles, Oscar Schepens, 1892, págs. 1555- 1557; F. Schütte, “Drei Unterrichtsbücher für japanische Jesuitenprediger aus dem 16. Jahrhundert”, en Archivum Historicum Societatis Iesu, 8 (1939), págs. 223-256; J. López-Gay, El Catecumenado en la misión del Japón del siglo xvi, Roma, PUG, 1966, págs. 137-141; “La mariología en un manuscrito teológico del Japón del siglo xvi”, en Diakonia Pisteos, Homenaje al R. P. J. A. Aldama, Granada, Facultad de Teología, 1969, págs. 257-278; T. Sakuma, Holy Scripture in “Compendium Catholicae Veritatis” of Pedro Gómez, S. J. (1533-1600).
Emended Text of the Tractase “On the Holy Scripture” with an Introduction, tesis doctoral, Roma, PUG, 1995.
Javier Burrieza Sánchez