Arias, Diego Luis de. ?, s. m. s. XVII - ?, IX.1725. Brigadier de Ingenieros e Ingeniero en Jefe.
En 1692, una consulta del Consejo de Guerra proclamaba la “falta de Ingenieros que hay en toda España”. Como resultado de diversas peticiones, el 8 de abril de 1692, enviaba Francisco Antonio de Agurto y Salcedo, I marqués de Gastañaga, desde Flandes a España tres ingenieros. Entre ellos a don Diego Luis Arias, para que una vez llegados “los examinen” porque “todos traen sus títulos de Yngenieros del Ejército de Flandes”. Arias, que había ejercido su profesión en Alemania, concretamente en los sitios de Maguncia y Bona, se había formado en la Academia Militar de Matemáticas de Bruselas dirigida por el ingeniero Sebastián Fernández de Medrano. También había trabajado en Gante a partir de 1686, y más tarde, en 1691, realizaba un plan de defensa de la plaza de Charleroi.
Una vez llegado a España, era graduado como capitán de Infantería y socorrido con 50 doblones para gastos de viaje. Posteriormente, en diciembre de 1694, se le destinaba a Fuenterrabía, a reconocer sus fortificaciones, y luego a Pamplona tras haber asistido en Cataluña a “la expugnación de cinco plazas”. Respecto a Pamplona, remitía al Rey un memorial, que firmaba como maestre de campo, en el que exponía, “los múltiples errores” que estaba cometiendo el ingeniero Hércules Torelli en la dirección de los trabajos de fortificación de la citada plaza. Pasaba posteriormente a San Sebastián, y habiendo partido Torelli a Cartagena y Orán, se ocupó de las obras del castillo de La Mota, así como de las fortificaciones de la plaza, siendo elogiados sus trabajos por Felipe V en 1702.
En 1704 formaba parte de los ingenieros que, integrados en el ejército mandado por el marqués de Villadarias, llevaban a cabo el primer sitio de Gibraltar. En 1710 estaba destinado en Cádiz, y en septiembre de 1713 firmaba una “Planta iconográfica de Cádiz como Ingeniero Mayor del Exército de Andalucía y de esta plaza”, en la que había sucedido al ingeniero Pedro Borrás, con un sueldo de 116 escudos. También Arias había sido nombrado intendente del cabildo de la ciudad, encargado de abastecer las necesidades del puerto. Posteriormente, y entre 1713 y 1717 (año en el que es sustituido por el también ingeniero Alberto Mienson), levantaba diversos planos de Cádiz: Plano de la muralla del Vendaval, Carta geográfica de la Bahía de Cádiz, Ysla de León y sus alrededores; dos planos del arsenal, muelle y alhóndiga de la plaza, y, finalmente, un nuevo plano de la citada alhóndiga. Puede afirmarse que el nacimiento y desarrollo en la isla de León del arsenal de La Carraca, fue a partir de 1715 cuando los proyectos del ingeniero Diego Luis Arias comenzaron a convertirlo en una realidad. En efecto, entre 1716 y 1724, se construyeron la mayor parte de las obras de infraestructuras, diseñadas por Arias, e impulsadas por el ingeniero Ignacio Sala.
Destinado Arias a Extremadura, en 1716, el ingeniero Pedro Sansón des Allois informaba oficialmente sobre la solicitud de Diego Luis Arias para excavar el foso perimetral a las fortificaciones que se estaban construyendo en Badajoz, así como para reforzar las murallas de la citada plaza. Entre los años 1718 y 1719, Diego Luis Arias dirigió varias obras en Badajoz entre las que se encontraba la excavación del citado foso. Al respecto, Arias informaba de que en los lugares en los que se había comenzado a excavar tan solo tenía 6 pies de profundidad, proponiendo profundizarlo otros 8 pies más. Para evitar que la excavación del foso socavase los cimientos de las escarpas planteaba la construcción de una berma de 8 pies de altura que reforzaría las escarpas y evitaría su ruina. La contraescarpa tendría 14 pies de altura y estaría construida con mampostería.
En 18 de julio de 1719 desde Badajoz, donde había sido destinado, pedía licencia para Andalucía “he servido cerca de 50 años en Flandes y en España con gran celo y honra…solicita la jubilación por razón de su mucha edad y achaques…con residencia fija en Cádiz y alguna en Badajoz, por tener muy débil y algo perjudicada la cabeza”.
Fallecía en septiembre de 1725.
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Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
