D’Aubeterre (o Daubeterre), Pedro. ?, u. t. s. XVII – ¿Galicia?, 1737, post. Ingeniero director.
En 1712 se incorporaban al recién creado Cuerpo de Ingenieros (17 de abril de 1711) nuevos miembros y, entre ellos, varios con apellidos franceses, aunque de algunos no conste de forma fidedigna su nacionalidad, como Pedro D’Aubeterre, quien el 1 de mayo de 1714 era nombrado capitán e ingeniero en segundo.
En 1718 consta que estaba trabajando con Jorge Próspero de Verboom en la construcción de la ciudadela de Barcelona, de donde pasaba a Málaga a finales de 1720. Sus instrucciones eran las de inspeccionar las obras del puerto de la ciudad, debido a la mala salud del ingeniero director de la misma, Bartolomé Thurus. Tras unas semanas de reconocimiento, enviaba un informe a la Corte, con la propuesta de algunas modificaciones al proyecto de Thurus. Por un lado, respetaba en lo fundamental el citado proyecto, aconsejando al igual que su superior un puerto cerrado en Málaga. Por otro lado, proponía tres modificaciones: en primer lugar, planteaba la utilización de cajones de madera rellenos con ripio y mezcla, logrando que, cuando la madera se pudriese, el interior apareciera con la consistencia de un bloque de piedra. Con ello se conseguiría abaratar los costos que suponía la extracción de rocas de tanto volumen y su traslado en las canteras cercanas. Dichos cajones se hundirían hasta el fondo fango, lo cual permitiría acercar la nave al propio muelle evitando las dificultades de estiba.
La segunda cuestión consistía en estrechar más la bocana del puerto, con lo que este se podría cerrar con cadenas; finalmente, señalaba que el muelle debía iniciarse junto al castillo de San Lorenzo, lográndose un puerto más espacioso y mejor fortificado, ya que, gracias a su extensión, podrían levantarse baluartes frente al castillo señalado anteriormente y en la puerta del mar.
D’Aubeterre plasmaba todo lo anterior en una memoria que enviaba al marqués de Tolosa el 7 de enero de 1721, en respuesta de la cual, se enviaba a Málaga a Verboom, quien elevaba al rey un proyecto propio en 1722, desaconsejando el puerto cerrado por, según su criterio, ser “muy costoso y con escasas ventajas”. Por otro lado, Bartolomé Thurus había presentado un proyecto de fanal para el puerto, que fue aprobado por Felipe V en 1717 y copiado con escasas variaciones poco después por Pedro D’Aubeterre, quien dirigió los trabajos de construcción.
En 1723 llegaba a Ceuta, donde inicialmente colaboraba con Verboom en la construcción del revellín de San Ignacio y en otras obras. En ese año, realizaba el Plano de las obras nuevas en el frente de la plaza de Ceuta, constatando el deterioro del pie de la muralla en la zona correspondiente a bahía norte, producido por el continuo batir de la pleamar del mar de España o mar de Poniente. Para su reparación, planificaba en dicho frente el calzado de los lienzos entre el baluarte de San Juan de Dios con el muelle de la dársena, y el baluarte de Santa Marta. Continuaba posteriormente y hasta 1727 dirigiendo obras en Ceuta, donde proyectaba y dibujaba el plano del ángulo de San Pablo, nuevos proyectos de fortificación y planos del estado de todas las obras que se estaban ejecutando, modificaba el proyecto del Hospital de Ceuta y levantaba el plano de la gran cisterna de la Almina. Todo ello durante el sitio puesto por el sultán Muley Ismaíl a la plaza, finalizado el 22 de abril de 1727.
En 1733 ascendía a teniente coronel e ingeniero jefe y, con fecha de 13 de noviembre de 1737, Pedro D’Aubeterre, como ingeniero director de La Coruña, informaba sobre la capacidad y conducta del ingeniero Carlos Antonio Giraud, al tiempo que dibujaba el Plano en tres hojas del reducto que se debe colocar enfrente del baluarte del Olmo, en La Coruña.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas; Catálogo Colectivo de la Red de Bibliotecas de los Archivos Estatales.
H. Capel et al., Los Ingenieros Militares en España. Siglo XVIII. Repertorio biográfico e inventario de su labor científica y espacial, Barcelona, Publicaciones y ediciones de la Universidad de Barcelona, 1983; M.ª I. Pérez de Colosía Rodríguez, “Proyecto de Bartolomé Thurus para el puerto de Málaga (siglo XVIII), en Baética: Estudios de Historia Moderna y Contemporánea, 6 (1983), págs. 275-282; H. Capel et al., De Palas a Minerva: la formación científica y la estructura institucional de los ingenieros militares en el siglo XVIII, Barcelona, Serbal-CSIC, 1988; M.ª I. Pérez de Colosía Rodríguez, “Málaga y Melilla durante la transición de los Austrias a los Borbones”, en Aldaba, 22 (1993), págs. 9-34; J. J. Bravo Caro y J. Sanz Sampelayo (eds.), IX Reunión Científica de la Fundación Española de Historia Moderna, vol. 1, Málaga, Universidad de Málaga - Fundación Española de Historia Moderna, 2009; J. Cantera Montenegro, “Ingenieros franceses en el Ejército español”, en Revista Internacional de Historia Militar, 97, monográfico Presencia de ingenieros militares extranjeros en la milicia española (2019), págs. 171-208; J. Carrillo de Albornoz y Galbeño, “Giraud, Carlos Agustín”, en Real Academia de la Historia (ed.), Diccionario Biográfico Electrónica [en línea], disponible en https://dbe.rah.es/biografias/136640/carlos-agustin-giraud.
Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño
