Tramulles Roig, Manel. Barcelona, 15.XII.1715 – 2.VII.1791. Pintor y escenógrafo.
Dada su temprana convivencia con Antonio Viladomat, no es de extrañar que Manel Tramulles se erigiese en el más fiel continuador de la tradición artística y del ideario de quien fue su maestro. Desde la muerte de su mentor en 1755, Francesc, su hermano menor, y Manel Tramulles pusieron todo su empeño en la creación de una academia barcelonesa de Bellas Artes a semejanza de la por aquel entonces recién creada Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Aunque no consiguieron su propósito, el taller-academia de los Tramulles se convirtió en lugar de paso obligado de toda una generación de artífices deseosos de aprender los rudimentos del arte del dibujo. La temprana muerte de su hermano en 1773 y la fundación de la Escuela Gratuita del Diseño impulsada por la Junta de Comercio en 1775, facilitaron que se integrase en el organigrama docente de la nueva institución, ocupándose de impartir clases de dibujo a los estudiantes de la Escuela de Náutica. Aún así, Manel Tramulles nunca abandonó sus clases particulares de “estudio del natural”.
El prestigio de Manel Tramulles entre sus coetáneos, al margen de la intensa labor pedagógica y reivindicativa que llevó a cabo —prosiguió con los enfrentamientos iniciados por su maestro contra el Colegio de Pintores en aras de conseguir el libre ejercicio del arte de la Pintura y la creación de una Academia de Bellas Artes para Barcelona—, obedece en gran medida a su poliédrica habilidad como pintor, escenógrafo y dibujante. Los óleos del camarín de la capilla de San Olegario de la Catedral de Barcelona, realizados en 1759, demuestran con creces el estrecho vínculo existente entre su estilo y el de Viladomat, una observación de antaño apreciada y repetida por la historiografía. Aún así, no siempre se perpetúa dicha semejanza en su obra: el gran lienzo con el tema de la Real Proclamación del rey Carlos III (1759) de la sala de capitular de la Catedral de Barcelona, sin duda su mejor y más reconocido trabajo, deja atrás el barroco otoñal de Viladomat y se acerca a la tradición contemporánea de los cuadros de ceremonia de Antonio Joli o Michele Foschini. Se puede decir lo mismo del desaparecido Retrato del Marqués de la Mina —muy cercano al Retrato de Don José de Carvajal de Andrés de la Calleja— y los restantes retratos de cuerpo entero de Josep Garcerá y Pinós y de su esposa Magdalena Pinós y Sureda de San Martí, marqueses de Barberá (1784); de Carlos Antonio de Azcón Potay, conde de Vallcabra (1787); o de los burgueses reusenses Josep Bofarull y Teresa Miquel (post. 1772).
El dominio de los recursos escenográficos fue su otra gran baza. Participó en el diseño de algunas de las maquinarias efímeras más notorias de su época, como el grandioso túmulo levantado en 1761 en la Catedral de Barcelona con motivo de la conmemoración de la exequias de la reina María Amalia de Sajonia; o la decoración exterior de la plaza de las Casas Consistoriales en 1783 para celebrar el nacimiento de los infantes gemelos Carlos y Felipe, que le valió el nombramiento de Pintor de la Ciudad al año siguiente.
No menos destacable es, en este mismo sentido, la ejecución y dirección escénica de las representaciones operísticas y teatrales del teatro barcelonés de la Santa Cruz, tareas que desarrolló ininterrumpidamente desde 1763 hasta los últimos años de su vida. Afortunadamente, entre las innumerables pérdidas de su producción destinada a espacios religiosos —especialmente la de las iglesias de Santa Maria del Mar, de los padres Trinitarios Descalzos o del convento servita del Buensuceso—, no se encuentra el gran fresco con el Martirio de san Narciso pintado para la media naranja del presbiterio de la capilla de San Narciso de la iglesia de San Félix de Girona. Para la ejecución de esta empresa, encargada por el obispo Tomás de Lorenzana en 1781, contó con la ayuda de sus discípulos Joan Carlos Panyó y Pedro Bofill. La muerte de Manel Tramulles en 1791 supuso la desaparición del último representante de una generación de artífices que lucharon para romper el corsé del estricto control gremial que había ejercido durante siglos el Colegio de Pintores sobre la práctica artística de la ciudad condal.
Obras de ~: San Juan Bautista, 1742; Escudos y hachas del túmulo de José Francolí y de Magarola, 1744; decoraciones de la bóveda y del presbiterio de la iglesia del Hospital de la Santa Cruz de Barcelona, 1747; Resurrección, 1754; decoraciones del tablado para la Verificación de la Real Proclamación de Carlos III, 1759; lienzos del camarín de San Olegario de la Catedral de Barcelona, 1759; Carlos III tomando posesión del canonicato, 1759; seis lienzos del retablo de Nuestra Señora del Remedio de la iglesia de los Trinitarios de Barcelona, 1760-1762; escenografías para la ópera Andrómana, 1763; escenografías para la ópera CayoMario en Numidia, 1766; decoración del palco del Marqués de la Mina del Teatro de la Santa Cruz de Barcelona, 1766; Escudos heráldicos de las honras fúnebres de Doña Ana de Blanes, 1763; Retrato del Marqués de la Mina, c. 1765; cuadros al óleo y ángeles con atributos de la Virgen en las de la capilla de Nuestra Señora de la Esperanza de la iglesia de Santa Maria del Mar de Barcelona, 1772; retratos de Josep Bofarull y Teresa Miquel, c. 1772; modelos de blandones, 1776; decoración al fresco del Palacio del duque de Sessa en Barcelona, 1778; decoración al fresco del presbiterio de la capilla de San Narciso de la iglesia de San Félix de Girona, 1781; decoración del frontispicio y de la plaza de las Casas Consistoriales, 1783; Retrato de Josep Garcerá y Pinós, marqués de Barberá, 1784; Retrato de Magdalena Pinós y Sureda de San Martí, marquesa de Barberá, 1784; Retrato de Carlos Antonio de Azcón Potay, conde de Vallcabra, 1787; decoraciones del túmulo fúnebre de Carlos III en la catedral de Barcelona, 1789; Retratos de Sus Majestades para el tablado de la Real Proclamación de Carlos VI, 1789; Santa Librada con la Sagrada Familia; Abraham adorando los tres ángeles; Prodigio observado por un patriarca de Constantinopla; Virgen de la leche; cuadros de la iglesia del Buensuceso de Barcelona; Virgen de la Merced con san José y san Antonio de Padua; Retrato de Nicolau Sibil·la (atrib.), c. año; Retrato de Estaquio de Azara, obispo de Barcelona (atrib.), c. 1790; Retrato del Marqués de la Mina.
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Francesc Miralpeix Vilamala
