Palma, Juan de. Palma del Río (Córdoba), ¿1578? – Madrid, 1648. Religioso franciscano (OFM), prelado superior de las provincias cismontanas de la Orden, confesor de Isabel de Borbón, esposa de Felipe IV.
El que fuera conocido en su Orden franciscana como “Venerable Juan de Palma” nació en el seno de una familia humilde dedicada al trabajo de la tierra en una pequeña huerta de su propiedad. Fueron sus padres Alonso Ruiz y Lucía Gómez. Aunque siendo niño ya destacó por su viva inteligencia, el corto caudal de su familia impidió que se aplicase al estudio de las primeras letras y se le destinó al trabajo como hortelano. Ocupado en este quehacer, su primera formación fue completamente autodidacta, aprendiendo en sus ratos libres los rudimentos del Catecismo, la lectura y la escritura.
Habiendo llamado la atención de los religiosos franciscanos del Convento del Llano, le facilitaron acudir al noviciado de menores de la Provincia de Los Ángeles, en el término de Hornachuelos, para aprender gramática y convertirse en aspirante a la vida religiosa. Aquí destacó ante sus superiores por su rapidez de aprendizaje en teología y filosofía y, apenas tomado el hábito, se convirtió en maestro de sus compañeros. Una vez terminados sus estudios, fue instituido predicador y, más tarde, guardián del Convento de La Puebla de Alcocer. Habiendo destacado dentro de la Orden, sus superiores le eligieron como custodio de la Provincia, en el Convento de San Antonio de Sevilla, cuyas edificaciones amplió. Después pasó a regir el Convento de Nuestra Señora de Belén, en la villa de Palma, reedificando gran parte del Monasterio con la venta de los libros que poseía. Su trabajo de reforma y buen gobierno en los diversos conventos que había regido originó que fuese elegido como provincial de la Provincia de Los Ángeles y, posteriormente, fue nombrado visitador de la Provincia de Canarias para que realizase allí la misma labor de reforma debido a su experiencia.
Su fama de buen predicador y de religioso caritativo y recto se extendió por el país y llegó a oídos de la infanta sor Margarita de la Cruz, tía de Felipe IV y observante religiosa en el Convento de las Descalzas Reales de Madrid. La infanta nombró a fray Juan su confesor y director espiritual y, a imitación de ella, lo mismo hizo toda su comunidad religiosa. Estando en Madrid, su Orden celebró un capítulo en Toledo, en el que se le pretendió nombrar vicario general de la familia cismontana; enterada la infanta, que se encontraba enferma, pidió al capítulo que no se la privase de su director espiritual. Condescendió a ello el capítulo y fray Juan asistió a la infanta hasta su fallecimiento. Escribió después una biografía de sor Margarita, tras obtener licencia del Rey, obra que fue atribuida posteriormente a Juan de Palafox y Mendoza.
Muerta la infanta, volvió a Palma al ser elegido de nuevo provincial de Los Ángeles, y en la villa estaba cuando se le llamó a Madrid de nuevo por orden de la reina Isabel de Borbón, esposa de Felipe IV, que lo solicitaba por su confesor y el de su hija la infanta María Teresa, la que sería Reina de Francia. A partir de entonces, fray Juan estuvo estrechamente ligado a la Familia Real, fue consejero de la reina Isabel y, a la muerte de ésta (1644), fue nombrado su albacea testamentario, adjudicándosele una imagen de la Virgen por voluntad de la Reina en su testamento. Fallecida Doña Isabel, quiso el padre volver a su provincia, pero Felipe IV no quiso que se separase de la Casa Real.
Murió en Madrid, asistido por los médicos del Rey, a los setenta años de edad, en 1648, y se le dio sepultura en el Convento de San Francisco de Madrid.
Obras de ~: Vida de la Serenísima Infanta Sor Margarita de la Cruz, religiosa descalza de Santa Clara, Madrid, Imprenta Real, 1636 (atrib. a J. de Palafox y Mendoza, Obras del ilustríssimo, excelentíssimo, y venerable siervo de Dios don Juan de Palafox y Mendoza [...]. Tomo IX, Vidas de San Juan limosnero y de la Sereníssima Infanta Sor Margarita de la Cruz, Madrid, Imprenta de Gabriel Ramírez, 1762).
Bibl.: A. de Guadalupe, Historia de la Santa Provincia de Los Ángeles de la Regular Observancia, y Orden de Nuestro Seráfico Padre San Francisco, Madrid, Imprenta de Mateo Fernández, 1662; A. de Torres, Historia de Palma del Río, Palma del Río, Ayuntamiento, 1963.
Rosa María García Naranjo
