Echevarría y Basail, Gregorio. Amorebieta (Vizcaya), 23.XII.1833 – Ocaña (Toledo), 12.VI.1901. Misionero dominico (OP), filósofo y teólogo.
Sintiendo la vocación de predicar el Evangelio en las lejanas tierras de Filipinas, ingresó en 1853 en el convento de dominicos de Ocaña (Toledo), que, después de la supresión de los monasterios y conventos de religiosos en 1835, era uno de los pocos conventos que permanecían abiertos en España, con el fin de reclutar misioneros para las misiones de ultramar.
Concluido el año canónico de noviciado y hecha la profesión religiosa, cursó los estudios de Filosofía y Teología con gran brillantez. Tuvo por profesor al padre José María Morán (1804-1884), eximio teólogo, que influirá decisivamente en su formación sacerdotal.
Antes de terminar los estudios, como era costumbre entonces, fue destinado a Filipinas. Después de una larga travesía, en la que no faltaban los percances y dificultades propios de la navegación de aquellos tiempos, llegó a Manila. En Filipinas desde 1582 tenían los dominicos una floreciente provincia dedicada al Santísimo Rosario. Estos religiosos, al igual que los de otras órdenes religiosas, habían experimentando una gran expansión misional atendiendo curatos y misiones y especialmente dirigían la Universidad de Santo Tomás de Aquino, que se creó en 1645 y que por sucesivas cédulas reales y bulas pontificias se fueron reconociendo y ampliando sus facultades, llegando a ser la universidad de mayor prestigio de todo el Oriente asiático. Gregorio Echevarría continuó allí sus estudios, donde se graduó de Filosofía en 1861. Comenzó a impartir esta materia hasta 1865, en que pasó a desempeñar la cátedra de Teología.
En 1872 regresó a España, siendo nombrado sucesivamente rector de los colegios de Ocaña (1872-1876) y de Ávila (1876-1878). De 1878 a 1881 fue maestro de novicios en Ocaña. En 1881 volvió a Filipinas y fue nombrado rector de la Universidad de Santo Tomás de Manila (1881-1890). De nuevo en España se le confió el rectorado del colegio de Ávila (1890- 1894) y finalmente, director espiritual del noviciado de Ocaña hasta el final de su vida, al tiempo que anotaba y preparaba, actualizando, la segunda edición de la Teología Moral del padre Morán, al que le dedicó una emotiva reseña biográfica. Sobresalió por su obediencia, mansedumbre, humildad y caridad.
Obras de ~: Compilación de las Ordenaciones de la Provincia del Santísimo Rosario, Manila, 1884 (inéd., Archivo de la Universidad de Santo Tomás de Manila); Memoria sobre la Universidad de Santo Tomás de Manila, dirigida al Ministro de Ultramar, Manila, 1889; J. M.ª Morán, Teología Moral, ed. de ~, 2.ª ed., Madrid, 1889, 4 vols.
Bibl.: “El M. R. P. Fr. Gregorio Echevarría y Basail”, en Santísimo Rosario, 16 (1901), págs. 507-509; M. Arellano, Influencia de la Universidad de Santo Tomás en la civilización de Filipinas, Manila, Colegio Santo Tomás, 1925, págs. 52- 55; M. Velasco, Ensayo de la bibliografía de la provincia del Santísimo Rosario de Filipinas, vol. IV, Madrid, Universidad de Santo Tomás, 1960, págs. 383-389; V. Vicente, “Echevarría, Gregorio”, en Q. Aldea Vaquero, T. Marín Martínez y J. Vives Gatell (dirs.), Diccionario de la Historia Eclesiástica de España, vol. II, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Enrique Flórez, 1972, págs. 776-777.
Arturo Llin Cháfer
