Ferrer Burgès, Simó. Barcelona, 8.IV.1751 – 11.II.1823. Arquitecto académico y arquitecto de Marina.
Hijo y nieto de maestros de casas barcelonesas, obtuvo el mismo título que sus antecesores el 8 de diciembre de 1771, concedido por el gremio de Mestres de Cases y Molers de Barcelona, corporación de la que fue tenedor de libros en 1778. Sin estudiar en las aulas de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid superó, en 1788, el examen para convertirse en arquitecto académico de mérito con el dibujo de una lonja de comercio. Diez años más tarde, Ferrer se convirtió en arquitecto de Marina y en teniente graduado de fragata y fue caballero de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.
En la vida laboral del arquitecto se aprecian diversas etapas. La primera pertenece a sus años de trabajo como maestro de obras: colaboró como delineante en las obras de la Llotja de Barcelona en 1773, y actuó como capataz en la ejecución de los trabajos que se realizaban en el Palau March de la Ciudad Condal.
Antes de ser académico participó en diversos encargos fuera de Barcelona al lado de otro maestro de casas, como Joan Fàbregues, vinculados al mundo de la hidráulica. Su segunda etapa se inicia a partir de su admisión en la Academia de San Fernando, entidad que le encargó unas remodelaciones para la iglesia parroquial de la villa de Altet (Lérida) en 1788, independientemente de que éstas fuesen respetadas o variadas por el gusto de otros profesionales de la arquitectura o del mismo pueblo al alzar el templo.
Como Ferrer era uno de los pocos académicos activos en Barcelona, la Academia le proponía muy a menudo para participar en las obras que la corporación tenía que valorar y plantear con un nuevo gusto clasicista.
Para realizar esta labor en la zona catalana, Ferrer era escogido junto a otros titulados académicos como Agustín Sanz o Bartolomé Ribelles, los cuales tenían su residencia en el este peninsular. En 1791, las actas de la Academia lo proponen para diversos encargos, como el de la iglesia parroquial de Barberà de la Conca (Tarragona), templo que no llevó a cabo; para la elaboración de unos nuevos dibujos para la fábrica de la parroquial de Vilallonga (Tarragona) o la de Vila-seca, realizados en 1800 y rechazados por los académicos y trazados de nuevo por Juan Antonio Cuervo. Pero la Academia olvidaba que, a partir de 1789, el arquitecto fue escogido para construir los cuarteles de Guardias Marinas de Cartagena. Pese a esta nueva situación laboral, la escuela clasicista demostraba que no siempre controlaba los movimientos y nuevas empresas de sus arquitectos. Ferrer empezó una nueva singladura en su vida profesional como arquitecto mayor de Cartagena en 1801.
Comprometido con su nuevo cargo, reconoció el pantano de Lorca junto al ingeniero José Pilón en 1802, dirigió las obras de fortificación de Cartagena en 1810 y vivió de cerca la guerra contra Francia en la que él mismo participó. Su última etapa le supuso el regreso a su ciudad natal, Barcelona, acontecido en 1816, para dirigir las obras del puerto. En 1822, el arquitecto pidió permiso para restablecer su salud en Barcelona, ciudad en la que murió en 1823. Su hijo Simó siguió los pasos profesionales de su padre dedicándose al mundo de la ingeniería.
Obras de ~: Rehabilitación, iglesia parroquial de Altet (Gerona), 1788; Dibujo del cuartel de Guardias Marinas, Cartagena, 1789; Proyecto para la iglesia parroquial de Santa Maria, Barberà de la Conca (Tarragona), 1791; Planos para la iglesia parroquial de Sant Martí, Vilallonga (Tarragona), 1791; Planos para la iglesia parroquial de Sant Esteve, Vila-seca (Tarragona), 1800; Dirección de las obras del puerto, Barcelona, 1816.
Bibl.: J. Bérchez Gómez y V. Corell, Catálogo de diseños de Arquitectura de la Real Academia de BBAA de San Carlos de Valencia, Valencia, Colegio Oficial de Arquitectos de Valencia y Murcia, Xarait Ediciones, 1981; C. Sambricio, La arquitectura española de la Ilustración, Madrid, Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España y del Instituto de Estudios de Administración Local, 1986; J. M. Montaner Martorell, La modernització de l’utillatge mental de l’arquitectura a Catalunya (1714-1859), Barcelona, Institut d’Estudis Catalans, 1990; M. Arranz Herrero, Mestres d’Obres i Fusters. La construcció a Barcelona en el segle XVIII, Barcelona, Col·legi d’Aparelladors Tècnics de Barcelona, 1991; A. I. Serra Masdeu, Academia i Tradició: Josep Prat i l’arquitectura de la segona meitat del segle XVIII a la Diòcesi de Tarragona, tesis doctoral, Barcelona, Universidad, 2005 (inéd.).
Anna I. Serra Masdeu
