Bosch Riba, Andreu. Barcelona, 1750 – IX.1799. Arquitecto académico.
Antes de llegar a ser arquitecto académico de mérito por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid en 1779, Bosch conoció las mejores instituciones barcelonesas del momento dedicadas a la divulgación de las artes de la construcción. Estudió matemáticas en el Colegio de Nobles de Cordelles de la Ciudad Condal, tenía conocimientos de francés, que, como él indica, le ayudaron a traducir autores extranjeros.
Con veintitrés años se examinó en el Gremio de Mestres de Cases i Molers de Barcelona y empezó a dirigir él solo diferentes obras, tanto encargos particulares como de diversas comunidades religiosas de la capital.
También fue examinador del mismo gremio. Pasó por la Llotja barcelonesa como profesor de arquitectura y vocal de los premios que se entregaban a los alumnos de esta institución. Trabajó para los nobles más acaudalados del momento y para los ingenieros militares, como lo avala su participación a lo largo de cinco años trabajando en la medición del camino que el ejército estaba construyendo desde Madrid a Barcelona. Fue Pedro Martín de Cermeño quien le animó a obtener la credencial de arquitecto académico. Una vez conseguido el distintivo del tribunal madrileño y de vuelta a Barcelona, empezaron sus enfrentamientos con el Gremio de maestros de casas que tanto le había ayudado, teniendo en cuenta que su padre, Andreu Bosch Riera, era un maestro de casas muy popular en dicha entidad y en la ciudad. Bosch, hombre con una notable fortuna, poseía una brillante biblioteca compuesta por ciento sesenta volúmenes de los cuales un centenar trataban sobre arquitectura. Se sabe que participó en muchas obras de la ciudad condal, que todavía no pueden precisarse con exactitud, y que era uno de los arquitectos preferidos de las clases dirigentes. Así, entre 1792 y 1793 trabajó en la Casa de Convalecencia del Hospital General de Barcelona, y entre 1792 y 1796 reparó varios inmuebles barceloneses propiedad de su segunda esposa. Su credencial como arquitecto académico no fue suficiente para que el tribunal, que le aprobó en su día, le rechazase y modificase en diversas ocasiones algunos planos que le encargó. Las correcciones se aplicaban tanto a obras civiles como al puente de Martorell de 1791, que finalmente se libró a Agustín Sanz, aunque antes la Academia le había encargado a Bosch la construcción de un puente de piedra sobre el río Anoia, del mismo año. Lo mismo sucede con los planos de la iglesia parroquial de Barberà de la Conca (Tarragona) de 1792 o los de la iglesia parroquial Vilallonga del Camp (Tarragona) del mismo año (que no fueron escogidos) o con la iglesia parroquial de Sant Pere de les Preses de 1797 (según parece iniciadas bajo el criterio de Bosch, pero no finalizadas por él).
Obras de ~: Participó en las obras de la Casa de Convalecencia del Hospital General, Barcelona, 1792-1793; Planos para la iglesia de Santa Maria de Barberà de la Conca, Tarragona, 1792; Trazas para el templo de Sant Martí de Vilallonga del Camp, Tarragona, 1792; Planos para la iglesia de Sant Pere de les Preses, Girona, 1797.
Bibl.: J. Fuguet Sans, “Una església del darrer barroc a la Conca de Barberà” en Aplec de Treballs, 1 (1978), págs. 91- 119; J. M. Montaner Martorell, La modernització de l’utillatge mental de l’arquitectura a Catalunya (1714-1859), Barcelona, Institut d’Estudis Catalans, 1990; R. M. Subirana Rebull, Pasqual Pere Moles i Corones (València 1741-Barcelona 1797), Barcelona, Biblioteca de Catalunya, 1990; M. Arranz Herrero, Mestres d’Obres i Fusters. La construcció a Barcelona en el segle xviii, Barcelona, Col·legi d’Aparelladors Tècnics de Barcelona, 1991; A. I. Serra Masdeu, L’església parroquial de Sant Martí de Vilallonga del Camp, Valls, ACCE de Vilallonga del Camp i Edicions Cossetània, 1998; Academia i Tradició: Josep Prat i l’arquitectura de la segona meitat del segle xviii a la Diòcesi de Tarragona, tesis doctoral, Barcelona, Universidad Autónoma, 2005 (inéd.).
Anna Isabel Serra Masdeu