Moreno Ruiz, Antonio. Madrid, 24.VII.1796 – 4.II.1852. Químico y farmacéutico.
Realizó sus estudios primarios en el Colegio de los escolapios de San Antonio Abad, y completó su formación a lo largo de varios años en diversos centros docentes de Madrid, como el Colegio de Doña María de Aragón, el Real Jardín Botánico o el Museo de Ciencias Naturales. En ellos estudió Lógica, Matemáticas, Física, Química, Botánica, Mineralogía, Zoología, Geognosia y Geología, además de completar los cuatro años de la carrera de Farmacia.
Después de asistir durante dos cursos al laboratorio de Física y Química situado en el Palacio Real, fundado por el enorme interés del infante Antonio por estas disciplinas, Moreno obtuvo el puesto de profesor ayudante de la Cátedra de Química que desempeñaba Andrés Alcón Calduch. Nombrado practicante de Farmacia Militar en 1823, fue destinado al Tercer Ejército, y un año después (1824), la Junta Superior de Farmacia le asignó la Cátedra provisional de Química y de Farmacia Experimental en el Real Colegio de San Fernando de Madrid.
En 1830 obtuvo por oposición la plaza de boticario de Cámara de Su Majestad, puesto que compaginó con varios cargos de la farmacia militar y de la Administración Civil, entre los que destacan pertenecer a la Junta Superior Gubernativa de Farmacia, ser vocal de la Dirección de Estudios, consejero de Instrucción Pública, consejero de Sanidad, miembro del Consejo de Agricultura, Industria y Comercio, miembro de la Junta de Moneda y Aranceles, y consultor facultativo de la Dirección General de Aduanas. En 1845 obtuvo una Cátedra de Análisis Químico, pero renunció a ella.
Perteneció a la Academia de Ciencias Naturales de Madrid desde 1834, y cuando esta corporación se disolvió y se creó la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales en 1847, fue uno de los académicos que la integraron. Por sus méritos, se le concedió la Cruz de Carlos III en 1844, y la Encomienda de dicha Orden en 1849.
A lo largo de su vida profesional la Administración le encargó numerosos peritajes, y realizó abundantes análisis de aguas, alimentos y minerales, especializándose en los ensayos por la vía húmeda. Estudió la composición química de varios manantiales, como los de Santa Águeda (1826), Solares (1828), Puertollano (1832), La Puda (1844), Riotinto (1849), Castillejos (1850) o Limpias (s. f.) entre otros. Fue asiduo colaborador del también químico y farmacéutico Diego Genaro Lletget, con quien publicó varios trabajos.
Falleció en Carabanchel, el 4 de febrero de 1882.
Obras de ~: con Lorenzo y Pollo, “Análisis de las aguas minerales de la fuente de la Real Casa de Campo”, en Gaceta de Madrid, 27 de junio de 1842; con G. Lletget, “Ensayo analítico de las aguas de Cestona”, en Aguas minerales termales de la clase salinas de Guesalaga llamadas también de Cestona en la provincia de Guipúzcoa, San Sebastián, Imprenta de Ignacio Ramón Baroja, 1845; “Ensayo de los minerales de las minas de cobre gris de la Sociedad La Esperanza”, en Memoria sobre la SociedadLa Esperanza, San Sebastián, Imprenta de Ignacio Ramón Baroja, 1846 [citado por Roldán, 1958, no localizado]; con G. Lletget, “Resultado analítico del agua mineral de Tielmas”, en Gaceta Médica, 30 de junio de 1850 (publicado también en El Restaurador Farmacéutico, t. VI, 1850, pág. 103); “Análisis de las aguas de Zaldívar en Vizcaya”, en Gran establecimiento balneario de Zaldívar en la provincia de Vizcaya, propiedad del Sr. Conde de Peñaflorida: aguas sulfuro-salino-alcalinas únicas en su clase en las Provincias Vascongadas: breve reseña del mismo y de las propiedades medicinales de sus aguas, Bilbao, Imprenta de Juan E. Delmas, 1869; “Análisis de las aguas de Zaldúa, en Vizcaya, hecho en 1844”, en Memoria sobre las aguas de Zaldúa, Madrid, Imprenta de M. Minuesa, s. f. [citado por Roldán, 1958, no localizado]; Memoria relativa a los óxidos metálicos y al modo de aplicarlos en la pintura sobre porcelana, por Brongniart, trad. de ~, por ~ [citado por Roldán, 1958, no localizado. Alexandre Brogniart (1770- 1847), afamado mineralogista, escribe el Traité des arts céramiques ou des poteries considérées dans leur histoire, leur pratique et leur théorie, 3 eds., Paris, 1844, 1854 y 1877].
Bibl.: Q. Chiarlone, Biografía de Don Antonio Moreno. Madrid, Manuel A. Gil, 1852; P. M. Rubio, Tratado completo de las fuentes minerales de España, Madrid, R. R. de Rivera, 1853; Q. Chiarlone y C. Mallaina, Historia de la farmacia. Madrid, Imprenta de José M. Ducazcal, 1865 (2.ª ed.), pág. 571; E. Maffei y R. Rúa Figueroa, Apuntes para una biblioteca española de libros, folletos y artículos, impresos y manuscritos, relativos al conocimiento y explotación de las riquezas minerales, Madrid, Imprenta J. M. Lapuente, 1871, vol. I, págs. 488 y 1873; vol. II, pág. 624; Anuario oficial de las Aguas minerales de España, Madrid, Imprenta Estereat. y Galvanop., de Aribau y Cía., 1877; R. Folch Andreu, Elementos de Historia de la Farmacia, Madrid, Viuda de A. G. Izquierdo, 1927, págs. 463 y 525; R. Roldán Guerrero, “Un siglo de enseñanza de la química en la Universidad de Madrid (1750-1850)”, en Anales de la Real Academia de Farmacia, n.º 23, 1957, págs. 337-362; R. Roldán Guerrero, Diccionario biográfico y bibliográfico de autores farmacéuticos españoles, t. III, Madrid, IMPHOE, 1975 (reimpr. de la ed. de 1958), págs. 433-435; J. M. López Piñero et al., Diccionario histórico de la ciencia moderna en España, vol. II, Barcelona, Editorial Península, 1983, pág. 87; M. C. de la Rosa y M. A. Mosso, “Historia de las aguas mineromedicinales en España”, en Observatorio Medioambiental, n.º 7 (2004), págs. 117-137; A. García de Marina Bayo, “Colección histórica de instrumentos científicos del Museo de la Farmacia Hispana de la Facultad de Farmacia de Madrid”, en Anales de la Real Academia Nacional de Farmacia, n.º 70 (2004), págs. 813-838.
Inés Pellón González
