Piniés y Bayona, Pío Vicente de. Huesca, 29.VI.1875 – Madrid, 29.XI.1943. Jurista y político.
Hijo de Vicente de Piniés Laguna, magistrado del Tribunal Supremo, en su trayectoria personal se detecta una cierta resistencia hacia la profesión paterna, pues tras estudiar Magisterio y Filosofía y Letras en la Universidad de Madrid, se presentó a las oposiciones del Cuerpo de Archiveros y Bibliotecarios, aprobándolas.
Al final terminaría ejerciendo la abogacía en Madrid, llegando a desempeñar un puesto de diputado del Colegio de Abogados de la Capital, así como el de decano del Cuerpo de Letrados de la Beneficencia Provincial. También estuvo colegiado en los Colegios de Abogados de Zaragoza, Huesca y Teruel, en los que fue decano honorario.
Miembro de número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, llegó a desempeñar en ella algunos puestos primero el de secretario general, desde el que pasaría a los de vicepresidente y presidente (1932) en sustitución de Niceto Alcalá-Zamora.
Perteneció al Ateneo Científico, Literario y Artístico de Madrid.
Sus inicios en la vida política se producen en 1902, dentro del Partido Liberal Conservador, al conseguir el acta de diputado por Jaca —ocupó el puesto dos legislaturas—. De ahí pasaría a representar a los distritos de Fraga, Benabarre, Tamarite y Boltaña por la provincia de Huesca en las legislaturas abiertas en 1907, 1914 y 1916. En 1921 sería designado vicepresidente primero del Congreso.
Ocupó varios puestos en la Administración, pues fue director general de la Administración Local (1914) y director general de Obras Públicas (1917).
Fue senador elegido por la provincia de Huesca durante las legislaturas de 1918-1919 y de 1919-1920.
Fue ministro de Gracia y Justicia desde el 13 de marzo de 1921 hasta el 7 de julio de ese mismo año, bajo la presidencia de Allendesalazar, dentro del llamado “gobierno de gestión” con el que se sustituyó el gobierno de Maura. Su dimisión se produjo por las diferencias mantenidas con Argüelles respecto de la regulación de los transportes. Su actividad al frente de este Ministerio fue bastante notable al presentar los proyectos para la separación de las carreras judicial y fiscal y categorías del secretariado, para el ingreso en las carreras técnicas y para la regulación de los traslados, ascensos y licencias. Pero ninguno de ellos llegó a ser aprobado. De la misma manera es el responsable del proyecto de reforma de la Ley de Enjuiciamiento Civil.
Llegó a ostentar la representación de España en la Conferencia Internacional de Transportes y Tránsito (Barcelona, 1921).
Fue ministro de la Gobernación desde el 8 de marzo al 7 de diciembre de 1922, bajo la presidencia de Sánchez Guerra, encontrándose por razón de este cargo presente en la visita oficial que Alfonso XIII hizo a Las Hurdes, formando parte de la Comitiva Real y al parecer fue el encargado de distribuir cápsulas de sulfato de quinina a algunos enfermos palúdicos en Pinofranqueado al tiempo que el Monarca se detenía para socorrerles. Encontrándose al frente del Ministerio tuvo que hacer frente a la huelga de Correos de 1922 motivada fundamentalmente en que el Decreto de 28 de febrero de 1922 reformando las Ordenanzas de Aduanas, facultaba al ministro de Gobernación a disponer de la distribución del personal de Correos y Telégrafos sin atender a las plantillas, y autorizaba a la creación de hasta quinientas plazas de oficiales terceros (doscientos cincuenta de Correos y doscientos cincuenta de Telégrafos) sin aumentar las plazas de las categorías superiores, alterando la proporción entre categorías existentes y dificultando la posibilidad de ascenso, y con ello mejora salarial de los funcionarios.
Piniés hacía responsables a las altas jerarquías del Cuerpo de la desestructuración, derroche e influencias existentes en Correos.
Fue miembro de la Comisión General de Codificación, siendo notable su participación en la redacción del apéndice foral aragonés al Código Civil, y, como tal, figura su reconocimiento en la exposición de motivos del Real Decreto de 7 de diciembre de 1925, por el que se aprueba el Apéndice al Código Civil correspondiente al Derecho Foral de Aragón, formado en cumplimiento de lo preceptuado en el artículo 6.º de la Ley de Bases por la Comisión Permanente de Codificación, firmado por Galo Ponte Escartín.
Al parecer, sus diferencias con el directorio militar (1923-1925), durante la dictadura de Primo de Rivera (1923-1930), hicieron que se apartara de la política.
Obras de ~: Bases de politica fundaria: discurso leído por D. Francisco Soler y Pérez el 10 de Marzo de 1943 en el acto de su recepción de Académico de número, y contestación del Sr. D. Vicente de Piniés y Bayona, Madrid [Vda. Galo Sáez], 1944; Sesión necrológica celebrada por la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación el día 22 de Marzo de 1921 en honor del Excmo. Sr. D. Eduardo Dato e Iradier, Discurso del Excmo. Sr. D. Vicente de Piniés y Bayona [...] del [...] Sr. D. Francisco Bergamín [...] y del Sr. D. Francisco Soler, Madrid, 1921 (Talleres de la Editorial Reus S.A.).
Bibl.: J. F. Lasso Gaite, Crónica de la Codificación española. IV. Codificación civil, Madrid, Ministerio de Justicia, 1970, 2 vols.; El Ministerio de Justicia. Su imagen histórica (1714- 1981), Madrid, Ministerio de Justicia, 1984; G. Bleiberg, Diccionario de Historia de España, Madrid, Alianza Editorial, 1979 (2.ª ed.), 3 vols.; J. Baró Pazos, La codificación del Derecho civil en España (1808-1889), Cantabria, Universidad, 1993; J. M.ª Jover (dir.), Historia de España de Menéndez Pidal, t. 36, vol. 1, Espasa Calpe, 2000; J. R. de Urquijo Goitia, Gobiernos y Ministros Españoles (1808-2000), Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 2001; A. Aguilar Pérez, “Movimientos corporativos en los cuerpos de Correos y Telégrafos. De las Comisiones a los Sindicatos”, en Scripta Nova. Revista Electrónica de Geografía y Ciencias Sociales (Universidad de Barcelona), vol. VI, n.º 119 (104), 1 de agosto de 2002, dirección electrónica http://www.ub.es/geocrit/sn/sn119104.htm; A. Baso Andreu, Vicente de Piniés. El prócer jurisconsulto, Huesca, 4 esquinas, 2003.
María Dolores del Mar Sánchez González