Segura Iglesias, Enrique. Sevilla, 1.XII.1906 – Madrid, 23. XII.1994. Pintor.
Oriundo de Sevilla, Enrique Segura manifestó una temprana vocación por la pintura. A la edad de diez años ingresó en la Escuela de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla, donde conoció al que sería su gran maestro, Gonzalo Bilbao, quien por aquel entonces dominaba el panorama pictórico sevillano. La pintura de Segura se puede adscribir a la corriente naturalista tradicional, heredada de Bilbao, que marcó a la escuela sevillana de principios del siglo XX, formada por pintores como Alfonso Grosso, Santiago Martínez, Juan Miguel Sánchez y Gustavo Bacarisas, entre otros. Se trataba de una pintura costumbrista y de paisajes, amable, tradicional y totalmente alejada de las vanguardias, que en aquel momento triunfaban en el resto de Europa.
En 1930 ganó unas oposiciones convocadas por la Diputación Provincial Hispalense que le permitieron continuar su formación en Francia, Bélgica y Holanda, donde realizó, sobre todo, paisajes y bodegones.
Tras unos meses en Galicia y Zamora, se instaló definitivamente en Madrid, donde asistió a clases de pintura en el Círculo de Bellas Artes. En 1931 tuvo lugar su primera exposición en Sevilla como resultado de su periplo por Europa y montó su primer estudio en Madrid. En esta época consiguió, gracias a sus extraordinarias dotes de dibujante, su primer empleo como ilustrador en la revista humorística Gracia y Justicia.
Posteriormente, recibió una beca de la Junta de Ampliación de Estudios gracias a la cual completó su aprendizaje en Italia y pudo regresar a Francia, Bélgica y Holanda. En 1934 contrajo matrimonio con María Coronado, madre de sus siete hijos.
De nuevo en España y tras finalizar la Guerra Civil, se vio obligado a retomar el oficio de ilustrador en el periódico Arriba. Allí estableció contacto con los intelectuales más brillantes del momento, entre los que se encontraban Eugenio d’Ors y José M.ª Alfaro, que le abrieron numerosas puertas en el entorno artístico madrileño, dominado entonces por Zuloaga, Benedito y Álvarez de Sotomayor.
Los años cuarenta fueron decisivos para la trayectoria de Segura: en 1943 se celebró su primera exposición en Madrid en la Sala Vilches, en la Exposición Nacional de Bellas Artes de 1945 recibió la Tercera Medalla con su cuadro Muñecos y la Segunda Medalla con Eva en 1948 y logró importantes encargos de retratos, género por el que el artista sentía verdadera devoción y que marcaría desde entonces su carrera profesional.
En las décadas de los cincuenta y los sesenta se convertiría en el retratista oficial de la vida pública española. Posaron para él jefes de Estado como José López Portillo, entonces presidente de la República de México, el general Franco y el entonces príncipe de España, don Juan Carlos de Borbón; políticos como José Ibáñez Martín y Tomás Garicano Goñi, personajes del mundo de las finanzas como Ramón Areces y Emilio Botín e intelectuales y escritores como Ramón Gómez de la Serna y José Camón Aznar.
En 1950 se produjo su consagración definitiva al resultar galardonada su obra Religiosos, muy influenciada por Zurbarán, con la Primera Medalla de la Exposición Nacional de Bellas Artes. Ese mismo año presentó su primera muestra en París, en la Sala André Weil, a ésta le siguieron importantes exposiciones tanto a nivel nacional —Madrid, San Sebastián, Bilbao y Barcelona— como internacional —El Cairo, Venecia, La Habana y Lisboa.
El 14 de febrero de 1965 ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, a propuesta de Francisco de Cossío, José Aguiar y José Camón Aznar.
Su discurso, titulado Consideraciones sobre el retrato en la pintura, versó sobre la evolución del retrato desde al antigüedad hasta el siglo XIX.
Segura fue académico correspondiente de la Real Academia de San Carlos de Valencia en 1979 y académico correspondiente y de honor de la Real Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla, que le otorgó en 1980 su Medalla de Oro. Entre otros méritos recibió la Medalla de Oro de Arts, Sciences et Lettres en 1970, la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio en 1975 y el Premio José González de la Peña, Barón de Forna, de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en 1987.
Obras de ~: Dibujo de José Ortega y Gasset, 1932; Retrato de Antonio Ferro, c. 1943; Muñecos, 1945; Eva, 1948; Retrato del General Moscardó, 1949; Retrato de Ramón Gómez de la Serna, c. 1949; Religiosos, 1950; Pinturas de la cúpula del Panteón de los Duques de Medinaceli, c. 1950; Retrato de José Ibáñez Martín, 1952; Retrato de José María Pemán, 1954; Retrato de Carmen Polo de Franco con sus nietos, c. 1956; Retrato de Francisco de A. Moreno y de Herrera, Conde de los Andes, 1956; Retrato de Emilio Botín, 1959; Retrato de José Camón Aznar, 1959; Retrato de Joaquín Rodrigo, 1959; Retrato de Francisco de Cossío, 1963; Retrato de S.A.R. la Princesa de España, D.ª Sofía de Grecia, 1964; Retrato de Nicolás Franco Bahamonde, 1965; Retrato de su hija M.ª Teresa, c. 1965; Retrato del General Franco, 1966; Retrato de Ramón Areces, 1968; Retrato de Juan de Contreras y López de Ayala, Marqués de Lozoya, 1971; Retrato de S.A.R. el Príncipe de España, D. Juan Carlos de Borbón, 1973; Retrato de Tomás Garicano Goñi, 1973; Retrato de Federico Sopeña, 1973; Retrato de Juan Miguel Villar Mir, 1977; Retrato de su esposa, 1977; Retrato de José López Portillo, 1978; Retrato de Fernando Chueca Goitia, 1980.
Escritos: “Semblanza del Maestro Manuel Benedito”, en Revista de Ideas Estéticas, separata, 136 (1958); Consideraciones sobre el retrato en la pintura, discurso de ingreso, Madrid, Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, 1965; “Despedida al Marqués de Lozoya”, en Boletín de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (BRABASF), 46 (1978), pág. 23; “Benjamín Palencia en la Academia de San Fernando”, en BRABASF, 48 (1979), pág. 34; “Retratos de nuestros académicos”, en BRABASF, 50 (1980), págs. 41-44; “Apuntes al lápiz inéditos de dos Académicos tomados del natural en sus lechos de muerte”, en BRABASF, 51 (1980), págs. 5-8; “Enrique Pérez Comendador, en Sevilla”, en BRABASF, 52 (1981), págs. 13- 14; “Cómo concebir una obra de arte y su realización”, en BRABASF, 54 (1982), págs. 21-25; “Sobre un dibujo de Ortega”, en BRABASF, 56 (1983), págs. 5-8; “Juan Antonio Morales”, en BRABASF, 58 (1984), págs. 11-12; “A Fernando García Mercadal”, en BRABASF, 60 (1985), págs. 39-40.
Fuentes y bibl.: Archivo de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Expediente de Enrique Segura, 89- 2/7.
Marqués de Lozoya y J. Montero Alonso, Enrique Segura y su tiempo, Madrid, Confederación Española de Cajas de Ahorros, 1974; La pintura de Enrique Segura, catálogo de exposición, Madrid, Club Urbis, 1979; “Currículum del Excelentísimo Señor Don Enrique Segura. Medalla Núm. 33”, en BRABASF, 56 (1983), págs. 255-268; E. Pardo Canalís, “Don Enrique Segura Iglesias. Necrológica”, en BRABASF, 80 (1995), págs. 63-65; J. Hernández Díaz, “In memoriam Enrique Segura Iglesias”, en BRABASF, 80 (1995), págs. 67- 68; F. Chueca Goitia, “Enrique Segura”, en BRABASF, 80 (1995), págs. 69-71 y A. Fernández-Cid, “Una lejana cabecita de urgencia”, en BRABASF, 80 (1995), pág. 72.
Marina López de Haro Ochoa