Xargay Pagès, Emilia. Sarrià de Ter (Gerona) 1927 – La Escala (Gerona), 2003. Pintora y escultora.
Discípula de Juan Orihuel hasta 1947, año en el que le conceden la Segunda Medalla en la Exposición Nacional de Arte de Madrid. Se inicia en el ámbito de la pintura tradicional en las primeras muestras de 1942 y 1944. Celebra su primera exposición individual en Barcelona en 1950. Participa en los Salones de Octubre y en 1951, junto a Joan Massanet y F.Torres Monsó forma el grupo “Indika”, al que más tarde se incorporan, Esther Boix, Jordi Curós, Guillem Massot, Joaquim Casellas y Evarist Vallés. La obra que realiza plantea una serie de fuertes contrastes de colores, casi fauvistas, a través de una pincelada ancha y cargada de materia, en la que prima un constructivismo sólido y una ordenación geometrizante que se convertirá en uno de los elementos característicos de la obra de la artista. A partir de su viaje a Italia, en 1952, intuye la importancia del arte público. Desde entonces, la pintora se plantea el concepto de artista total, con la exigencia de responder a las plurales respuestas del arte a partir de diferentes técnicas. En París conoce a artistes abstractos, pero a pesar de recibir una fuerte influencia de los movimientos no figurativos, Xargay no abandona el esquematismo basado en la figuración y en el ejercicio de depuración de la realidad. El volumen productivo de su pintura empieza a decrecer a partir de 1963, fecha en la que se decanta hacia la escultura. Una de las características de su trayectoria artística será la curiosidad que la lleva a dibujar carteles, ilustrar libros, modelar trofeos de entidades, realizar cerámica y esmalte, así como trabajar la técnica del vidrio, hacer tapices de lana, diseñar joyas o imprimir sus propios grabados. En su estatuaria pasa del fino juego rítmico de los volúmenes a los valores del plano. Aplica a su tarea escultórica la interrelación de masa y vacío desarrollada por Henry Moore. Los pulidos de sus bronces dejan entrever el anhelo que tiene de querer dotar a las piezas de connotaciones y contrastes cromáticos. Sus esculturas sintetizan las formas sin apartarse del mundo real. Existen dos temas constantes en su obra escultórica: la pareja y los toros. A través del mural y el monumento público, la artista lleva su arte a la calle. Su primer encargo lo recibe en 1967 y se trata del plafón de hormigón y esmalte para el aeropuerto de Girona-Costa Brava. En 1973 realiza un polícromo retablo popular en las paredes exteriores del mercado municipal de Salt (Girona). Como monumento destaca el dedicado a la cobla Els Montgrins, en Torroella de Montgrí (Girona), y el monumento dedicado a Fra Ramon Pané, en el monasterio de Sant Jeroni de la Murtra, en Badalona. Numerosos premios avalan su trayectoria, como el Premio de Escultura de la Diputación de Barcelona, en 1970, el Premio de Escultura de Pequeño Formato, en 1981, o el Premio al Mural Cerámico, en 1982.
Obras de ~: Gran Mural, hormigón y esmalte, aeropuerto “Girona-Costa Brava”, 1967; Virgen, hierro, convento de Salt (Girona), 1971; Gran Mural, esmalte, capilla del Barón Empein, 1971; Gran Mural, cerámica, colaboración con J. Marco, Mercasalt, Salt (Girona), 1982; Monumento a la cobla “Els Montgrins”, bronce y cemento, Torroella de Montgrí (Girona), 1984; Toro, cemento, Ayuntamiento del Perthus, Francia, 1988; Cuadro “Girona”, técnica mixta, Secretaría General de la Unesco, París, 1989; Escultura “Forma Femenina”, cemento, Tossa de Mar (Girona), 1990; Escultura “Fra. Ramon Pané”, piedra, Sant Jeroni de la Murtra, Badalona (Barcelona) 1991; Monumento a Rosa Leveroni, Cadaqués (Girona), 1993.
Bibl.: J.J. Tharrats, J. Iriarte, L’entorn d’Emília Xargay, Col·legi Oficial d’Aparelladors i Arquitectes Tècnics de Girona, Girona, 1989; C. Rodríguez-Aguilera, J. Iriarte, Emília Xargay. Obra pública 1967-1991, Barcelona, 1991; R. Manzano, Emília Xargay, Emília Xargay, Barcelona, 1993.
Silvia Muñoz de Imbert
