Granados García, Anastasio. Espinoso del Rey (Toledo), 7.IX.1909 – Palencia, 13.II.1978. Obispo, conciliarista.
Nació a la una de la tarde, en medio del ambiente festivo reinante con motivo de las fiestas patronales de la Virgen de los Remedios, siendo bautizado en la iglesia parroquial de Santiago Apóstol de Espinoso del Rey el día 15 de septiembre. Era hijo de Francisco Granados Sánchez, natural de Torrecilla de la Jara (Toledo), de profesión herrero, y de Modesta García Rodríguez, natural de Santa Ana de Pusa (Toledo).
Fue confirmado en la iglesia parroquial el día 30 de mayo de 1919 por Prudencio Melo, obispo auxiliar de Toledo. Cuando contaba cinco años pasó a residir junto con sus padres a Santa Ana de Pusa y, en 1922, a Talavera de la Reina (Toledo).
Realizó sus estudios en el seminario de Toledo y en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma, obteniendo el título de doctor en Teología y de bachiller en Derecho Canónico. Recibió la ordenación sacerdotal el 24 de febrero de 1934 de manos del cardenal arzobispo de Toledo, Isidro Gomá. Celebró su primera misa el 27 de febrero de 1934. Los cargos y tareas pastorales, cada día de mayor responsabilidad, se fueron sucediendo: profesor del Seminario de Toledo, párroco y capellán mozárabe, canónigo, chantre y deán de la Catedral Primada, vicecanciller y canciller del Arzobispado de Toledo. Fue también secretario particular del cardenal Gomá, desde 1934 hasta 1940, consiliario diocesano de la Acción Católica Femenina y vicario capitular de la Archidiócesis toledana.
El día 30 de abril de 1960 fue nombrado obispo titular de Cidramo y auxiliar del arzobispo de Toledo, siendo consagrado en la Catedral de Toledo, el día 5 de junio de 1960, por el cardenal arzobispo de Toledo Enrique Plá y Deniel, asistido por Arturo Tabera Araoz (CMF), obispo de Albacete, y por José María García Lahiguera, obispo titular de Zela y auxiliar del de Madrid. Fue nombrado, a la vez, vicario general del Arzobispado de Toledo. Sus paisanos de Espinoso del Rey y su Ayuntamiento, como recuerdo de tal acontecimiento, le nombraron Hijo Predilecto de la villa, le dedicaron una calle en el pueblo en la antigua plaza del Sol y le regalaron un solideo y un anillo episcopal.
Los vecinos de Santa Ana le dedicaron también una calle, la antigua calle Real, y le obsequiaron con un báculo pastoral.
Participó como obispo en las sesiones del Concilio Vaticano II, siendo nombrado por Pablo VI miembro de la Comisión Teológica Doctrinal. Especializado en eclesiología, tras veintisiete años de profesor en el seminario de Toledo, intervino brillantemente en la elaboración de la constitución Lumen Gentium y en la declaración pontificia Mysterium Ecclesiae. Posteriormente publicó dos obras sobre estos temas: El misterio de la Iglesia en el Concilio Vaticano II y La Palabra de Dios en el Concilio Vaticano II.
El 31 de marzo de 1970 fue nombrado obispo de Palencia, sucediendo por renuncia a la sede palentina al obispo José Souto y Vizoso. Tomó posesión de la diócesis el 30 de abril de 1970 mediante el procurador y vicario capitular Eduardo Izquierdo. Hizo su entrada solemne en la diócesis el 1 de mayo de 1970, habiendo permanecido el día anterior en la Trapa de San Isidro de Dueñas. Reformó el palacio episcopal e instaló allí el Archivo Diocesano, abrió nuevas salas en el Museo Diocesano e inició, como patrono de la Fundación San Antolín y San Bernabé, la construcción de la “Residencia obispo Granados” para personas mayores.
Falleció en Palencia, el día 13 de febrero de 1978, a las seis de la tarde, después de una breve enfermedad.
Sus restos mortales recibieron sepultura junto al altar de la capilla del Sagrario, en la santa iglesia catedral de Palencia.
Bibl.: L. de Echeverría, Episcopologio Español Contemporáneo (1668-1985), Salamanca, Universidad, 1986; A. Fernández Collado, Obispos de la provincia de Toledo, 1500-2000, Toledo, Instituto Teológico San Ildefonso, 2000.
Ángel Fernández Collado
