España y Taberner, Enrique. Palma de Mallorca (Islas Baleares), 23.III.1801 – Madrid, 31.VII.1878. Mariscal de campo, gobernador y capitán general de Puerto Rico.
En 1811 entró en la División Mallorquina y ascendió en marzo de 1813 a subteniente del regimiento de Infantería Cazadores de Castilla, pasando a los pocos meses al colegio militar de Santiago en Galicia. Por real licencia, el 15 de septiembre de 1814 pasó a Salamanca, donde estaba su padre como coronel del regimiento de Caballería del Infante, al que solicitó y obtuvo el pase.
En 1817 permaneció a las órdenes de su padre, que a la sazón era mayor general de la división del Arma de Caballería del ejército de Andalucía, hasta la extinción de dicha división. Estuvo destinado en Castilla la Vieja y Zaragoza, donde curso los últimos años de los estudios de matemáticas y química que impartía la cátedra establecida por la Real Sociedad Aragonesa.
Reincorporado a su regimiento en 1822, intervino en distintas acciones en Cataluña y en virtud de los servicios secretos que prestó a la causa del Rey obtuvo el nombramiento de capitán de infantería. Creada en diciembre de 1823 la Junta de Organización del Ejército, se le destinó a la secretaría de la misma, sobre la que se formó posteriormente la de calificación de empleos y grados, de la cual también fue secretario, con dependencia de su regimiento.
En 1825 tuvo el empleo de teniente de Caballería, el grado de capitán y teniente del Regimiento de Lanceros de la Guardia Real de Caballería, el 17 de abril ayudante adicto a la plana mayor de dicha guardia real y el 20 de agosto fue destinado como ayudante de campo del teniente general de la guardia real de infantería, permaneciendo en el destino varios años en los que intervino en diversas acciones en Cataluña y Aragón.
Con motivo del enlace de Fernando VII con María Cristina de Nápoles, a finales de diciembre de 1829, el Rey le concedió el grado de coronel de caballería y le encomendó evacuar diligencias y comisiones secretas del real servicio en lugares de Navarra, Aragón y Andalucía. En 1832 se trasladó a Lisboa y Oporto, con objeto de informar sobre las operaciones militares que se dieron en los enfrentamientos entre los príncipes Pedro y Miguel de Braganza. En ese año fue promovido por antigüedad a comandante del escuadrón de cazadores de la guardia real y a brigadier de caballería, con motivo de la proclamación de Isabel como princesa heredera. En abril de 1833 obtuvo el empleo de comandante de escuadrón del regimiento de Cazadores a Caballo de la Guardia Real, en junio fue promovido al empleo de brigadier de Caballería y en septiembre fue destinado a las inmediatas órdenes del capitán general de Extremadura, pero no llegó a presentarse a él, pues tuvo que realizar una misión secreta en Portugal.
De cuartel en Madrid, en 1837 fue reclamado para intervenir como segundo comandante en la línea establecida desde la Puerta de Toledo hasta la de Segovia, que se veía amenazada por los carlistas. Seguía de cuartel cuando en agosto de 1838 fue nombrado vocal de la comisión que había de redactar el Reglamento del Arma de Caballería. Una vez terminada la anterior comisión, a principios de 1834 regresó a Madrid, donde quedó en septiembre de cuartel, situación en la que toda-vía se hallaba cuando en 1837 se aproximó a la Capital la Expedición Real, encomendándole el capitán general de Madrid el mando de la reserva y nombrándole posteriormente segundo comandante de la línea establecida entre las Puertas de Toledo y Segovia. En 1844, cuando desempeñaba la presidencia de la referida Junta, fue ascendido a coronel y nombrado secretario de la Inspección General del Arma, permaneciendo en este destino hasta su ascenso a mariscal de campo en septiembre de 1847.
En 1848 pasó a coronel de caballería y secretario de la Inspección General del Arma y poco después a empleo de mariscal de campo. Estando de cuartel en Madrid participó en la sofocación del levantamiento del mes de marzo de 1848. Al mes siguiente fue nombrado jefe del Depósito de Jefes y Oficiales establecido en Almagro y en abril de 1850 segundo cabo de la Capitanía General de Puerto Rico, desempeñando interinamente el mando de la Capitanía General entre abril de 1851 y mayo de 1852 por ausencia de su titular. Durante 1851 y 1852 fue gobernador y capitán general de Puerto Rico.
Poco después fue nombrado académico de número de la de Buenas Letras de Puerto Rico. En 1854 cesó en el cargo anterior y pasó a ser gobernador militar y político de la plaza de Santiago de Cuba y comandante general del Departamento Oriental de la Isla. Durante el tiempo que permaneció en este cargo mejoró el estado de las calles de la población, su alumbrado, el tendido telegráfico, la limpieza de los puertos y la construcción de puentes y vías del ferrocarril a Sabanilla y Maroto, atendiendo a la reparación de caminos y a las obras sociales. A su regreso a la Península, en 1855, pasó a la situación de cuartel, desempeñando los años siguientes diversas comisiones y revistas de inspección. En 1867 fue nombrado comandante general de la 2ª División de Caballería del Ejército de Castilla la Nueva y al año siguiente segundo cabo de esta Capitanía y gobernador militar de Madrid. Fue gentilhombre de Cámara de S.M. (1846) y poseyó las Grandes Cruces de San Hermenegildo (1849) e Isabel la Católica (1846).
Bibl.: R. Oyarzun, Historia del carlismo, Madrid, Ediciones Fe, 1939; J. L. Comellas, Los realistas en el trienio constitucional (1820-1823), Pamplona, Studium Genérale, 1958; Índice Biográfico de España, Portugal e Iberoamerica, München, London, New York, Paris, K. G. Saur, 1990, fols. 293 y 309-332; T. Sarramia Roncero, Los gobernadores de Puerto Rico, San Juan de Puerto Rico, Publicaciones Puertorriqueñas, 1993; pág. 122; L. M. Díaz Soler, Puerto Rico desde sus orígenes hasta el cese de la dominación española, San Juan de Puerto Rico, Editorial de la Universidad de Puerto Rico, 1995, págs. 450 y 451; J. L. Martínez-Cardós Ruiz (coord.), La Guardia Real en su historia, Madrid, Fundación Wellington, 2004.
María Magdalena Guerrero Cano