Menchaca, Francisco de. ?, ú. t. s. xv – 1571. Consejero de Castilla, de Hacienda y de Inquisición.
Su familia había destacado por sus servicios en la administración judicial de la Monarquía, especialmente las labores desempeñadas por su padre como alcalde de la Chancillería de Valladolid entre 1516 y 1528. Esta tradición facilitó su nombramiento como alcalde de la Chancillería de Granada tras finalizar sus estudios en Leyes. Posteriormente, desempeñó el mismo oficio en la de Valladolid, dentro de la reestructuración de personal que el Emperador llevó a cabo previamente a la empresa de Túnez en 1535.
En la Audiencia vallisoletana destacó gracias a su participación en el tribunal, encabezado por el presidente Fernando de Valdés, que presentó sus respetos al Emperador a su regreso en 1536. Esta ceremonia debió de tener más importancia que la meramente protocolaria, dado el interés del cardenal Tavera por aparecer entre los acompañantes de Valdés —junto al alcalde Menchaca, los oidores Alderete, González de Arteaga y Soto— como el responsable de su ascenso administrativo. Poco tiempo después, Menchaca fue nombrado oidor, cargo en el que continuó su estrecha relación con el tribunal gallego —donde era alcalde mayor— y en el que pretendía prosperar pronto al ser propuesto para sustituir a Ronquillo como alcalde de Casa y Corte.
Consiguió este puesto el 11 de febrero de 1548, en calidad del cual acompañó al príncipe Felipe en su viaje, durante el que surgió una sólida amistad con Rui Gómez, que se tradujo, a su regreso a España, en su nombramiento como consejero de Castilla el 13 de junio de 1551. Posteriormente, ingresó en la Cámara del príncipe —en sucesión de su amigo Escudero— y en el Consejo de Hacienda. Durante el verano de 1552 se ocupó de las cuentas resultantes de los bienes de la difunta Emperatriz, y, entre el 16 de septiembre de 1552 y el 2 de agosto de 1553 ocupó, como decano, la presidencia interina del Consejo Real.
En 1554 acompañó al príncipe Felipe a Inglaterra y conservó el puesto en su Cámara al producirse la fusión de ésta con la del Emperador.
En Castilla, en 1559 el dominio ebolista supuso que la Cámara quedara constituida por Velasco y Menchaca.
Como miembro de este comité, leyó la fórmula de juramento a don Carlos en las Cortes de Toledo de 1560. En un primer momento, fue reticente al poder desplegado por Diego de Espinosa, pero se convirtió de manera paulatina en un entusiasta colaborador de su política, lo que no impidió su presencia entre los albaceas testamentarios de Fernando de Valdés a los que el difunto encargó la elaboración de las constituciones del Colegio de San Pelayo de la Universidad de Salamanca.
Falleció en 1571; fue enterrado en la capilla familiar de la iglesia mayor de Valladolid.
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Alejandro López Álvarez