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Laureano Olivares y Sexmilo

Biografía

Olivares y Sexmilo, Laureano. Fuentesaúco (Zamora), 5.IV.1881 – Torrelodones (Madrid), 16.VII.1944. Médico, catedrático, cirujano.

Tras estudiar el bachillerato en Zamora, se desplazó a Madrid, donde realizó la carrera de Medicina en el Colegio de San Carlos, siendo alumno interno por oposición del Hospital Provincial y del Hospital de San Carlos. Se licenció en 1903 con Premio Extraordinario. En 1904 obtuvo el grado de doctor con la tesis Tratamiento quirúrgico de las cirrosis hepáticas, también con Premio Extraordinario. Tras trabajar como médico de guardia, ingresó como médico de número en la Beneficencia Municipal, en la que se le asignaron las labores de jefe de Equipo Quirúrgico, accediendo rápidamente a profesor de número del Hospital Provincial de Madrid. Más tarde fue profesor auxiliar de la Cátedra de Cirugía que regentaba Rafael Mollá. Discípulo predilecto de Manuel Alonso Sañudo y de Alejandro San Martín, en 1917 obtuvo por oposición la Cátedra de Patología y Clínica Quirúrgica de la Facultad de Medicina de San Carlos de Madrid. A partir de ese momento compaginó sus labores asistenciales y docentes en el Hospital de San Carlos con las puramente asistenciales en el Hospital Provincial con el objetivo de disponer de un mayor número de enfermos, realizar más intervenciones y dar más oportunidades de aprendizaje a sus discípulos.

Muy riguroso ante el paciente, mostraba unos profundos conocimientos de la Medicina Interna y era un perfecto conocedor de las corrientes más avanzadas en esos momentos. Fue un afamado cirujano, con habilidades técnicas reconocidas por todos sus compañeros y con una gran capacidad para transmitir lo que sabía, como lo demuestra la gran cantidad de eminentes cirujanos que se formaron a su lado. Entre sus discípulos destacan, entre otros, Plácido González Duarte, Miguel Moraza Ortega, Mariano Fernández Zúmel, Rafael Argüelles López, José Segovia Caballero, Francisco Rodríguez Moraza y Francisco Cano. Gran clínico, impresionaba por su depurada técnica y su gran seguridad en el quirófano. Su mejor aportación a la cirugía española fue la enorme capacidad que tuvo para crear una importante escuela de cirujanos tanto de carácter universitario como los meramente asistenciales. Sus grandes dotes didácticas le hicieron ser uno de los profesores más admirados por los estudiantes.

Cultivó todos los campos de la cirugía, pero mostró especial preocupación por el tratamiento de las fracturas. Manejó con excelencia todos los procedimientos de su época, conociendo a la perfección y practicando las técnicas más modernas del tratamiento de las fracturas de cadera, un gran problema médico y quirúrgico en esos años. Sobre esta materia llevó una importante comunicación al Congreso de Accidentes del Trabajo celebrado en Budapest en el año 1928. Además de numerosos artículos en revistas, publicó diversos libros, algunos de los cuales quedaron inéditos. Entre los que vieron la luz, sobresalen sus Lecciones de Patología Quirúrgica, Fracturas y De la manera como debe enseñarse la cirugía en España. Entre los inéditos, destacan Fracturas de los huesos largos y su monografía sobre la Peritonitis tuberculosa, ambos entregados a Ediciones Morata y que nunca se publicaron. Ingresó como académico de número en la Real Academia Nacional de Medicina en 1934 con el discurso Fracturas del cuello del fémur.

 

Obras de ~: Modo de defenderse las serosas en las afecciones quirúrgicas, 1918; Lecciones de Patología Quirúrgica, Madrid, 1922; Fracturas, 1928; Algunas orientaciones sobre el tratamiento de las heridas, 1929; Innovaciones recientes en cirugía abdominal, 1932; Tratamiento de las fracturas de la extremidad inferior del húmero en los niños, 1936; De la manera como debe enseñarse la cirugía en España, Madrid, 1941; Tratamiento de las quemaduras, 1944.

 

Bibl.: M. Fernández Zúmel, “Laureano Olivares Sexmilo”, en Homenaje al Médico Español, Madrid, Beecham, 1981; S. Albasanz Echevarría, “Sesión en memoria del Excmo.

Sr. D. Laureano Olivares Sexmilo”, en Anales de la Real Academia de Medicina, 56 (1945), págs. 429-435.

 

Manuel Díaz-Rubio García

Relación con otros personajes del DBE