Almaguer, Francisco de. ?, f. s. xv-p. s. xvi – Madrid, 4.X.1564. Consejero de Carlos V y Felipe II.
De familia cristiano-vieja, se formó en la Casa de Contratación de Sevilla bajo el mando del contador Juan López de Recalde, fue escribano y alcalde de Ciudad Rodrigo (1533). Por entonces, también comenzó a actuar en comisiones de la Contaduría mayor de Hacienda, como la negociación de empréstitos, ventas de juros y aprovisionamientos de fronteras. Al poco se desplazó a la Corte, e ingresó en la Casa Real de Castilla como contino, con la obligación de asumir tareas contables. Hacia 1534 se encontraba dentro del grupo de criaturas del poderoso secretario y contador mayor Francisco de los Cobos. Así, cuando en julio de 1540 se produjo la vacante de teniente de la Contaduría mayor de Cuentas, Alonso de Vozmediano, al recomendarle a Carlos V entre sus cualidades Cobos destacaba su “fidelidad, bondad y habilidad [...] y otra más, que no es converso”. Pero, de momento, la promoción tuvo que esperar hasta 1543. Tras la muerte de Sancho de Paz, teniente en la Contaduría mayor de Hacienda, Cobos encargado de tomar razón del cargo y data, seleccionó a Almaguer, al que consideraba “experimentado [...] fiel y muy buen offiçial en cosas de hazienda, y no es confeso”. De esta guisa Francisco de Almaguer se incorporó también al Consejo de Hacienda de Castilla. Durante los años siguientes Almaguer adquirió un gradual protagonismo en la resolución de los asuntos financieros y fue confirmado en sus puestos tras la muerte de Cobos, en 1547. En particular, bajo su ejercicio se confirió especial consistencia a la escribanía de finanzas o “cargo de tomar razón”, de manera que en 1551 Carlos V tuvo a bien autorizar su establecimiento como una contaduría más, aunque la consolidación se demoró hasta mayo de 1554, bajo la regencia del príncipe Felipe. Entonces, sus ingresos ordinarios alcanzaron 179.650 maravedíes por el oficio de lugarteniente de la Contaduría mayor más otros 100.000 por el cargo de tomar razón, y los 35.000 como contino. Pero, además, recibía ayudas de costa y diversas mercedes, como el octavo del rendimiento de las explotaciones de coral de la costa de Berbería y el rendimiento de los mineros descubiertos en el obispado de Guadix entre 1552 y 1562.
Las actividades de Almaguer como consejero fueron muy prolijas. No sólo se ocupó de la gestión de los asuntos hacendísticos propios de sus cargos (encabezamientos, arrendamientos, asientos, etc.), sino también emitió numerosos dictámenes sobre las complejas cuestiones económicas suscitadas en pleno siglo XVI: la tasa del pan, la salida de moneda, el comercio con Francia, el precio del dinero. No obstante, en 1553- 1554, cuando el doctor Velasco llevó a cabo una inspección del funcionamiento de las instituciones hacendísticas, fue acusado de diversas irregularidades, aunque finalmente su inocencia quedó demostrada.
Pero las reformas institucionales que acompañaron el ascenso de la facción “ebolista” en el tránsito de reinado de Carlos V a Felipe II supusieron un detrimento del protagonismo de Almaguer. Las nuevas ordenanzas de 1554 mermaron la jurisdicción de los lugartenientes, al tiempo que, en mayo de 1556, perdió su oficio de registrar el cargo y data, que pasó al secretario Eraso. En 1557, cuando se nombraron nuevos contadores mayores, su tenencia fue renovada, y continuó perteneciendo al Consejo de Hacienda. Pero sus opiniones ya no tenían el ascendente de los tiempos pasados. Con ocasión de la suspensión de pagos de 1560, por ejemplo, aunque formó parte de las juntas que se reunieron en Toledo, hizo planes que Felipe II desoyó. Murió en Madrid, en octubre de 1564, y fue enterrado en el monasterio de la Trinidad.
Bibl.: C. Espejo, “Biografía española: Francisco de Almaguer”, en Revista Nacional de Economía, XXIV (1927), págs. 469-476; H. Keniston, Francisco de los Cobos, secretario de Carlos V, Madrid, Castalia, 1980; C. J. de Carlos Morales, El Consejo de Hacienda de Castilla. Patronazgo y clientelismo en el gobierno de las finanzas reales, Valladolid, Junta de Castilla y León, 1996; “Francisco de Almaguer”, en J. Martínez Millán (dir.), La Corte de Carlos V, vol. III, Madrid, Sociedad Estatal para la Conmemoración de los Centenarios de Felipe II y Carlos I, 2000, págs. 30-32.
Carlos Javier de Carlos Morales
