Seijas Bieyra, Antonio María. Tuy (Pontevedra), 30.IX.1767 – ?, m. s. XIX. Funcionario y ministro.
Inició su carrera administrativa, como escribiente en la Comandancia General del Resguardo, en 1785.
Fue nombrado teniente visitador honorario en 1792 y, al año siguiente, oficial agregado en la administración de Logroño. Poco después fue también designado como administrador interino de Tabacos en Nájera.
Volvemos a encontrarle en las fuentes en 1797, con el cargo de cabo de ronda montada en su ciudad natal; y dos años después como cabo resguardo de Málaga, ciudad en cuya Contaduría alcanzó el rango de oficial en 1801.
Carecemos de datos sobre su persona durante la Guerra de la Independencia, y sabemos que en 1816 era contador de Rentas Provinciales en Santiago. Al año siguiente era administrador provincial en Soria, en 1818 fue contador de aduanas en Barcelona, y en 1819 en Cádiz. Hay una nueva laguna en su biografía durante el Trienio Liberal. En 1824 figuraba como intendente de Provincias.
Entre el 7 de octubre y el 16 de diciembre de 1837 ocupó el puesto de ministro de Hacienda en la segunda reorganización del gabinete de Eusebio Bardají Azara, habiendo sido precedido por Pío Pita Pizarro y José María Pérez. Le sucedió en el cargo, ya en el gabinete del conde de Onfalia, Alejandro Mon, que ejercía su ministerio por primera vez. En sus memorias Ramón Santillán calificó aquella gestión de Seijas como débil. Un balance similar hizo Javier de Burgos, quien señaló a raíz de la segunda reorganización del gabinete Bardají que, “por resultas de estas disposiciones quedó más débil el ministerio que antes de su recomposición. Ulloa estaba de antiguo desacreditado por su nulidad; Seijas era un viejo oficinista a quien ni aún sus apasionados concedían otra inteligencia que la de las formalidades del régimen de aduanas [...]” (de Burgos, 1850-1851, pág. 96). Como bien señala, Seijas era vocal de la Junta de Aranceles cuando fue nombrado ministro, y dado que entonces contaba con setenta años, no es extraño que formulase dicho juicio, que no debió de andar muy desencaminado.
Bibl.: J. de Burgos, Anales del reinado de Isabel II, t. V, Madrid, Imp. Mellado, 1850-1851; J. L. Comellas, Política y administración en la España isabelina, Madrid, Narcea, 1972; G. Bleiberg, Diccionario de Historia de España, vol. III, Madrid, Alianza Editorial, 1979; A. Rull Sabater, Diccionario sucinto de Ministros de Hacienda, (siglos xix y xx), Madrid, Instituto de Estudios Fiscales, 1991; R. Santillán, Memorias (1808-1856), Madrid, Editorial Tecnos y Banco de España, 1996; A. Nieto, Los primeros pasos del estado constitucional: historia administrativa de la Regencia de María Cristina de Borbón, Barcelona, Ariel, 1996; J. M. Cuenca Toribio y S. Miranda García, El poder y sus hombres. ¿Por quiénes hemos sido gobernados los españoles (1705-1998)?, Madrid, Editorial Actas, 1998; J. L. Comellas, Isabel II. Una reina y un reinado, Barcelona, Editorial Ariel, 1999; G. Rueda Hernanz, Isabel II, Madrid, Arlanza, 2001; J. M. Cuenca Toribio, Ocho claves de la historia de España contemporánea, Madrid, Ediciones Encuentro, 2003.
José Manuel Ventura Rojas
