Torres García, José María de. Granada, 1887 – Madrid, 11.III.1973. Escenógrafo.
En los primeros años del siglo XX se trasladó a vivir a Madrid con su familia. Su primer trabajo en el cine fue creando los decorados de Cabrita que tira al monte (Fernando Delgado, 1925). Cuando el director José Buchs comenzó a rodar El abuelo (1925), primera película para su productora Films Linares, en un improvisado estudio situado en un solar de la Calle Bravo Murillo de Madrid, no pudo contar con Emilio Pozuelo, su decorador habitual, porque había fallecido recientemente, y para realizar su labor eligió a Torres. A partir de esta película, Torres trabajó con Buchs en todas las demás que éste dirigió, destacando los espacios que creó en los Estudios Madrid-Film para Una extraña aventura de Luis Candelas (1926) que se adecuaban a los ambientes reales de los edificios donde se rodaron algunos interiores, también destaca la fidedigna recreación del siglo XIX para Prim (1930). Después de rodar Isabel de Solís, reina de Granada (1931), su última película con Buchs, en unos improvisados platós instalados en el Teatro Rosales, fue contratado en los estudios C.E.A. como diseñador y constructor de decorados trabajando en Agua en el suelo (Eusebio Fernández. Ardavín, 1934). En esos estudios su profesionalidad le permitió construir de una forma precaria la tétrica edificación de Una de miedo (Eduardo García Maroto, 1934) en las galerías altas y corredores del edificio. También en C.E.A. fue capaz de aprovechar los decorados de Nobleza baturra (Florián Rey, 1935) para crear la singular cárcel de La hija del penal (Eduardo García Maroto, 1935). En 1935 empezó a trabajar diseñando y construyendo los decorados de las películas producidas por Filmófono, la primera fue Don Quintín el amargao (Luis Marquina), donde sobresale la realista reconstrucción de una calle madrileña.
Durante la Guerra Civil, permaneció en la zona gubernamental, interviniendo en dos cortometrajes de Antonio del Amo, Industrias de guerra y Mando único, y en la película Nuestro culpable, en la que colaboró en los decorados con Fernando Mignoni, que a su vez la dirigió. Esta fue su última película ya que jamás volvió a aparecer en los títulos de crédito de película alguna, mientras que su hijo, el director de fotografía Ricardo Torres Núñez (Madrid, 1910), que pasó la guerra en el bando sublevado continuó con su carrera que había comenzado durante el cine mudo.
Obras de ~ : Filmografía: Escenógrafo en: F. Delgado (dir.), Cabrita que tira al monte, 1925; J. Buchs (dir.), El abuelo, 1925; J. Martín (dir.), Amapola, 1925; J. Buchs (dir.), Una extraña aventura de Luis Candelas, 1926; J. Buchs (dir.), Pilar Guerra, 1926; E. Fernández Ardavín (dir.), La bejarana, 1926; J. de Orduña (dir.), Una aventura de cine, 1927; J. A. Cabero (dir.), Estudiantes y modistillas, 1927; N. M. Sobrevila (dir.), El sexto sentido, 1929; F. Camacho (dir.), Zalacaín, el aventurero, 1929; J. Buchs (dir.), Isabel de Solís, reina de Granada, 1931; E. Fernández. Ardavín (dir.), Agua en el suelo, 1934; E. García Maroto (dir.), Una de miedo, 1934; F. Rey (dir.), Nobleza baturra, 1935; E. García Maroto (dir.), La hija del penal, 1935; L. Marquina (dir.), Don Quintín el amargao, 1935; F. Rey (dir.), Morena Clara, 1936; A. del Amo (dir.), Industrias de guerra, 1937; A. del Amo (dir.), Mando único, 1937; F. Mignoni (dir.), Nuestro culpable, 1938.
Bibl.: J. Gorostiza, Directores artísticos del cine español, Madrid, Cátedra y Filmoteca Española, 1997; J. Gorostiza López, “Torres, José María”, en J. L. Borau (dir. y coord.), Diccionario del cine español, Madrid, Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España-Alianza Editorial, 1998, pág. 862.
Jorge Gorostiza López
