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Juan Blas Sitges y Grifoll

Biografía

Sitges y Grifoll, Juan Blas. Mahón (Islas Baleares), 24.IV.1842 – c. 1919. Director general de Aduanas y escritor.

Ingresó en el Cuerpo de Aduanas al finalizar sus estudios de bachillerato en Francia en 1859. Coincidiendo con su estancia en la aduana de Barcelona, estudió por libre en la Escuela de Ingenieros Industriales, publicando, años después, un tratado sobre mecánica e industria. En 1867 entraba en la Dirección General de Aduanas, en Madrid, participando en las sucesivas reformas arancelarias y realizando varios viajes al extranjero (Inglaterra, Francia, Alemania, Suecia, Turquía, Hungría y Rusia) para tratar diversos asuntos relacionados con el ramo de Aduanas (exportación de vinos españoles, cultivo y comercio del trigo, fraudes, etc.).

De entre todos los países que visitó, se puede considerar que Francia marcó el devenir de su vida. En primer lugar, allí estudió más de tres años, durante la adolescencia. En 1877 retornó al país galo, ya como funcionario del Cuerpo de Aduanas, en calidad de secretario de la comisión encargada de negociar en París un acuerdo comercial. Cinco años después estaba otra vez en París, pero ahora como secretario y vocal de la comisión que negoció un tratado de gran importancia y provecho para España, como fue el de 1882 con Francia. El éxito de la negociación llevó al Ministro de Hacienda a nombrarle director general de Aduanas, aunque Sitges rechazó el cargo.

En 1898 la responsabilidad fue mayor, puesto que formó parte de la comisión encargada de firmar en París el Tratado de Paz con los EE.UU., representando al Ministerio de Hacienda conjuntamente con José Valdés Díaz, compañero y futuro sucesor al frente de la Dirección General de Aduanas. A su vuelta de París no pudo rehusar otra vez el puesto de director, ya que no tuvo noticia de este otro nombramiento hasta que la reina regente hubo firmado el Real Decreto. Se trató de una sabia precaución del ministro Villaverde que, de esta manera, se aseguraba la participación de Sitges en el equipo que debía reflotar la economía española, tocada y hundida, al igual que los barcos, tras el Desastre del 98.

Después del Tratado de Comercio con Suiza y la reforma arancelaria de 1906 fue retirándose paulatinamente de las obligaciones profesionales. Al jubilarse abandonó la dirección general (1907) y, después, también fue sustituido por el nuevo director general de Aduanas, José Valdés Díaz, al frente de la Comisión para el Estudio de los Tratados de Comercio (1910). De este modo, desde ese mismo año se pudo dedicar en exclusiva a la afición que ocupó buena parte de los últimos años de su vida, publicando varias biografías históricas centradas en el medievo español. Trabajó en La Gaceta Industrial, fue propietario de Crónica de la Industria y director de El Eco de Aduanas. El ayuntamiento de Mahón le nombró Hijo Ilustre de la ciudad en 1906.

 

Obras de ~: Nociones de artes mecánicas y procedimientos industriales, Madrid, 1872; Las mujeres del rey Don Pedro I de Castilla, Madrid, Imp. Sucesores de Rivadeneyra, 1910; La muerte de D. Bernardo de Cabrera, consejero del rey D. Pedro IV de Aragón (1364), Madrid, Imp. Sucesores de Rivadeneyra, 1911; Enrique IV y la excelente señora llamada vulgarmente doña Juana la Beltraneja, Madrid, Imp. Sucesores de Rivadeneyra, 1912; El monasterio de religiosas benedictinas de San Pelayo del Real de Oviedo, Madrid, Imp. Sucesores de Rivadeneyra, s.f.

 

Bibl.: “Biografía del Excelentísimo Señor Don Juan Blas Sitges y Grifoll, Hijo Ilustre de Mahón”, en Revista Menorca (1909); F. Valdés Hansen, El Director General de Aduanas José Valdés Díaz (1854-1916). Del Ponteceso de los Pondal a la Paz de París, Sada (La Coruña), Ediciós do Castro, 2005, págs. 10, 56-64, 69, 75, 77, 83, 93, 136, 173, 199 y 215-227.

 

Felipe Valdés Hansen