Bobadilla y Corral, Pedro de. ¿Medina del Campo? (Valladolid), c. 1400 – ?, ú. t. s. xv. Alcaide de Arévalo y del Alcázar de Segovia.
Nació en el seno de una familia de cortesanos. Su padre, Juan Fernández de Bobadilla (aunque en algún documento aparece como abuelo), señor de Bobadilla del Campo, camarero mayor de Enrique III (cuyo padre tuvo también este cargo con Alfonso XI), acompañó al infante Fernando “de Antequera” en las reconquistas de Zahara y de Setenil, en las que tuvo un papel destacado. Las crónicas recogen que en 1407 habló al infante en nombre de las tropas de hijosdalgos y que fue el responsable de transportar la “lombarda grande” desde Zahara hasta Setenil; transporte que requería, bueyes aparte, más de doscientos hombres. Estuvo casado con Beatriz Corral y Sarmiento, dama de la corte.
Pedro de Bobadilla sirvió algún tiempo en la corte aragonesa (al principio como paje de Fernando de Antequera, ya convertido en rey de Aragón), y en Aragón debió permanecer largos años, apareciendo en algún documento como “Embajador en Aragón”. Al volver a Castilla, trajo consigo el tratamiento de “Mosén”, con que se le conoció desde entonces. Se halló luego sirviendo a Juan II de Castilla en las guerras de Portugal y de Granada. Alcaide de Maqueda primero, lo fue después de Arévalo durante los años en que aquí vivieron, con su madre Isabel de Portugal (viuda de Juan II), los infantes de Castilla Alfonso e Isabel (la futura Isabel la Católica). Esta coincidencia marcaría el futuro de su familia.
Casó con María Maldonado Bonal, de ilustre familia salmantina (hija de Juan Maldonado Anaya, regidor de Salamanca), quien sería más tarde dama de la infanta Isabel. Tuvo con ella tres hijos: Francisco, Beatriz e Isabel. Francisco, el Comendador, fue maestresala de los Reyes Católicos y, nombrado después gobernador de las Indias en sustitución de Cristóbal Colón, es célebre por haber apresado a Colón en Santo Domingo el año 1500. Beatriz de Bobadilla, marquesa de Moya (a quien no hay que confundir con su homónima sobrina segunda, la Cazadora, que casó con Hernán Peraza de Ayala, señor de Canarias), nació once años antes que la infanta Isabel. Como hija del alcaide de Arévalo y dama de la Reina viuda, Beatriz tuvo con ella un trato casi familiar durante la larga estancia de siete años de la infanta en Arévalo (quien era una niña de sólo tres años cuando aquí llegó en 1454), iniciándose una relación perdurable que la convirtió, con el tiempo, en la camarera mayor de Isabel, ya Reina, y en su consejera y amiga. Beatriz casó con Andrés de Cabrera, camarero mayor de Enrique IV y luego tesorero y mayordomo de los Reyes Católicos, señor de Chinchón y primer marqués de Moya. La última hija, Isabel, también dama de la Reina, casó con Álvaro de Luna (nieto del condestable del mismo nombre), que fue doncel de Enrique IV y alcalde mayor de Granada.
Isabel la Católica, poco después de acceder al trono, había puesto la ciudad de Segovia y su alcázar (donde no sólo se guardaba el tesoro real, sino que en él vivía su hija la princesa Isabel) bajo el mando del citado Andrés de Cabrera. Éste destituyó al alcaide del alcázar, Alonso Maldonado, y nombró para ese cargo a su suegro mosén Pedro de Bobadilla, lo que produjo el estallido de una revuelta que, conocida como “las alteraciones de Segovia”, fue apaciguada gracias a la intervención en persona de la Reina, especialmente preocupada por la seguridad de su hija. Bobadilla, que había sido sorprendido y apresado por el rebelde Maldonado, fue entonces sustituido por el siempre valioso Gonzalo Chacón, que gozaba de la plena confianza de la Reina.
Fuentes y bibl.: Real Academia de la Historia, Colección Salazar y Castro, D-21, fol. 104v. y 179, D-31, fol. 217v., 218, E-8, fol. 47, E-66, fol. 300.
A. López de Haro, Nobiliario genealógico de los Reyes y Títulos de España, Madrid, Luis Sánchez, 1622 (reimpr. en Ollobarren [Navarra], Wilsen Editorial, 1996, vol. II, págs. 319-321); L. Salazar y Castro, Historia genealógica de la Casa de Lara, Madrid, Imprenta Real, 1696 (reimpr., Bilbao, Wilsen Editorial, 1988, t. II [moderno], pág. 639 y t. III [moderno], pág. 696); A. y A. García Carrafa, “Bobadilla” y “Maldonado”, en Enciclopedia heráldica y genealógica hispano-americana. Diccionario de Apellidos, ts. XV y LI, Madrid, Antonio Marzo, 1924 y 1934, págs. 76 y ss. y 6 y ss. respect.; H. del Pulgar, Crónica de los Reyes Católicos, ed. de J. de Mata Carriazo, vol. I, Madrid, Espasa Calpe, 1943, págs. 267 y ss.; R. Ezquerra, “Bobadilla, Francisco de”, en G. Bleiberg (dir.), Diccionario de Historia de España, t. II, Madrid, Revista de Occidente, 1952, págs. 430-431; F. Pérez de Guzmán (atrib.), “Crónica del Serenísimo Príncipe Don Juan II”, en Crónicas de los Reyes de Castilla, ed. de C. Rosell, t. II, Madrid, Atlas, 1953 (col. Biblioteca de Autores Españoles, LXVIII), págs. 292-293; A. Palencia, Crónica de Enrique IV, vol. II, Madrid, Ediciones Atlas, 1975 (col. Biblioteca de Autores Españoles), págs. 305-306; A. García de Santa María (atrib.), Crónica de Juan II de Castilla, ed. de J. de Mata Carriazo, Madrid, Real Academia de la Historia, 1982, pág. 144; M. Fernández Álvarez, Isabel la Católica, Madrid, Espasa Calpe, 2003.
Pedro Rodríguez-Ponga y Salamanca
