Gysser, Hans. Silgenstad (Alemania), s. m. s. xv – Salamanca, c. 1520. Impresor.
Originario de la ciudad alemana de Seligenstad, o Silgenstad, nada se sabe de su actividad antes de establecerse en Salamanca, pues apenas existen datos sobre su vida. Su nombre aparece por primera vez en el colofón de la obra de Nicolás de Plove Tractatus sacerdotales, con fecha 7 de abril de 1500. Parece que en los primeros momentos de su establecimiento en Salamanca como impresor va a depender económicamente de Juan de Porras, pues la utilización del material de imprenta es indistinta entre los dos impresores y el entendimiento entre ellos fue más intenso de lo que era habitual.
Gysser llegó a Salamanca en un momento en el que la ciudad y su Universidad eran el foco intelectual del renacimiento en Castilla durante el reinado de los Reyes Católicos. Esta circunstancia hizo de la ciudad un centro destacado para el florecimiento del arte tipográfico, que facilitó el establecimiento de impresores extranjeros.
Cuarenta y una son las ediciones salidas de su taller.
Tiene la costumbre de identificar su imprenta y en casi todos los colofones se encuentra su nombre y el de su patria, Silgenstad, acompañado en ocasiones de los adjetivos “alemán” o “teutónico”. Es evidente que al ser nuevo en la ciudad procura por todos los medios darse a conocer y sólo nueve de sus obras no presentan colofón y otras dos lo tienen pero sin indicar su nombre.
A partir de la impresión de La gran conquista de Ultramar en 1503 su nombre desaparece hasta 1507 en que imprime el Tratado contra toda pestilencia y aire corrupto y en 1509 el Cancionero de Juan de la Encina.
Aunque su nombre desaparece de los colofones en estos años Ruiz Fidalgo le adjudica algunas impresiones.
De 1501 hasta su cierre, en 1509 su taller fue de hecho más activo que el de Porras. Se vuelve a encontrar su nombre el 13 de noviembre de 1512, cuando imprime una dedicatoria dirigida a Diego Ramírez de Villaescusa, obispo de Málaga, que llega a Salamanca como visitador de la Universidad, para añadirla a algunos ejemplares de las Opera de Aurelio Prudencio Clemente, impresos en Logroño por el taller de Arnao Guillén de Brocar. La dependencia económica y de material tipográfico de Juan Porras es manifiesta. Terminó trabajando en el taller de éste desde el año 1509 hasta 1520.
Sus primeras obras se imprimen con tipos que no habían sido utilizados con anterioridad en Salamanca.
Utiliza seis tipografías góticas y una romana. Su forma de imprimir indica una gran pericia, utilizando abundante decoración en sus impresiones y creando algunos grabados nuevos. Un tercio de la producción de Gysser se trata de textos latinos, títulos de enorme demanda para uso académico, y aunque no se le puede considerar un impresor especializado en editar obras concretas, hay que mencionar que es el encargado de imprimir todas las ediciones financiadas por el cardenal Cisneros que se imprimieron en Salamanca y en las que usa dos formas para el escudo cardenalicio, ambas creadas por él, aunque conserven gran parecido con el utilizado en Toledo por Pedro Hagenbach.
Estas ediciones salmantinas son un modelo de impresión con gran belleza en la distribución del texto.
Singularidad presenta también en la primera de las dos ediciones que realiza del Cancionero de Juan del Encina. En la portada debajo de dos tacos xilográficos horizontales figura el escudo real de los Reyes Católicos sin leyenda y a su lado coloca, como colgados de él, los retratos de ambos reyes. Posiblemente fue un excelente grabador y a él se deban los grabados del Missale placentinum pues aunque ha dejado la imprenta en 1509, su nombre consta en el colofón de 31 de marzo de 1520 como tipógrafo de Porras, lo que parece indicar que durante estos años ha sido su empleado.
El material tipográfico de Gysser pasó a manos de un nuevo propietario que lo amplió mínimamente: Lorenzo de Liondedei, un italiano que llegó desde Pesaro tal y como ponen de manifiesto sus colofones.
Bibl.: M. Gutiérrez del Caño, “Ensayo de un catálogo de impresores españoles desde la introducción de la imprenta hasta fines del siglo xviii”, en Revista de Archivos, Bibliotecas y Museos, III (1899), págs. 662-671, y IV (1900), págs. 77- 85, 267-272, 667-678 y 736-739; L. Cuesta gutiérrez, “Impresores y libreros en la Salamanca imperial del siglo xvi”, en Gutenberg-Jahrbuch, 1941, págs. 126-154; La imprenta en Salamanca: avance al estudio de la tipografía salmantina(1480-1944), Salamanca, Diputación Provincial, 1960; British Museum, Catalogue of books printed in the xvth century now in the British Museum: Part X: Spain. Portugal, London, British Museum, 1971; F. J. Norton, A descriptive catalogue of printing in Spain and Portugal 1501-1520, Cambridge, University Press, 1978; A. Odriozola, “La imprenta en Castilla en el siglo xv”, en Historia de la Imprenta Hispana, Madrid, Editora Nacional, 1982; L. Ruiz Fidalgo, La imprenta en Salamanca (1501-1600), Madrid, Arco Libros, 1994, 3 vols.; J. Delgado Casado, Diccionario de Impresores españoles (siglos xv-xvii), vol. I, Madrid, Arco Libros, 1996; F. J. Norton, La Imprenta en España, 1501-1520, Madrid, Ollero & Ramos, 1997; J. Martín Abad, Los primeros tiempos de la imprenta en España (c. 1471-520), Madrid, Ediciones Laberinto, 2003; H. Haebler, Impresores primitivos de España y Portugal, Madrid, Ollero & Ramos, 2005.
Isabel Moyano Andrés