Carazo Alvarado, Nicolás. Cartago (Costa Rica), c. 18.IV.1780 – 25.III.1833. Gobernador interino de Costa Rica y político monárquico.
Sus padres fueron Francisco Carazo Soto Barahona y Jacoba de Alvarado. Su padre era capitán de granaderos. Nicolás Carazo se casó en Cartago, el 27 de julio de 1805, con Escolástica Peralta López del Corral, hija legítima de José María Peralta de la Vega y de Ana Benita (Nava) López del Corral.
Tuvo numerosa descendencia: María Ramona Benita, bautizada el 29 de mayo de 1806, José María del Espíritu Santo, bautizado el 10 de junio de 1808; María Lucía, bautizada el 13 de diciembre de 1809; Rafael de Jesús, bautizado el 20 de mayo de 1812; Juan Manuel, bautizado el 28 de diciembre de 1814; María Joaquina Bernarda, nacida el 20 de agosto de 1817; Ana Francisca, bautizada el 24 de enero de 1819; María Casimira, bautizada el 5 de marzo de 1821; María Vicenta Nazaria, bautizada el 27 de julio de 1822; Diego Calixto, bautizado el 13 de octubre de 1824; J. Francisco Toribio, bautizado el 29 de abril de 1827; María Isabel Eduarda, bautizada el 13 de octubre de 1830 y fallecida el 30 de junio de 1832; Nicolás Buenaventura, bautizado el 14 de julio de 1833 y fallecido el 2 de enero de 1837, y Juan. Testó en Cartago el 27 de febrero de 1833 ante el notario Joaquín Estanislao Carazo Alvarado.
Fue gobernador interino de la provincia ante la ausencia de esta autoridad en 1799, 1817 y 1819; regidor sencillo de Cartago en 1809, y durante el proceso de independencia fue legado por Bagaces y Esparza en 1821. Fue rematario de los bienes de Nuestra Señora del Rosario en Alajuela. Después de la independencia, participó activamente en el bando de los defensores del imperio de Agustín de Iturbide. Perteneció a la Junta Electoral, en 1822 en calidad de propietario, junto con José Joaquín Oreamuno, Mariano Montealegre, Gregorio José Ramírez, Félix Oreamuno, Marcos Morales y Jesús Vargas.
Participó en la Guerra de Ochomogo en 1821. Fue sometido a juicio y enviado prisionero a San José, junto con otros participantes en el conflicto bélico. Durante ese proceso, la capital pasó a San José. Participó en la redacción de la nueva Constitución del Estado de Costa Rica en la que pedían que su primer capítulo se legitimara la Iglesia Católica.
Junto con su mujer, Escolástica Peralta, tenían varias propiedades, entre las que constan un potrero, casa, cañaveral y platanar. En la primera mitad del siglo xix comerciaba con Panamá. Tuvo problemas en 1816 con las autoridades fiscales por unos fardos de ropa sin haber pasado por la aduana, por lo que se le embargaron. Compró una chácara en Aguas Calientes de Cartago en 1807.
Fuentes y bibl.: Archivo Nacional de Costa Rica, Índice de protocolos coloniales de Cartago, San José, Imprenta Nacional, 1909.
R. Fernández Guardia, La Independencia, San José, Comisión del Sesquicentenario de la Independencia de Centroamérica, 1971.
Elizet Payne Iglesias