Bertrán de Lis y Sancho, Félix. Madrid, 20.VII.1841 – 12.VI.1906. General de Artillería, laureado.
Fueron sus padres Manuel Bertrán de Lis y Rives y Elena Sancho de Subercase. Su padre fue un conocido político, diputado por Valencia, que ocupó diversas carteras como ministro de Marina dos veces, de Hacienda, de Estado y de Gobernación. Ingresó en el Ejército el 12 de noviembre de 1856, con quince años, como cadete en el Colegio de Artillería de Segovia, en donde tras superar su plan de estudios salió promovido a teniente de Artillería el 13 de febrero de 1862 con el número 21 de la 105 promoción.
De teniente fue destinado al 3.er Regimiento de Artillería a Pie de guarnición en Madrid, donde hizo un destacamento de dos meses en Ciudad Rodrigo, pasó posteriormente al 5.º Regimiento de Artillería Montado de guarnición en Vicálvaro primero y luego en Madrid. En julio y agosto de 1863 su Regimiento se trasladó al Real Sitio de San Ildefonso para dar guardia a la Reina. En septiembre su Regimiento fue trasladado a Valencia. En mayo de 1865 su Regimiento fue trasladado a Alcalá de Henares, donde permaneció de guarnición hasta que en febrero de 1866 regresó a Madrid, donde continuó hasta julio, que volvió a Alcalá. Estos continuos cambios de guarnición son reflejo de una época cuajada de pronunciamientos y rebeliones en donde el poder político, para conjurar sediciones, recurría en numerosas ocasiones a este procedimiento. El 22 de junio de 1866 fue un trágico día de luctuoso recuerdo para el Cuerpo de Artillería. Desde un tiempo atrás conspiraban contra el Gobierno del general O’Donnel los generales Prim, Contreras, Pierrard y Moriones. El capitán de Artillería Baltasar Hidalgo de Quintana consiguió atraerse a los sargentos de Artillería, entre los que, por diversos motivos, había un grave estado de malestar contra sus oficiales. Al iniciarse el motín en Madrid, los sargentos entraron de madrugada en las Salas de Estandartes de los Regimientos y al oponerse los oficiales a la sublevación fueron muertos por sus antiguos subordinados.
Al conocerse la noticia, se desplazó con su regimiento a Madrid para combatir a los sediciosos.
Su batería avanzó por la calle de Preciados; su capitán José Fontes y Fernández de Córdoba, que iba al frente de la 1.ª sección y que había pedido la licencia absoluta unos días antes, cayó tan mal herido en la plaza de Santo Domingo que falleció ese mismo día; el teniente Bertrán de Lis, que le sucedió, colocó las piezas a brazo en la calle Ancha de San Bernardo a menos de cien metros de las posiciones que ocupaban las fuerzas, muy superiores, de los insurrectos. Consiguió desalojarlos perdiendo a mucha gente y ganando bravamente la Cruz Laureada de San Fernando de 2.ª clase pensionada con cuatrocientos escudos anuales, que no quiso solicitar creyendo modestamente haber cumplido con su deber. A su capitán se le concedió también a título póstumo. Continuó destinado en su regimiento alternando guarnición entre Alcalá y Madrid. En enero de 1869 pasó destinado al 2.º Regimiento de Artillería de Montaña, de guarnición en Madrid, en clase de ayudante.
En junio de 1869 ascendió a capitán de Artillería por antigüedad y pasó destinado al 3.er Regimiento de Artillería a Pie de guarnición en Carabanchel primero y luego en Madrid. En octubre de ese año recibió la Cruz blanca del Mérito Militar de 1.ª clase y volvió destinado al 2.º de Montaña de guarnición en Madrid, donde permaneció hasta abril de 1872 que marchó con su batería para relevar el destacamento que su regimiento mantenía en Vitoria. Pero iniciada ya la Tercera Guerra Carlista recibió nuevas órdenes de dirigirse a Burgos, de donde marchó a Tudela de Ebro, y por el camino sostuvo, el día 19, un encuentro con la facción en los montes de Oturque.
Se incorporó el día 26 al Ejército de Operaciones del Norte a las órdenes del general Serrano duque de la Torre. El día 26 se encontró en la acción de Durango por la que recibió el grado de comandante del Ejército. Tras el convenio de Amorebieta, que dio fin a la guerra en Vizcaya, quedó acantonado en Durango y posteriormente en Pamplona. El 30 de julio pasó a las órdenes del general Frutos Valdés y estuvo acantonado en Hernani hasta que el 2 de agosto se trasladó a San Sebastián para rendir honores al rey Amadeo. El día 7 pasó a Pamplona a las órdenes del comandante de Artillería de la plaza, Luis Sagés. En septiembre de 1872 obtuvo el empleo de comandante del Ejército por los méritos contraídos durante la campaña. El 20 de diciembre de 1872 salió de operaciones con su batería al Ejército del Norte formando parte de la columna del coronel Navascués el 5 de enero se encontró en la acción de Salinas de Oro contra las facciones de Ollo y Rodico hasta que en virtud del decreto de 8 de febrero de disolución del Cuerpo de Artillería por la cuestión Hidalgo, obtuvo el retiro a petición propia. El 27 de septiembre se incorporó a su regimiento en Madrid tras el decreto del presidente de la República, Emilio Castelar, de 22 del mismo mes, por el que se reorganizaba y rehabilitaba el Cuerpo de Artillería. De Madrid partió a Vitoria para tomar el mando y organizar su antigua batería, regresando a Madrid con los restos de ella y con el objeto de reorganizarla el 1 de noviembre. El 18 de diciembre salió con su batería a formar parte del ejército sitiador de la Cartagena cantonal, con el que permaneció hasta la rendición de la plaza el 12 de enero de 1874. Por su comportamiento durante el sitio fue recompensado en febrero de 1874 con el grado de teniente coronel. Continuó de operaciones en Aragón y Valencia, encontrándose el 17 de septiembre en la acción de Pobleta y Togullo contra las facciones carlistas, por la que fue recompensado con la Cruz roja al Mérito Militar de 2.ª clase, el 11 de diciembre en el ataque dado a las mismas facciones en el barranco de Bollajo subiendo la cuesta de Cupido; el 17 en la acción de Menarroyo y el 29 se halló con su batería formando parte de la Brigada Dabán que en Sagunto proclamó rey de España a Alfonso XII.
Desde principios de 1875 continuó de operaciones con el Ejército del Centro. El 27 de enero salió de Villar del Arzobispo y al llegar a Chelva se halló en la acción sostenida contra el faccioso Dorregaray, por la que fue recompensado con la graduación de teniente coronel del Ejército; el 20 en el ataque contra el castillo de Collado, el 21 en la acción que tuvo lugar al bajar al pueblo de Higueruela; el 12 de marzo en la acción de Fuente Robles y Campo Robles; el 20 en los encuentros tenidos con los carlistas desde Utiel hasta Liria para impedir su paso a Castilla la Nueva; el 15 de mayo en el encuentro que tuvo lugar en Villar del Arzobispo; el 18 en la de Villar de Tejas a las órdenes del general en jefe Rafael Echagüe; el 10 de julio en el ataque a Villar del Arzobispo; el 16 en la acción que tuvo lugar en las calles de Chelva por las que fue recompensado con el grado de coronel del Ejército; los días 17, 18 y 19 de julio se encontró en el bloqueo y toma de los fuertes del castillo del Collado por cuyo comportamiento recibió una mención honorífica. Con la conquista del castillo del Collado acababa la guerra en el centro, por lo que el ejército se trasladó a Cataluña. Se encontró desde el 21 hasta el 27 de agosto en el sitio y toma de Seo de Urgel.
Continuó de operaciones hasta fin de noviembre, que pasó destinado al 1.er Regimiento de Artillería Montado de guarnición en Madrid.
Terminada la guerra, contrajo matrimonio, el 12 de septiembre de 1876, con María Esperanza Valderrábano O’Donnell, con la que tuvo tres hijos, dos varones y uno de ellos también oficial de Artillería. Ese año se le declaró benemérito de la patria. En diciembre se le concede la Medalla de la Guerra Civil con el pasador de Cartagena y posteriormente la Medalla de Alfonso XII con los pasadores de Cantavieja y Seo de Urgel. En marzo de 1878 se le concede la Cruz blanca del Mérito Militar de 2.ª clase. De mayo de 1878 a mayo de 1879 su regimiento fue trasladado a Segovia. En julio de 1881 fue destacado a Vitoria con la 5.ª batería de su regimiento.
En noviembre de 1881 ascendió a comandante de Artillería por antigüedad y fue destinado al 1.er batallón del 2.º Regimiento de Artillería a Pie de guarnición en Madrid. En julio de 1882 pasó destinado al 8.º Regimiento de Artillería Montado de nueva creación de guarnición en Alcalá de Henares, donde permaneció durante todo el empleo de comandante.
En abril de 1887 ascendió a teniente coronel de Artillería por antigüedad y, tras un breve paso por el Parque de Artillería de Madrid como subdirector, fue destinado al Regimiento de Artillería de Sitio de guarnición en Madrid, salvo unos meses de 1890, que pasó a Segovia. En junio de 1892 se disolvió el Regimiento de Sitio y pasó destinado al 14.º Regimiento de Artillería Montado de nueva creación. En agosto de 1891 formó parte de una comisión encargada de redactar un Reglamento de Servicio Interior del Cuerpo de Artillería.
En agosto de 1892 ascendió a coronel de Artillería por antigüedad y tras un breve destino en el Parque de Artillería de Pamplona, en la Pirotecnia Militar de Sevilla y en el 1.er Regimiento de Artillería Montado en Madrid, se le destinó finalmente en noviembre de 1893 a la Comisión Central de Remonta de Artillería en la que pasó todo el empleo de coronel teniendo a su cargo la responsabilidad de la compra de ganado caballar y mular para dotar de medios de tracción para los Regimientos de Artillería de toda España.
En abril de 1904 ascendió por elección a general de brigada y fue nombrado en mayo comandante general de Artillería de la 5.ª Región en Zaragoza, quedando desde diciembre desempeñando el mismo cargo con el 5.º Cuerpo de Ejército. En 1905 fue nombrado comandante general de Artillería del 1.er Cuerpo de Ejército con sede en Madrid. Ese año recibió la Gran Cruz del Dragón de Annan por el presidente de la República de Francia. En ese cargo permaneció hasta su fallecimiento el día 12 de junio de 1906 a los sesenta y cinco años de edad y cuarenta de servicio, sin contar los que le fueron de abono por las diversas campañas en las que participó. Estaba en posesión de la Cruz sencilla, la Placa y la Gran Cruz de la Real y Militar Orden de San Hermenegildo.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. b-2170, exp. personal de Félix Bertrán de Lis y Sancho; “Nota Necrológica”, en Memorial de Artillería, serie V, t. V (1908), págs. 600-604.
Ubaldo Martínez-Falero del Pozo
