Ungut, Meinardo. Alemania, p. m. s. xv – ¿Sevilla?, 24.X.1499-12.XI.1499. Impresor.
Avanzado el año 1490 llegó a Sevilla una compañía de impresores: un polaco, Estanislao Polono, y un alemán, Meinardo Ungut. Acompañaban a éste su mujer, Comincia de Blanquis, y un hijo de corta edad, de nombre Tomás.
Los tipos empleados en los productos del taller de los dos compañeros estaban emparentados con fundiciones empleadas en el taller de Mathias Moravus, en Nápoles, y puede suponerse que habrían trabajado con él. Se ha afirmado, aunque no es dato plenamente documentado, que la parte técnica del nuevo taller hispalense correspondía al impresor polaco y que de Ungut dependía la parte administrativa. De todas formas, no deja de ser significativo el detalle de la aparición, más frecuente y en solitario, del nombre de Ungut en los documentos relacionados con pagos y cobros; tal hecho puede responder a esa diferente función que cada uno de los dos impresores desarrollaba con prioridad en el taller común.
Está plenamente documentada la intervención de los Reyes Católicos en la llegada a Sevilla de esta compañía de impresores. Se conoce el dato exacto gracias a una cédula real, fechada en Sevilla a 14 de marzo de 1491, cuyo texto se incluye en una reclamación de Meinardo Ungut, en nombre propio y de su compañero: exigían que se les declarase exentos, pues lo debían estar por lo indicado en dicha cédula real, de ciertas obligaciones contributivas para la financiación de la Guerra de Granada. Motivó la reclamación ante el Cabildo de la ciudad el hecho de que los jurados de la colación a la que pertenecía su residencia les habían impuesto la obligación de costear un espingardero. El Cabildo obedeció lo ordenado, pero comisionó al jurado Francisco del Alcázar para que presentase ante los Reyes el problema que planteaba la modificación de un repartimiento ya cerrado. No se conoce en qué quedó definitivamente el asunto y si los impresores lograron al fin, o no, su propósito. Habitaban entonces en la calle de Bayona, colación de Santa María, dentro del barrio de los genoveses. Se conocen otros domicilios posteriores: primero compartieron unas casas situadas en la colación de San Juan de la Palma, que arrendaron el 25 de octubre de 1491 y en las que debieron permanecer cuatro años (algún problema se les planteó a los impresores en esta nueva residencia, pues se conoce un mandamiento del teniente de asistente de Sevilla, de 14 de junio de 1493, para que los alguaciles les amparasen y defendieran en la tenencia de esas casas arrendadas); y luego Meinardo Ungut vivió en la colación de Santa María, aunque seguramente el taller común se encontraba en la colación de San Salvador, donde vivía Estanislao Polono.
El primer colofón con sus nombres está datado el 4 de febrero de 1491 y corresponde a la obra del dominico Diego de Deza, Defensiones Sancti Thomae ab impugnationibus Nicolai de Lyra magistrique Mathiae Doering propugnatoris sui. A un total de setenta ediciones alcanzó la producción conocida del taller común sevillano.
A Granada llegaron, en 1494, algunos viajeros alemanes. Uno de ellos, médico de profesión, Jerónimo Münzer, ha relatado el acontecimiento. Dejando de lado todos los restantes detalles resulta de interés el testimonio del cronista cuando cuenta que él y sus compañeros de viaje coincidieron allí con varios “impresores alemanes, Jacobo Magno de Argentina, Juan de Espira, Jodoco de Gerlishofen y otros”. Ningún colofón de ninguna edición granadina ha mencionado ninguno de estos nombres. ¿Eran operarios de un taller cuyos maestros hacen acto oficial de presencia en la ciudad un año largo después? Posiblemente. El arzobispo fray Hernando de Talavera sintió la necesidad de disponer de un taller de imprenta en su ciudad. Sus gestiones ante los dos talleres más activos en ese momento en Sevilla dieron como resultado el desplazamiento de un impresor de cada uno de ellos a Granada: Meinardo Ungut dejó solo a Estanislao Polono, y Juan Pegnitzer a sus compañeros Tomás Glockner y Magno Herbst. Ungut, en Sevilla, con fecha 4 de febrero de 1496, otorgó poder notarial a favor de su compañero para que pudiera actuar durante su ausencia. Tal vez no permaneció en persona en el taller granadino desde el primer momento en que comenzó su andadura y posiblemente esos operarios, cuyos nombres ha recordado Münzer, trabajaban desde antes en el taller común de Ungut y Pegnitzer.
Dos únicas ediciones se conocen de este taller: una primera, sin indicaciones tipográficas, de una obra del propio arzobispo, Breve y muy provechosa doctrina cristiana. Confesional, Del restituir daños y males. Del comulgar. Contra el murmurar y el maldecir. De las ceremonias de la misma. Del vestir y calzar. De cómo ordenar y ocupar el tiempo; y una segunda, con colofón declarando los nombres de los dos impresores y el día 30 de abril de 1496, del Primer volumen de vita Christi de Francesc Eiximenis, texto adicionado por el propio arzobispo. Razones puramente pastorales motivaron la actuación del arzobispo. El paso de los impresores fue fugaz y retornaron de inmediato a Sevilla.
Se desconoce la fecha del fallecimiento de Meinardo Ungut. Puede situarse entre el 24 de octubre y el 12 de noviembre de 1499. La primera fecha corresponde al colofón de la edición en castellano del De consolatione philosophiae de Boecio, texto acompañado del Vergel de consolación (atribuido en algunos repertorios a Jacobo de Benavente), en el que figuran su nombres junto al de Estanislao Polono; en la segunda fecha ya aparece sólo el nombre del segundo en el colofón de la edición de la Coronación a Íñigo López de Mendoza, Marqués de Santillana, de Juan de Mena.
Meinardo en su testamento, otorgado ante el notario apostólico Juan Bautista Mirón, dejó por herederos a su hijo Tomás y a su viuda, y por albacea a Estanislao. Éste levantó, el 20 de diciembre de 1500, ante el escribano público Francisco Segura, el inventario de los bienes del difunto. La actuación tiene lugar en el domicilio de Comincia de Blanquis, la viuda de Ungut, en la calle de Bayona, colación de Santa María. Con fecha 16 de febrero de 1503 el impresor Jacobo Cromberger indica que estaba casado con Comincia, con la que tuvo varios hijos: Juan, su sucesor en el taller, quizá otro varón de nombre Francisco, y Catalina. Comincia otorgó testamento el 18 de febrero de 1511 y nombró al antiguo socio de su marido, albacea, y el mismo Estanislao Polono actuó como testigo en la declaración de mayoría de edad de Tomás, el hijo de Meinardo Ungut, y en la entrega al mismo de los bienes de su progenitor por parte de su tutor, un tal Justo, un mercader alemán, tío suyo, cuyo nombramiento como tutor se había producido el 29 de abril de 1511.
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Julián Martín Abad
