Ciudad y Aurioles, José. Córdoba, 26.XI.1849 – Madrid, 15.IV.1924. Jurista, magistrado, presidente del Tribunal Supremo de Justicia.
Nació en Córdoba el día 26 de noviembre de 1849 y fue bautizado en la capilla del Sagrario de la Santa Iglesia Catedral el mismo día, recibiendo los nombres de José María de los Santos Mártires y Rafael Vicente de la Santísima Trinidad. Su padre, Miguel Ciudad de la Hoz, fue miembro del Consejo de S. M. y secretario honorario del mismo. José Ciudad y Aurioles estudió las primeras letras y la segunda enseñanza en Córdoba, el bachillerato en el Instituto Provincial de su ciudad natal y la licenciatura en Derecho en la Facultad de la Universidad Central de Madrid. El acta del Grado de licenciado en Derecho Civil y Canónico, con fecha de 27 octubre de 1871, está firmada por el insigne civilista Augusto Comas, a la sazón secretario general de la Universidad.
El título de abogado en ejercicio se le expidió el 4 de noviembre de 1871, y se incorporó al Colegio de Abogados de Madrid el 11 de diciembre de ese año, para ejercer con despacho libre hasta 1874. Se presentó a los ejercicios de oposición a aspirantes al Cuerpo del Ministerio Fiscal y obtuvo el número dos de la propuesta elevada al Ministerio por la Junta calificadora con fecha 11 de marzo de 1874. El 1 de abril de 1871 fue nombrado fiscal municipal suplente del distrito de la Audiencia de Madrid, cargo del que tomó posesión el día 2 de ese mes. El 13 de junio del mismo año fue nombrado fiscal municipal del distrito del Hospicio, donde ejerció su actividad varios años, hasta que el 17 de septiembre de 1874 se le nombró, en virtud de oposición, aspirante a la Judicatura con el número 7 en el escalafón del cuerpo. Con fecha 27 de noviembre del mismo año fue nombrado promotor fiscal de Murias de Paredes, pero tuvo que renunciar a dicha plaza por incompatibilidad con el nombramiento de juez de Primera Instancia e Instrucción en Rute (Córdoba), con fecha 12 de abril de 1875, Juzgado del que tomó posesión el día 4 de mayo de 1876. Posteriormente pasó a servir los juzgados de Morón (Sevilla) y Utrera (Sevilla), este último con fecha 27 de septiembre de 1880.
En diciembre de ese mismo año ocupó la plaza de magistrado de la Audiencia Criminal de Utrera (Sevilla), una de las que fueron suprimidas al crearse las actuales Audiencias Provinciales en 1892. Tras su paso por Carmona, Ciudad y Aurioles solicita traslado a su ciudad natal, Córdoba, donde tomó posesión de su cargo de juez el día 3 de mayo de 1885.
Algún tiempo después llegó a ocupar la presidencia de la Audiencia de Málaga. Durante su presidencia, y a propuesta del ministro de Marina, se le concedió la Gran Cruz del Mérito Naval (Real Decreto de 1 de mayo 1890), por los servicios prestados en el incendio del vapor argentino Pacífico, al apaciguar a bordo la insubordinación de los pasajeros.
El día 20 de enero de 1902 fue nombrado presidente de la Audiencia Territorial de Madrid, donde ya anteriormente había prestado servicios como teniente fiscal en la Audiencia Provincial, de la que fue presidente. El día 31 de diciembre de 1903 se le designó magistrado del Tribunal Supremo, nombramiento que, junto con S. M. el Rey, firmó el ministro de Gracia y Justicia, Sánchez de Toca. Siguieron los ascensos en la carrera judicial, y en la Gaceta de Madrid del viernes 10 de septiembre de 1909 aparece su nombramiento como presidente de Sala del Alto Tribunal. Sucesivamente fue presidente de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Supremo y, finalmente, presidente del Tribunal Supremo de Justicia, en virtud de Real Decreto de 15 de noviembre de 1917. Cesó en la presidencia por jubilación y así se publicó en un Real Decreto de 5 de marzo de 1923, siendo ministro de Gracia y Justicia Álvaro de Figueroa y Torres, conde de Romanones.
Este insigne jurista cordobés fue vocal de la Comisión General de Codificación, consejero de las Órdenes Militares y caballero profeso del hábito de Santiago.
S. M. el Rey le concedió, como señal de su real aprecio, la Gran Cruz de la Real y Distinguida Orden de Carlos III.
Obras de ~: “Consideraciones elementales deducidas de la práctica, acerca de la reforma del Código Penal, Discurso leído como Presidente del Tribunal Supremo en la solemne sesión de apertura de los Tribunales el día 16 de septiembre de 1918”, en Revista General de Legislación y Jurisprudencia (RGLJ), t. 133 (1918), págs. 161 y ss.; “Relajación de la jurisdicción criminal en España”, en RGLJ, t. 135 (1919), págs. 289-332; “La revisión de la Ley Orgánica de lo Contencioso-administrativo”, en RGLJ, t. 137 (1920), págs. 193-241; El moderno criminal astuto, Madrid, Editorial Reus-Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, 1920; E. de Benito y Q. Saldaña, Comentarios científicos-prácticos al Código Penal de 1870, pról. de ~, Madrid, Reus, 1920-1926 (Colección Biblioteca Jurídica de Autores Españoles y Extranjeros).
Bibl.: Archivo del Senado; Expediente personal del Senador por derecho propio D. José Ciudad Aurioles, sig. HIS-0119-04.
José Manuel González Porras