Soto, Félix de. Lumbier (Navarra), c. 1731 – ?, c. 1803. Platero.
Natural de Lumbier (Navarra), se casó con Teresa Pérez, natural de Corera (La Rioja). Figura en el vecindario de Logroño de 1772, donde vivía en una casa propiedad del Santo Oficio de la Inquisición con un criado, Pedro Ignacio Castroviejo, de oficio platero. En 1783, en la tasación que hizo de los bienes de plata de Nicolás Montalbo, declaró tener 52 años, por lo que debió nacer en 1731. En 1791 era mayordomo de la Congregación de plateros de San Eloy de Logroño, firmando en julio con otros miembros la solicitud al corregidor para que se obligase a los plateros José Urra y Pablo Zaporta a que se incorporasen a ella, tal y como habían prometido a la hora de examinarse y en cumplimiento de las ordenanzas generales de platería de 1771. Así mismo, firmó la petición de noviembre del mismo año, de erigir en Colegio la citada Congregación a instancias de la Real Junta de Comercio y Moneda, de modo que se pudiesen incorporar otros plateros dispersos por la región, establecidos en Calahorra, Nájera, Santo Domingo y Haro.
Su actividad profesional se documenta principalmente en Logroño y localidades próximas. Así, en 1769 labró un copón para la iglesia de Santa María de Palacio de Logroño, en 1778 arregló la cruz y otras piezas de la parroquial de Alberite, en 1788 la de Cenicero le pagó por unas sacras y unos ramos de plata, entre 1762 y 1794 arregló las cruces grande y pequeña de Viana (Navarra), donde debió estar avecindado, y entre 1799 y 1803 cobró por una media luna para la imagen gótica de Nuestra Señora de la Natividad de Medrano. Esta última pieza se conserva, así como la corona que labró para la imagen de la Virgen del Rosario de la misma iglesia de Medrano, con su marca “SOTO”, que debió realizar entre 1770 y 1801 pues se encuentra junto a la marca de localidad de Logroño y la utilizada en ese periodo por el fiel contraste José Baio. Las mismas marcas llevan un rostrillo, un juego de coronas y una sacra de la citada iglesia, en las que se manifiesta la calidad de sus trabajos, perviviendo en él la simetría del ornamento barroco junto a la movilidad y elegancia del rococó. En la cruz procesional de la iglesia de Santa María de Palacio, con el mismo triple marcaje, utiliza la hojarasca y la rocalla sobre fondo punteado en los brazos abalaustrados, dando muestras de su originalidad. También se ha conservado con su marca un relicario en la parroquia de Daroca de Rioja.
Obras De~: cruz procesional, iglesia de Santa María de Palacio, Logroño, entre 1770 y 1801; corona de la Virgen del Rosario, Medrano (La Rioja), entre 1770 y 1801; pareja de coronas, Medrano (La Rioja), entre 1785 y 1801; rostrillo, Medrano (La Rioja), entre 1785 y 1801; sacra, Medrano (La Rioja), entre 1785 y 1801; media luna, Medrano (La Rioja), entre 1799 y 1801; relicario, Daroca de Rioja (La Rioja), u. t. s. XVIII.
Bibl.: M. B. Arrúe Ugarte, La platería logroñesa, Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1981; J. M. Cruz Valdovinos, “Platería”, en Historia de las artes aplicadas e industriales en España, Madrid, Cátedra, 1982; J. C. Labeaga, Viana monumental y artística, Pamplona, Institución Príncipe de Viana, 1984; E., Calatayud Fernández y A. González Blanco, La iglesia parroquial de Medrano. Arquitectura, ornamentación e historia, Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1991; M. B. Arrúe Ugarte, Platería riojana (1500-1665), Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1993.
Begoña Arrúe Ugarte
