Villalobos y Soto, José de. Madrid, 2.VIII.1801 – 1.III.1877. Militar, mariscal de campo y caballero Laureado de San Fernando.
Era hijo de Clemente de Villalobos y Guerra y de María Soto Vaillant. En febrero de 1818 ingresó en el Cuerpo de Guardias de la Real Persona y en enero de 1821 se le concedió el empleo de alférez de Caballería, con el que pasó al Depósito de Ultramar. En mayo de ese mismo año embarcó en Cádiz a las órdenes del general Mourgeon con destino al Nuevo Reino de Granada, llegando a Puerto Cabello al mes siguiente para, de nuevo, embarcarse con destino a Panamá y posteriormente a Quito, donde entró en operaciones contra los insurrectos. Se halló el 24 de mayo de 1822 en la batalla de Pichincha, y tras la derrota sufrida ante Sucre se retiró a Quito con el resto de las tropas realistas, refugiándose en el fuerte del Panecillo, donde tuvo que capitular dos días después. Una vez en libertad fue trasladado a Cuba, desde donde embarcó hacia la Península, llegando a Barcelona en enero de 1823. Hasta junio del año siguiente permaneció en el Depósito de Valencia a la espera de recibir la purificación por su conducta durante la etapa del Gobierno Constitucional, y al conseguirla fue destinado con el empleo de teniente al Regimiento de Granaderos a Caballo de la Guardia Real. En el mes de agosto de 1825 intervino en la persecución del general Bessières, que tras encabezar un levantamiento ultrarrealista se dirigió desde Madrid a Guadalajara, levantando partidas realistas a su paso y reuniéndosele en Brihuega tres compañías del Regimiento de Caballería de Santiago, pero, habiendo fracasado su intento de tomar Sigüenza, dispersó a sus hombres y buscó refugio en la Serranía de Cuenca, siguiéndole tropas de la Guardia Real que habían salido de Madrid en su persecución, siendo detenido el día 23 en Zafrilla y fusilado el 26 en Molina de Aragón por orden del conde de España, comandante general de la Guardia Real. Por su intervención en esta acción recibió el capitán Villalobos una Cruz de 1.ª Clase de San Fernando. Los años siguientes guarneció Medina del Campo y formó parte del Ejército de Observación del Tajo hasta su disolución en septiembre de 1827. Pasó a continuación a Madrid, donde hasta 1833 realizó el servicio propio de su clase. En octubre de este último año se incorporó al Ejército del Norte con el empleo de capitán del Regimiento de Cazadores a Caballo de la Guardia Real, entrando enseguida en operaciones contra los carlistas. En 1834 combatió en Muro — donde ganó una segunda Cruz de 1.ª Clase de San Fernando —, Erice, Olazagoitia, Artaza, Viana, Sesma, Mendaza y Arquijas, y al año siguiente en Larraga y Arróniz, ya con el empleo de comandante, alcanzado en octubre del año anterior. Al mando accidental de la Brigada de Caballería de la División de la Ribera, se halló en mayo de 1836 en la acción de Dicastillo, regresando en septiembre a Madrid para hacerse cargo de la Mayoría del Cuerpo.
Nombrado en septiembre de 1837 teniente coronel mayor del Regimiento de Granaderos a Caballo de la Guardia Real, continuó en Madrid, donde en septiembre, al aproximarse Cabrera a la Capital, se le dio el mando de toda la caballería disponible de la Guardia Real con objeto de que reforzase a la División de Espartero. Tras el correspondiente juicio contradictorio, fue recompensado en 1838 con una Cruz Laureada de San Fernando por su destacada actuación en la acción de Viana, el 4 de septiembre de 1834, en la que una indecisión de las tropas del barón de Carondelet fue aprovechada por Zumalacárregui para realizar una carga que desordenó a los Cazadores a Caballo y los arrojó sobre la infantería, sembrando el desconcierto, pero el capitán Villalobos reaccionó con prontitud reuniendo a unos cuantos soldados que se batían en retirada y consiguiendo detener a los carlistas y evitar mayores pérdidas. Continuó en su destino de la Guardia Real hasta la disolución de ésta a finales de 1841, guarneciendo durante estos años las plazas de Vicálvaro, Logroño, Burgos y Madrid.
Fue destinado en diciembre de 1841 al Regimiento de Cataluña y en abril del año siguiente, tras haber obtenido el empleo de coronel, se le dio el mando del de Sagunto, al que se incorporó en Alcalá de Henares. En septiembre de 1843 se le confió el mando de la Brigada de Caballería del Distrito de Cataluña, a cuyo frente asistió al asedio y toma de Barcelona, y al mes siguiente recibió en recompensa el empleo de brigadier, con el que continuó en Barcelona al mando de la referida Brigada. En septiembre de 1847 quedó en situación de cuartel y en agosto de 1848 se hizo cargo del Depósito de Jefes y Oficiales establecido en Medina del Campo. En septiembre de 1854, siendo gobernador militar de Palencia, fue ascendido a mariscal de campo, encargándose de la organización de la Milicia Nacional de dicha Provincia hasta que en octubre pasó con igual cargo a Santander. En mayo de 1855 se le ordenó marchar urgentemente a tomar el mando interino de la Capitanía General de las Provincias Vascongadas, de la que pasó a ser segundo cabo en el mes de mayo. En julio sofocó el levantamiento de la provincia de Logroño contra el nuevo Gobierno, ocupando la Ciudad y desarmando a la Milicia Nacional. En septiembre de 1859 fue nombrado segundo cabo de Valencia, en noviembre comandante general de la División de Infantería del 1.er Ejército y en octubre del año siguiente comandante general del Campo de Gibraltar. Se le confió el mando de la 1.ª División del Ejército de Cataluña en enero de 1867, el de la 2.ª un mes después y en julio fue designado gobernador militar de la provincia de Gerona y comandante general de la 3.ª División. Al ser nombrado en 1869 Regente el general Serrano, fue desterrado a Santa Cruz de Tenerife en situación de cuartel, permitiéndosele el traslado a Valencia en abril de 1870 y a Madrid en enero del año siguiente, permaneciendo en dicha situación hasta la fecha de su fallecimiento. Poseía las Grandes Cruces de San Hermenegildo (1854), Carlos III (1855) y al Mérito Militar por servicios especiales (1867). Estuvo casado con Francisca Javiera Erquinaga Correa en primeras nupcias y con Micaela Perales Echevarría en segundas.
Fuentes y bibl.: Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. B-2689; San Fernando, leg 1770/11.
P. Chamorro Baquerizo, Estado Mayor del Ejército Español, Madrid, 1851-1854; A. de Ceballos-Escalera y Gila, J. L. Isabel Sánchez y L. Ceballos-Escalera y Gila, La Real y Militar Orden de San Fernando, Madrid, Palafox & Pezuela, 2003.
José Luis Isabel Sánchez