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Escipión Campi

Biografía

Campi, Escipión (o Scipione). Pésaro (Italia), p. t. s. XVI – Lieja (Bélgica), c. 1579. Capitán e ingeniero militar al servicio de la Monarquía Hispánica.

Era hijo de Bartolomé Campi, con el que se preparó como ingeniero y con el que colaboró durante algún tiempo.

Escipión sirvió en Flandes a las órdenes del duque de Alba, ayudando a su padre en las fortificaciones de Mons, Haarlem y Groningen (donde en 1570 reemplazaba a su padre), y en 1572 trabajaba en la construcción de un fuerte en Flesinga.

En 1573 reclamaba al duque de Alba 6.000 florines, el pago de seis meses de sueldo atrasados. Según una carta de Luis de Requesens y Zúñiga, gobernador general de los Países Bajos en sustitución del duque de Alba (de 30 de abril de 1574) a Gabriel de Zayas, secretario de Estado de Felipe II, “se le requiere [a Escipión Campi] de España”, a donde había acompañado al duque de Alba. La respuesta sería que no podía marcharse enseguida, por estar construyendo dos fortificaciones en España.

Posteriormente, el rey Felipe II prefirió que pasase a Italia al lado de la persona de D. Juan de Austria con el sueldo de 80 escudos mensuales y 110 en campaña, como así se verificó en 1575, en atención a “su mucha práctica en las cosas de fortificación”, en la cual se le consideraba como el mejor. Verificado el viaje y suscitada cierta cuestión en el reino de Nápoles entre sus ingenieros, sobre las fortificaciones de las plazas de la marina de la Apulia, Taranto y Bari, dispuso el marqués de Mondéjar que pasase Campi al segundo punto a reconocerle y formar su proyecto, “lo cual verificó con mucha aprobación”. Curiosamente, y evidentemente por error, el 10 de marzo de 1575 se le señalaba como uno de los amotinados holandeses. Sin embargo, en ese año trabajaba en Sicilia y Apulia bajo el mando de D. Juan de Austria.

En 1576 se le esperaba en Sicilia, donde debido a su gran prestigio no se comenzaban grandes obras de defensa hasta su llegada. En la isla visitaba, proyectaba e iniciaba la construcción de las fortificaciones de Siracusa, Augusta, Malta, Trápani, Palermo, Marsala, Mesina y Milazzo. Salvo las dos últimas, todo lo hizo entre los meses de mayo y noviembre del año citado. Al acabar con su vertiginosa inspección de trabajo, debía volver a Nápoles, a pesar de seguir siendo necesario en la isla.

Respecto a las fortificaciones emprendidas en Italia, en Siracusa, Campi, influido por la toma de Túnez por los turcos, realizaba una tenaza con dos grandes baluartes con orejones y cortina recta, y seguramente otra similar en Malta.

Al siguiente año, en agosto de 1577, de nuevo a las órdenes de D. Juan de Austria, Escipión Campi estaba nuevamente en Flandes para la construcción del “campo atrincherado” de Buge, localidad de Namur, ciudad sitiada por D. Juan, que fallecía en Bouge el 1 de octubre de 1578.

Siguiendo como ingeniero en Flandes, continuó sus servicios hasta el año 1579, en el que murió de enfermedad en Lieja, casi al mismo tiempo que aquel distinguido príncipe.

 

Bibl.: J. Aparici y García, Continuación del Informe sobre los adelantos de la comisión de Historia en el Archivo de Simancas, dirigido al Excmo. Sr. Ingeniero General Don Antonio Remón Zarco del Valle, tercera parte, Madrid, Imprenta del Memorial de Ingenieros, 1851; A. Cámara Muñoz, Fortificación y ciudad en los reinos de Felipe II, Madrid, Ministerio de Defensa, 1998; A. Vera Botí, La arquitectura militar del Renacimiento a través de los tratadistas de los siglos XV y XVI, tesis doctoral, Valencia, Universitat Politècnica de València, 2001; P. Bragard, Dictionnaire biographique des ingénieurs des fortifications: Pays-Bas espagnol, principauté de Liège, Franche-Comté, 1504-1713, Namur, Les Amis de la Citadelle de Namur, 2011; J. J. de Castro y A. Cuadrado Basas, “Las fortificaciones de la Corona Hispánica en el Mediterráneo durante los siglos XVI y XVII (1492-1700)”, en A. Ruibal Rodríguez (coord.), Castillos de España: publicación de la Asociación Española de Amigos de los Castillos, nº extra 167-170 (ejemplar dedicado a IV Congreso de Castellología) (2012), págs. 57-74; J. M. Muñoz Corbalán, “Los ingenieros flamencos en el Ejército español”, en Presencia de ingenieros militares extranjeros en la milicia española, Revista Internacional de Historia Militar, 97 (2019), págs. 91-170.

 

Juan Carrillo de Albornoz y Galbeño

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