León, Ángela de. ?, ú. t. s. XVII – ¿Alcalá de Henares (Madrid)?, p. m. s. XVIII. Actriz y música.
Hija de la actriz-música Josefa de San Román y del músico de las compañías Juan de León, aparece mencionada en los documentos también como Ángela de San Román, posiblemente para diferenciarla de su contemporánea y homónima Ángela de León, autora de comedias, cuya actividad como tal está documentada en Valencia desde la segunda mitad de la década de 1670. Pese a que los Reglamentos de teatro promulgados en 1641 imponían a las actrices la obligación de estar casadas y pertenecer a la misma compañía que su marido, no consta que lo fuese Ángela de León o de San Román, quien figura siempre en las compañías junto a alguno de sus progenitores. Su actividad profesional como actriz parece que se inició en 1688, cuando de la mano de su madre entró como 6.ª dama en la compañía de Agustín Manuel, bajo cuya dirección desarrolló gran parte de su carrera, ascendiendo a 5.ª dama en 1692 y a 4.ª dama en 1694. En 1695, tras la muerte de Agustín Manuel y parece que por imposición de la Junta del Corpus madrileño, la actriz y su madre pasaron a formar parte de la compañía de Carlos Vallejo, con el que continuó en 1696, también como 4.ª dama. Pese a su corta carrera destacó rápidamente por sus dotes como cantante, según reconoce en 1691 la Junta del Corpus, cuando en un intento por justificar los excesivos gastos ocasionados por la formación de “dos compañias quales no se an visto muchos a[ño]s”, declara que Ángela de León, “música principal” de la compañía de Agustín Manuel, a la que hubo que traer desde Valencia junto con su padre, Juan de León, músico y representante de la misma compañía, “quedo sobresaliente por su voz”.
Pero aunque la villa se muestra siempre interesada en contar con ella para las compañías madrileñas, sus relaciones con la Junta del Corpus parecen haber sido muy conflictivas. En 1690, y pese a que se le había prohibido salir de Madrid, la actriz se ausentó, motivo por el cual la compañía de Agustín Manuel no pudo representar el 27 de marzo en el corral del Príncipe porque “faltaua en su compañia la persona de Angela de Leon que los Señores de la Junta de fiesta de Corpus hauian embiado por ella a la ciudad de Barcelona, la qual hauia llegado a esta Corte el dicho dia lunes, y por raçon de no hauer ensaiado loa, entremes y baile no hauia podido representar dicho dia”.
En 1691 se produjo un nuevo incidente al rebajar la Junta del Corpus su categoría dentro de la compañía de Agustín Manuel, lo que no debió gustar a la actriz pese a que se la compensó económicamente. Ese año resultó herida durante la representación del auto Psiquis y Cupido de Calderón al volcarse uno de los carros, y aunque el herido de mayor consideración fue Agustín Manuel, ella resultó doblemente perjudicada, ya que además le robaron varias joyas. A partir de 1694 las relaciones con la Junta empeoraron notablemente. Ese año la actriz pidió una ayuda de costa para “sustentar a su Madre por haberle la villa quitado el poder ganar de comer fuera de Madrid por detenerla para las compañias a su hija y habiendoselo prometido nunca se ha acordado Ma[dri]d de faborecer esta causa piadosa y asi ruega a Madrid la faborezcan en su suplica mayormente habiendo perdido una ayuda de costa que les daban (como consta y es notorio en el mentidero) porque saliesen fuera”, y aunque aceptó formar parte de la compañía de Agustín Manuel como 4.ª dama, puso como condición “que esto sea asta la fiesta del Corpus por seruir a la Villa de Madrid”. Los problemas se agravaron aún más a partir de 1695 cuando la Junta, que tenía noticia de que ella y su madre querían irse a Lisboa, les notificó el 10 de febrero la prohibición de salir de Madrid, y para mayor seguridad pretendió embargarles los vestidos, pero ambas declararon que los tenían empeñados sin querer decir a quién. El 3 de marzo se notificó su huida junto con la de otros tres actores. Detenidos los cinco en Badajoz, el gobernador de la ciudad los envió de vuelta a Madrid, donde los actores justificaron su salida diciendo que el enviado de Portugal les había asegurado contar con el permiso del protector de los teatros y del corregidor de la villa. Instalada nuevamente en la Corte, la actriz volvió a mostrar su rebeldía al despedirse de la compañía de Vallejo, en la que se le había metido, alegando que con el salario asignado “no puede pasar”. Al año siguiente volvió a plantear problemas a la Junta al negarse a firmar como 4.ª dama de Vallejo sin que primero “se le consigne o de vna ayuda de costa para su M[adr]e”. La drástica resolución de la Junta, que aunque habitualmente procuraba llegar a un acuerdo económico con los actores, decidió en este caso sustituirla por Mariana de León, parece confirmar que las relaciones se habían deteriorado demasiado, hasta el punto de que en 1697 la actriz desapareció de la escena teatral madrileña.
La encontraremos de nuevo, aunque fugazmente, en 1701 participando en la zarzuela Quinto elemento es amor de Antonio de Zamora con música de Sebastián Durón. Representada por las compañías de Teresa de Robles y Carlos Vallejo para celebrar la onomástica del nuevo rey (Felipe V) por un reparto enteramente femenino, Ángela hizo en ella el papel de Fauno (gracioso) y su madre el de Sirene. Es probable que en una obra de tanta envergadura musical se quisiese contar con una actriz-música de valía y a la que sus continuos enfrentamientos con las autoridades municipales no habían impedido participar durante varios años en la representación de los autos sacramentales madrileños.
Como miembro de la compañía de Agustín Manuel, la actriz intervino también en las reposiciones de algunas de las fiestas más importantes escritas por Calderón, y en el estreno de prácticamente todas las obras importantes de Bances Candamo, dramaturgo “oficial” de Carlos II. Alejada de las tablas, tras la muerte de su padre “se retiró a Alcalá de Henares con su madre [...] y viue en un retiro empleandose en exercicios de virtud”.
Fuentes y bibl.: Archivo Municipal de la Villa (Madrid), Secretaría, 2-198-17 (1690 y 1691), 2-198-19 (1689), 2-200-2 (1692), 2-200-3 (1693), 2-200-4 (1694), 2-200-5 (1695), 2-200-6 (1696) y 2-200-7 (1697).
J. E. Varey y N. D. Shergold (eds.), Fuentes para la historia del teatro en España, III: Teatros y comedias en Madrid: 1600- 1650. Estudio y documentos, Londres, Tamesis Books, 1971, pág. 92; Fuentes para la historia del teatro en España, VI: Teatros y comedias en Madrid: 1687-1699. Estudios y Documentos, Londres, Tamesis Books, 1979, pág. 302; Fuentes para la historia del teatro en España, I: Representaciones palaciegas (1603- 1699), Londres, Tamesis Books, 1982, págs. 212-213 y 217; M. Gulló y Cobo, “100 documentos sobre teatro madrileño (1582-1824)”, en VV. AA., El teatro en Madrid, 1583-1925, Madrid, Museo Municipal, 1983, págs. 85-137; J. E. Varey y N. D. Shergold (eds.), Fuentes para la historia del teatro en España, II: Genealogía, origen y noticias de los comediantes de España, Londres, Tamesis Books, 1985, págs. 427, 448 y 559; M.ª A. Flórez Asensio, Teatro musical cortesano en Madrid durante el siglo XVII: espacios, intérpretes y obras, tesis doctoral, Madrid, Universidad Complutense, Facultad de Geografía e Historia, 2004, t. III, págs. 101-107, y t. IV, docs. n.º 67, págs. 130-132, n.º 71, págs. 135 y n.º 80, págs. 157-163; T. Ferrer Valls, Diccionario biográfico de actores del teatro clásico español (DICAT), Kassel, Reichenberger, 2008; J. Bermejo Gregorio, La dramaturgia poético-musical de Antonio de Zamora. Estudio de las fiestas reales barrocas en un autor de finales del siglo XVII y principios del XVIII. Tesis doctoral. Universidad de Barcelona. Facultad de Filología, 2015, pág. 862.
María Asunción Flórez Asensio