Vega, Antonio de. León, 25.V.1681 – 1749. Platero.
Platero oriundo de León, ciudad en la que residió a lo largo de sus sesenta y ocho años de vida, fue un laborioso artista destacado por ser el principal representante de la platería barroca de la capital del Bernesga. Además de atender su propio taller desempeñó otros cargos como el de maestro platero de la catedral o el de fiel contraste municipal, este último durante treinta y cuatro años. Se le reconoce autor de las obras de platería más importantes de este centro durante la primera mitad del siglo XVIII.
Formado como platero en el taller del también leonés Manuel Saurina, asistió en este obrador durante los seis años en que quedó fijada la duración de su aprendizaje.
Perfectamente formado como orfebre, a partir de 1711 y hasta su muerte, Antonio de Vega ocupó el puesto de maestro platero de la iglesia mayor de León. Como tal se le reconocen algunas obras.
Fue, sin embargo, al frente de su taller y tienda donde Vega desarrolló su principal obra. Más o menos treinta piezas con sus marcas de artífice, casi todas ellas de carácter religioso, se conservan distribuidas entre colecciones privadas y localidades de la antigua y la actual Diócesis de León.
En el conjunto de piezas que en 1715 labró para el santuario de la Virgen del Camino demuestra una notable capacidad técnica, un conocimiento profundo de la platería del siglo XVII y el derroche decorativo más grande de toda su obra, con abundante ornamentación repartida principalmente entre las columnas, el cielo y otros elementos del voluminoso baldaquino de la Virgen.
La importancia que la figura de Antonio de Vega tuvo en el arte de la platería leonesa va más allá de la calidad de sus obras. Fue un platero que, además de haber labrado las piezas más representativas del estilo barroco pleno en León y haber rescatado algunos modelos propios de la tradición de la platería leonesa de finales del siglo XVI, su legado supuso el tránsito de este arte desde la baja producción reconocida durante último tercio del siglo XVII al restablecimiento en líneas generales de lo que suponía la producción de piezas de plata en los talleres castellanos durante la primera mitad del siglo XVIII.
Obras de ~: Intervención en la custodia de Enrique de Arfe, catedral, León, 1711; Baldaquino de la Virgen del Camino, La Virgen del Camino (León), 1715; Pareja de cetros para iglesia de San Marcelo, León, 1725; Cruz procesional para iglesia de San Juan de Regla, León, 1728; cruz procesional, La Seca (León), 1730; Cruz procesional, La Mata de la Riva (León), 1739.
Bibl.: M.ª V. Herráez Ortegas, “Los contrastes y marcadores de la platería leonesa en los siglos XVII y XVIII”, en Estudios Humanísticos (León), 21 (1999), págs. 263-274; J. Alonso Benito y M.ª V. Herráez Ortega, Los plateros y las colecciones de platería de la Catedral y el
Javier Alonso Benito