Valero Martín, Alberto. Madrid, 8.IV.1882 – 14.IX.1941. Escritor y abogado.
Alberto Valero Martín era hijo del escritor, periodista y abogado, fundador de la Unión Hispanoamericana, Juan Valero de Tornos. Al igual que su padre, Valero Martín se dedicó profesionalmente al Derecho y de forma simultánea a la literatura. Tras iniciarse literariamente como poeta con Ninón (1909), Valero Martín pronto se dedicó de forma casi exclusiva a la prosa.
Según Rafael Cansinos-Asséns, durante la década de 1910 Valero vivió entre Salamanca, de donde era su mujer, hija del director del diario local El Adelanto, y Madrid, donde frecuentaba las tertulias en casa de Carmen de Burgos, Colombine. Su obra de esos años cubre un registro amplio dentro de las diversas corrientes estéticas y temáticas que dominaron la producción en las páginas de la prensa gráfica y las colecciones de novela corta de las décadas de 1910 y 1920, de las cuales Valero Martín fue un colaborador regular. Las novelas reunidas en La moza del mesón (1915) se mueven entre el castellanismo y el erotismo en ambientes de provincias, aunque su obra castellanista más importante es Castilla Madre. Salamanca (1916), dedicada a su ciudad adoptiva y que reúne en su pórtico poemas de Miguel de Unamuno, Gregorio Martínez Sierra, Salvador Rueda, Eduardo Marquina y Francisco Villaespesa. Valero Martín se adentró también en el tema las vidas marginales con La poesía de los miserables (1924), en una línea similar a la de Emilio Carrere, al que Valero estaba muy próximo a mediados de los años diez, fundando con él el periódico Gil Blas, y Alfonso Vidal y Planas, a quien se ocupó de defender en 1923 en el juicio por el asesinato de Luis Antón de Olmet. Con este último colaboró en uno de sus pocos intentos teatrales, ¡No matarás! (1924). Su figura literaria se difumina hasta desaparecer desde principios de la década de 1930, después de haber pasado unos años de triunfo literario en la década anterior como escritor en exclusiva para La Novela de Hoy de Artemio Precioso, dedicado casi ya por completo a la novela erótica.
Desde entonces sus actuaciones más visibles serían como abogado, por ejemplo, la defensa del general Sanjurjo después del intento de golpe de Estado de agosto de 1932. Durante la guerra civil, que pasó en zona republicana, fue un activo defensor de los derechistas encarcelados en calidad de abogado. Acabada la guerra tres sonetos suyos, dedicados a Millán Astray, José Antonio Primo de Rivera y Calvo Sotelo, fueron recogidos en la antología Cancionero de la guerra (1939).
Obras de ~: Ninón (poesías), pról. de A. Zozaya, Madrid, Gregorio Pueyo, 1909; La moza del mesón (novelas castellanas), Madrid, Establecimiento tipográfico de la Sociedad Editorial Española, 1915; Castilla madre. Salamanca (De la tierra, de las piedras y de los hombres), Madrid, Renacimiento, 1916; Las poesías de los miserables y otros poemas (Aguafuertes de la cárcel, del arroyo y del hospital), pról. de A. Ossorio Gallardo, impresión de lectura de A. Vidal y Planas, versos de A. Camín, L. Roldán y F. Villegas, Madrid, Renacimiento, 1924; con A. Vidal y Planas, ¡No matarás! (drama español en tres actos), Madrid, Prensa Popular, 1924 (col. La Novela Teatral, 412).
Bibl.: “Valero Martín (Alberto)”, en Enciclopedia Universal Ilustrada Europeo-Americana, vol. LXVI, Primera Parte, Madrid, Espasa Calpe, 1929, pág. 728; R. Cansinos Asséns, La novela de un literato, Madrid, Alianza Editorial, 2005, A. Riera Guignet, Ideología y texto en la obra de Emilio Carrere, tesis doctoral, Barcelona, Universitat de Barcelona, 2005.
Eduardo Hernández Cano
