Bonal Vaca, Antonio. Castroverde de Campos (Zamora), c. 1549 – ¿Madrid?, 1638. Juez, consejero de Castilla.
Hijo del licenciado Pedro Bonal, natural de Castroverde e hidalgo al servicio del duque de Frías, y de Isabel de Encalada, nacida en Villalpando. Fueron sus abuelos paternos Lope Bonal y Elvira Vacas, ambos de Castroverde, y los maternos el licenciado Antonio Encalada y María Garcías, los dos de Villalpando. A los veintisiete años, Antonio Bonal ingresó en el Colegio de Santa Cruz de Valladolid, en cuya universidad regentó las cátedras de Instituta, Código (1578), Digesto Viejo (1579) y Vísperas de Cánones (1581), además de ser nombrado rector el 10 de noviembre de 1583. Tres años más tarde inició su carrera judicial ocupando una plaza de oidor de la Chancillería de Valladolid, vacante por fallecimiento de Pedro Márquez de Prado y de la que tomó posesión el 7 de junio. Al año siguiente obtuvo el grado de doctor en una ceremonia pomposa a la que asistieron el príncipe de Éboli y los marqueses de Monterrey y de Aguilafuente. El obispo de Ávila, Jerónimo Manrique, había sido encargado de visitar y controlar la Chancillería de Valladolid, y como resultado de la misma, Bonal fue trasladado el 18 de marzo de 1593 a la de Granada. Estando la Corte en Valladolid, juró el 20 de abril de 1602 una plaza de oidor de la Contaduría Mayor de Hacienda, vacante por promoción de Luis Maldonado a consejero de Indias. En estos momentos, Bonal integraba el grupo de personas de confianza del valido Lerma, y el 14 de marzo de 1604 se expidió su título de nombramiento como consejero supernumerario de Castilla, omitiéndose el trámite regular de proponer previamente el Consejo de la Cámara a los candidatos. Por cédula despachada el 20 de noviembre de 1612 se le concedió hábito de Alcántara, y por otra de 10 de agosto del año siguiente sucedió a Francisco de Contreras en el Consejo de Hacienda, en una de las dos plazas vespertinas correspondientes a los consejeros de Castilla. Como consejero de Hacienda percibiría un salario anual de cien mil maravedíes que se sumaban a otro medio millón de consejero de Castilla. En 1618 desempeñó la presidencia del Concejo de la Mesta.
La primera medida que adoptó Felipe IV al acceder al trono en 1621, tras la lectura del testamento de su padre, fue jubilar a los consejeros de Castilla Tapia y Bonal, odiados por el pueblo y de los que eran notorios y públicos su codicia y enriquecimiento injusto.
No obstante, dos años más tarde fueron rehabilitados en sus plazas respectivas. Bonal fue jubilado definitivamente el 11 de enero de 1628, pero conservando su salario íntegro y casa de aposento. Había contraído matrimonio con Mariana del Castillo, que falleció el 3 de diciembre del año siguiente.
Fuentes y bibl.: Archivo General de Simancas (Valladolid), Quitaciones de Corte, leg. 7; Archivo Histórico Nacional (Madrid), Estado, leg. 6408; Órdenes Militares, expedientillo 13263; Consejos, lib. 724.
F. de Quevedo, Obras completas, est. prelim., ed. y notas de F. Buendía, Madrid, Aguilar, 1961; J. M. Pelorson, Les Letrados, juristes castillans sous Philippe III, Le Puy-en-Velay, Université de Poitiers, 1980; G. Gascón de Torquemada, Gaçeta y nuevas de la corte de España desde el año 1600 en adelante, ed. de A. de Ceballos-Escalera y Gila, marqués de la Floresta, Madrid, Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía, 1991; C. Domínguez Rodríguez, Los Oidores de las Salas de lo Civil de la Chancillería de Valladolid, Valladolid, Universidad, 1997; J. M.ª de Francisco Olmos, Los miembros del Consejo de hacienda en el siglo xvii, Madrid, Castellum, 1999; R. Gómez Rivero, “Consejeros de Castilla de Felipe III”, en Anuario de Historia del Derecho Español, t. LXXIV (2004).
Ricardo Gómez Rivero