Tobar (o Tuar), José de. Calahorra (La Rioja), c. 1638 – c. 1710. Retablista.
Nacido en Calahorra hacia 1638, localidad donde fallecería hacia 1710, su biografía hay que asociarla indefectiblemente a las de su progenitor, Pedro, a su hermano Baltasar y a su propio hijo del mismo nombre, todos ellos arquitectos de retablos, habida cuenta de las numerosas ocasiones en que aparece colaborando con éstos en los más variados menesteres. Casado con Ana María Berenguel, natural de Autol, el 3 de febrero de 1664 confesaba haber recibido un listado de bienes como dote por parte de la familia de su esposa.
Convertido en uno de los arquitectos de retablos riojabajeños más significativo de la segunda mitad del siglo XVII, es decir, de un momento crítico de cambio de estética que supone el abandono definitivo de las fórmulas clasicistas bajo la fuerte presión de la columna salomónica. Sus obras acabarían impregnadas de un fuerte contenido ribereño con matices tudelanos y zaragozanos, según se percibe en el aparato decorativo que incorporan. Fue autor, en compañía de Baltasar, del colateral de San Sebastián para El Villar de Arnedo que ambos contratan el 26 de abril de 1663, de seis cajones para la sacristía de la catedral de Calahorra, también en colaboración con su hermano Baltasar según concierto del 5 de mayo de ese mismo año, del retablo para la Capilla de la Soledad en el convento franciscano de dicha ciudad por deseo expreso de su propietario Celedonio Martínez Mazaterón y Velasco, protonotario apostólico, materializado en escritura de 26 de septiembre de 1663. También se encargó de las trazas para el monumento sufragado por la iglesia de San Andrés de Calahorra, con motivo de la visita del obispo, que realizaría José de Ortega (1687), y del retablo mayor de la iglesia de San Cosme y San Damián en Arnedo formando compañía con Sebastián de Sola y Calahorra. Después de valorar las posibilidades que ofrecía la columna salomónica asociada a un ático conquiforme (1671), no sorprende que el monasterio de San Prudencio le encomendara la fábrica del relicario para su retablo mayor, ya con un claro lenguaje salomónico (1675), o que el Ayuntamiento de Corella, en representación de sus intereses, le encargara el reconocimiento del retablo mayor de la iglesia de Nuestra Señora del Rosario de esa localidad, una vez terminado en 1679 por Sebastián de Sola y Calahorra y Francisco de Gurrea.
En 1691 traspasaba a Andrés Calvo la conclusión de la cajonería para la sacristía de la iglesia de Briones. Él también fue quien dio trazas para reconstruir la capilla mayor del convento franciscano de Vico en Arnedo y su retablo mayor (1693 y 1694), lo que prueba una vez más su versatilidad y talante renacentista, y el encargado de amueblar, junto con Martín de Arrochi y siguiendo su propio proyecto, la sacristía que se acababa de construir en la iglesia de Ausejo (1697). Pero su obra cumbre, sin lugar a dudas, es la cajonería de la sacristía de Autol con sus respaldos y cresterías, aparte de aprovechar su estancia en esa población para dar trazas para el retablo de la ermita de la Cueva que haría su hijo (1698). Vecino de Autol seguía siendo en 1699 cuando se comprometía a terminar el colateral de la Antigua para la iglesia de San Cosme y San Damián de Arnedo y otro más de San Bartolomé, junto con su hijo José, para ese mismo templo (1700). En 1702 se adjudicaba incluso la realización del retablo mayor de la colegial de San Miguel en Alfaro ante la frontal oposición del Ayuntamiento. También en la última fase de su vida era llamado a Haro para dar trazas y condiciones para el relicario del retablo mayor (1710).
Obras de ~: colateral de San Sebastián para El Villar de Arnedo, cajones para la sacristía de la catedral de Calahorra y retablo para la Capilla de la Soledad en el convento franciscano, Calahorra (La Rioja), 1663; retablo mayor de la iglesia de San Cosme y San Damián, Arnedo (La Rioja), 1671; relicario para el retablo mayor, monasterio de San Prudencio (La Rioja), 1675 (desapar.); participación en la fábrica de la cajonería de la iglesia, Briones (La Rioja), 1691; mobiliario para la sacristía de la iglesia, Ausejo (La Rioja), 1697; cajonería, respaldos y cresterías de la iglesia, Autol (La Rioja), 1698; trazas para el retablo de la ermita, La Cueva (La Rioja), 1698; colateral de la Antigua para la iglesia de San Cosme y San Damián, Arnedo (La Rioja), 1700; colateral de San Bartolomé para la iglesia de San Cosme y San Damián, Arnedo (La Rioja), 1700.
Bibl.: M.ª C. García Gainza et al., Catálogo Monumental de Navarra, t. I (Merindad de Tudela), Burlada (Navarra), Institución Príncipe de Viana, 1980; J. M. Ramírez Martínez y J. M.ª Ramírez Martínez, La Escultura en La Rioja durante el Siglo XVII, Logroño, Instituto de Estudios Riojanos, 1984; J. M. Ramírez Martínez Retablos Mayores de La Rioja, Agoncillo (La Rioja), Labelgrafic, 1993; Briones y sus Monumentos, Logroño, Gráficas Quintana, 1995.
José Manuel Ramírez Martínez