Vázquez, Rodrigo. ?, s. t. s. XIII – p. m. s. XIV. Undécimo maestre de la Orden de Alcántara.
Oriundo de tierras orensanas de Galicia, era hijo de Vasco Fernández Verganciano y de su mujer Elvira.
Cuando sucedió al fallecido maestre Gonzalo Pérez Gallego al frente de la Orden de Alcántara, en octubre de 1316, su carrera en el interior de la milicia era ya larga. Ingresó en ella en los días del maestre García Fernández, por consiguiente antes de 1284, y lo hizo asistido por dos de sus tíos, Pedro Rodríguez y Juan Pérez, que eran comendadores alcantarinos de Toro y Zamora, respectivamente. Fueron varias las encomiendas de que fue titular Rodrigo Vázquez, concretamente Benquerencia, Valencia de Alcántara y Magacela, y en el momento de su elección disfrutaba la dignidad de comendador mayor.
El maestrazgo de Rodrigo Vázquez fue extraordinariamente breve, poco más de un año en el que apenas le dio tiempo a recuperar el préstamo de 3000 doblas que la Monarquía había contraído con la Orden en los días de su predecesor, y que le había supuesto a la milicia la tenencia del alcázar de Trujillo, y a acompañar al infante don Pedro, uno de los tutores del Rey, a algo más que una razzia por la vega de Granada en la que en el transcurso de 1317 fue tomado el castillo de Bélmez.
Ya en enero de 1318 tuvo lugar el proceso de destitución del maestre, el primero que registra formalmente la historia de la Orden. En aquella fecha, en efecto, el maestre de Calatrava, García López de Padilla, en calidad de visitador, y acompañado por el obispo de Coria y los abades cistercienses de Valparaíso y Valdeiglesias, hizo acto de presencia en la sede conventual de Alcántara en respuesta a las quejas y agravios formulados ante él por un significativo grupo de dignidades y freires de la orden extremeña. Rodrigo Vázquez, a quien seguía el comendador mayor, el clavero, el sacristán y una docena de comendadores, impidió la entrada en las dependencias conventuales de la comitiva visitadora y, tras unos días de forcejeo, tuvo lugar, con el acuerdo de la mayor parte del capítulo, la solemne destitución del maestre rebelde y la inmediata elección de su sucesor, Suero Pérez, en aquel momento comendador de Benquerencia.
Resulta hoy muy difícil dar una explicación satisfactoria a una crisis institucional tan relevante. Aparentemente estamos ante una auténtica rebelión capitular —aproximadamente unos sesenta miembros de la Orden, comendadores y freires, frente a unos quince partidarios del maestre— que, con el apoyo de la poderosa Orden de Calatrava y los correspondientes representantes cistercienses, habría puesto fin a un gobierno presumiblemente autoritario. El problema de esta explicación radica en que Rodrigo Vázquez apenas pudo haber puesto en marcha un programa centralizador en un año de gobierno, si bien es verdad que las “quejas y agravios” capitulares bien podían ser expresión de un descontento acumulado manifestado de modo circunstancial frente a un maestre continuista.
Sea así, o que simplemente se esté ante una consecuencia más de la turbulencia política que acompaña a la minoría de Alfonso XI, lo cierto es que Rodrigo Vázquez no se conformó con la sentencia de destitución y, tras encastillarse en Valencia de Alcántara, apeló al capítulo del Cister. Éste, a través del abad de Morimond, confirmó su cese y la elección de Suero Pérez, y sólo entonces Rodrigo Vázquez admitió su derrota y aceptó la autoridad del nuevo gobierno maestral, del que recibió en compensación la encomienda de Magacela. Se desconoce el año de su muerte, pero sí que fue enterrado en la iglesia de Santa Ana que, siendo maestre, había mandado edificar en aquella localidad.
Bibl.: F. de Rades y Andrada, Chronica de las Tres Ordenes y Cauallerias de Sanctiago, Calatraua y Alcantara, parte Chronica de Alcantara, Toledo, Juan de Ayala, 1572 (ed. facs., Barcelona, 1980), fols. 14v.-16r.; A. de Torres y Tapia, Crónica de la Orden de Alcántara, Madrid, Imp. de D. Gabriel Ramírez, 1763, I, págs. 505-519; B. Palacios Martín (ed.), Colección Diplomática Medieval de la Orden de Alcántara (1157?-1494), I. De los orígenes a 1454, Madrid, Editorial Complutense, 2000, págs. 323-325; F. Novoa Portela, “Los maestres de la orden de Alcántara durante los reinados de Alfonso XI y Pedro I”, en Historia. Instituciones. Documentos, 29 (2002), págs. 317-335; “Algunas consideraciones sobre los Maestres alcantarinos desde el nacimiento de la Orden hasta 1350”, en Revista de Estudios Extremeños, 59 (2003), espec. pág. 1072; C. de Ayala Martínez, Las órdenes militares hispánicas en la Edad Media (siglos XII-XV), Madrid, Marcial Pons, 2003, págs. 312, 397 y 664.
Carlos de Ayala Martínez