Yeregui Echegaray, José Miguel. Vergara (Guipúzcoa), 19.VII.1734 – Madrid, 1.VI.1804. Sacerdote y teólogo, consejero de Inquisición.
Hijo de un escultor que desarrolló una larga trayectoria profesional en la cantera del Palacio Real de Madrid. Recibió sus primeras lecciones de Teología en el Colegio de San Dionisio del Sacro Monte de Granada, donde nacería su afición al estudio de la física experimental. Completó su formación teológica y científica en el Colegio Imperial de Madrid (1755) y en París, antes de ser nombrado en 1760 capellán y maestro de los caballeros pajes de la Corte. En 1768 es honrado con el cargo de maestro de los infantes don Gabriel y don Antonio Pascual para impartir las disciplinas científicas, tarea docente que desarrollaría bajo la autoridad de Pérez Bayer y en compañía del padre Vicente Blasco, encargado de las materias literarias.
Finalizada la educación de los infantes, en 1781 se retiró a Cadalso de los Vidrios (Madrid) para entregarse a la enseñanza de los más jóvenes en una escuela que construiría a sus expensas. Sería entonces cuando crecerían entre el clero local, primero, la oposición a su pensamiento y doctrina, y más tarde, las denuncias y delaciones ante la Inquisición, que en el otoño de 1792 le abriría un proceso con noventa y ocho cargos formulados contra él. Su sólida formación intelectual y teológica le sirvió para plantear una brillante defensa conocida gracias a una relación manuscrita que Yeregui escribió un año después, tras ser declarado inocente. Un descargo doctrinal en toda regla, desarrollado de forma autobiográfica, que ha dado justa fama a su autor. A lo largo de sus cuatrocientos ochenta y seis párrafos se modela el pensamiento de un personaje inmerso en la corriente jansenista que con tanta fuerza había arraigado en el alto clero español, partidario de una religiosidad más estricta y que aborrecía a la Compañía de Jesús. Su rehabilitación se completó de forma significativa en julio de 1793, cuando fue nombrado ministro del Consejo de la Inquisición. En los últimos años de su vida se significó como un miembro activo del grupo neo-jansenista creado en torno a la condesa de Montijo y la familia Lugo. En la capital intelectual de este movimiento publicaría en 1803 su Catecismo Nacional.
Obras de ~: Discurso pronunciado en la Junta General de la Asociación de Caridad a favor de los pobres presos en las cárceles de Madrid celebrada para la elección de oficio, Madrid [1801]; Idea de un Catecismo Nacional, formado sobre las Sagradas Escrituras, Concilios y Padres de la Iglesia, Bañeras, 1803.
Bibl.: J. Demerson, “Los dos testamentos de don Josef Yeregui”, en El siglo que llaman ilustrado. Homenaje a Francisco Aguilar Piñal, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, 1996, págs. 245-252; J. Demerson, “José Miguel de Yeregui: Una vida al servicio exclusivo de Dios”, en Boletín de la Real Sociedad Bascongada de los Amigos del País, LIII (1997), págs. 3-122.
Juan Luis Blanco Mozo
